MONDOSONORO SUR MARZO 204

Obituario indie

MONDO SUR

afirma José Olmo Cano. “Por esa distinción de la que hablábamos antes hemos asumido que el indie debe ser minoritario, alejado del mainstream y no comercial, pero es interesante atender a las ideas de uno de los nombres capitales de esta historia, como es el de Geoff Travis, fundador del sello Rough Trade. Él defendía que el propósito de la independencia era el de llegar a las grandes audiencias haciendo las cosas de otra manera, subvirtiendo las normas establecidas por los grandes sellos, que dejaban fuera del negocio muchas propuestas artísticas a las que no veían una clara viabilidad comercial. Y, en ese sentido, esa naturalidad con la que ahora se encuentran ambos polos supone el reconocimiento de esa otra forma de hacer las cosas”

“José Olmo Cano reflexiona en el ensayo “Indie”sobre la construcción de lo que define como un no género musical preso de sus connotaciones y contradicciones”

Marzo ventoso. Vientos de cambio o por lo menos, de otros aires. El indie despide a parte de sus fundadores a la vez que revisa sobre el papel y sobre la gran pantalla su origen y por enésima vez, su significado. “Segundo Premio” la película de Isaki La Cuesta o el libro “Indie” del jiennense José Olmo avivan el eterno debate.

El tiempo impone su ley. Este año asistimos a emotivas ceremonias de despedida y, a la vez, a interesantes ejercicios de revisionismo. Faltarán pañuelos para el lagrimeo torrencial que se espera en el adiós a Niños Mutantes, que ponen fin a tres décadas de carrera que abarcan el indie español en prácticamente toda su longitud. Una línea temporal que conocen bien sus paisanos Los Planetas, que durante este 2024 realizarán una gira con motivo del trigésimo aniversario de Super 8, su primer álbum. Lo interpretarán íntegramente en estos conciertos, que coincidirán con el eco de la película Segundo premio. Y los también granadinos Lagartija Nick, protagonistas de la hornada bisagra que allanó el campo a la explosión indie en los noventa en España, son objeto de otro filme, Generación Lagartija, dirigido por Cesar Martínez He-

rrada, responsable asimismo del reciente documental sobre Eric Jiménez Ha pasado demasiado tiempo de casi todo. Eso deben pensar los madrileños Havalina, que este año brindan una serie de actuaciones para poner fin a más de dos décadas de trayectoria. Otros se fueron y vuelven, como sus paisanos Nudozurdo. El indie español se ha hecho mayor y brega con sus idas y venidas.

Ser indie en 2001 suponía situarse en el extremo opuesto a la España de Operación Triunfo, al calor de aquella Radio 3 de Jesús Ordovás y Julio Ruiz. Ahora, Guille Milkyway enseña la historia del pop a los concursantes del programa televisivo y una ganadora como Amaia entra directamente y con naturalidad en el circuito de lo alternativo. ¿Al final los polos se han terminado abrazando?

“Es el triunfo de la independencia”,

PERO. ¿QUÉ ES EL INDIE?

José Olmo Cano reflexiona en el ensayo Indie (Almuzara), con una perspectiva que barre hacia lo local, sobre la construcción de lo que define como un no-género musical preso de sus connotaciones y contradicciones. Puede que la sola idea de encarar un ensayo sobre el indie a estas alturas del partido provoque un sonoro bostezo en el lector. Es comprensible. Hablamos de un término sobado hasta el desgaste. Y de una música —una suerte de género de géneros— muy asumida ya en sus múltiples formas, cuyas vetas más experimentales devienen hoy, con lo que tenemos encima de nubes misceláneas y atomizaciones expresivas, en bisoños ejercicios de estilo. Pero, reconozcámoslo, la palabra de marras ha sido objeto de acaloradas discusiones a lo largo de nuestras melómanas trayectorias. Desde luego, más en el pasado que ahora. Una vieja cantinela: que si marchamo de autenticidad, que si postura autónoma ante la industria…

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FOTOGRAMA:

Todo es cuestionable. Y todo se vislumbra con perspectiva en estos años veinte. El hecho de lo indie no significa lo mismo para quien vibró con ciertos discos en los ochenta y los noventa que para quien se abonó a la ola festivalera tras el efecto Vetusta Morla. Por eso resulta interesante el punto de vista de José Olmo Cano, jienense natural de Martos y nacido en 1989, autor de Indie. La construcción de un no-género musical (Almuzara). Un aviso: no se trata de un volumen plañidero. El autor es licenciado en Historia y Ciencias de la Música, con másteres en Música Hispana y Comunicación y Cultura, y ha publicado artículos científicos, aunque también ha cultivado la escritura sobre rock.

Para Olmo Cano, la etiqueta indie perdió significado en los ochenta, “desde el momento en que se cargó de acepciones que iban más allá de la referida a la independencia”. Este ensayo no retoma el debate cansino de la hegemonía cultural —aquel discurso reculó cuando irrumpió el trap en 2015, del mismo modo que Rosalía hace tiempo que dejó de ser la salvadora del flamenco—, pero revalida la teoría del narcisismo: “En mayor o menor medida, todos tenemos nuestro punto narcisista, nuestra necesidad de distinción y reconocimiento. La música siempre ha servido a ese propósito, pero quizá con lo indie es donde lo hemos visto más acentuado y explotado”, admite.

Hablar del indie desde el prisma español implica transitar referencias cercanas. Por estas páginas desfilan muy a menudo nombres como Lori Meyers, Los Planetas o Sr. Chinarro. “La etiqueta tiene plena vigencia, se ha consolidado para definir no sabemos qué sonido y se sigue usando con frecuencia para etiquetar grupos, festivales y para crear listas de reproducción en Spotify. Es la forma de llegar al consumidor de música indie”, apunta José.

¿Y por qué ahora un estudio sobre el indie? “Porque estaba esperando que lo hiciese alguien”, replica. “Me sorprende que, con lo controvertido que ha sido el término, nadie se haya parado a hacer una reflexión profunda sobre el mismo, más allá de algún artículo periodístico o académico en los que los autores ponen más empeño en defender su idea subjetiva de indie que en intentar entenderlo”.

Al final, Olmo Cano resuelve que el atractivo de la etiqueta viene dado por los valores subjetivos que poco a poco la fueron alimentando. “Es un proceso complejo que desarrollo en el libro y que tiene mucho que ver con cuestiones de identidad. De cómo nos vemos a nosotros mismos y de cómo queremos que nos vean. Usamos el consumo de todo tipo de productos y marcas para crearnos una identidad y diferenciarnos de la masa, y esa idea también es aplicable al consumo musical. Un ejemplo claro lo vemos en las tribus urbanas que se han constituido en torno a diferentes géneros musicales. Y, por supuesto, que la etiqueta indie sea un éxito comercial es excelente para la industria, que vende autenticidad, como antes el rock”. Así que el palabro aún genera controversia. ¿De qué hablamos cuando hablamos de indie? —EDUARDO TÉBAR

Mondo

“La gente en Suiza canta y baila como si estuviéramos tocando en Murcia.”

Eskorzo

Treinta años dan para mucho amor. Para derrocharlo, para infringirlo e incluso para padecerlo. Historias de amor y otras mierdas es el mejor diario emocional con el que Eskorzo podían celebrar estas tres década de idilio con la música -y otras mierdas también-.

Desde sus comienzos, allá por el 95 del siglo pasado, el lazo sentimental de los granadinos con la música en mayúsculas proviene, precisamente, de su promiscuidad estética. Historias de amor y otras mierdas (Calaverita Records y Maracuyeah!, 2023) va de eso, de abrazar tu propio destino y seguir llamándolo amor.

Lograr tener un sello propio en el negocio de la música es algo que lleva años, décadas y hasta una carrera; no es el caso de Eskorzo, siguen a pies juntillas la fórmula; “creyendo en lo que haces y llevándolo con orgullo. Entendemos que todas las músicas son mestizas por naturaleza. Pongamos por ejemplo el flamenco, un estilo que viene del mestizaje y la fusión de muchas culturas y músicas. Seguir subiéndonos a los escenarios después de casi 30 años es un sueño cumplido para nosotros.” Este disco, tan Romancero Gitano, “deambula alrededor del concepto del amor, un sentimiento con muchas aristas y habla de temas como el amor tóxico, el apego… el buen y el mal querer.” Todo en ello está cuidado al milímetro, empezando por la portada y las ilustraciones en su edición gatefold; obra de Asís Percales, quien “aporta mucho porque ha comprendido el concepto del disco y de cada canción desde el principio. Desde que conocimos la obra de Asís tuvimos la

corazonada de que él era el artista idóneo para Historias de Amor y Otras Mierdas y así ha sido. La comunicación y el trabajo en común ha fluido desde el minuto uno y estamos realmente alucinando con el excelente trabajo que ha hecho.” Y no es fácil en tiempos del fast-food musical crear una obra de encaje conceptual; “somos de la vieja escuela y desde las canciones y el orden en que aparecen hasta el diseño visual del álbum debe tener relación.” Para que todo fluya tal y como ellos quieren, han echado mano de Nidia Góngora, La Pegatina, Francisco el hombre y Rozalén; “Siempre nos ha gustado rodearnos de compadres y comadres en nuestros discos y crear un vínculo musical y personal con otros artistas. Sin ellos y ellas las canciones de este disco no serían lo mismo. Siempre se quedan muchos artistas en el tintero, pero lo bueno es que habrá más discos y canciones que compartir.” Todas estas respuestas las dan en plena gira de promoción del álbum; “estamos contestando esta entrevista desde Suiza en nuestro segundo concierto de la gira y ayer fue apoteósico. Un gran recibimiento en Ginebra. La gente se hace polvo y no notamos diferencia con nuestros conciertos en España. La gente baila y canta como si estuviéramos tocando en Murcia.” Su primer sencillo, Ángeles y Demonios, es un clásico calambur; un ritmo atronador consigue el

encaje de todas las piezas para que no dejes de bailar; “es que hay un montón de estilos. Desde la jota aragonesa hasta el merengue, pasando por la polka. Todo depende como te guste mover las caderas.” Los Eskorzo, rara avis, no han agotado su fórmula habiendo transcurrido el cuarto de siglo, la fórmula es clara y concisa: “No aburrirnos y disfrutar de lo que hacemos. La música tiene una gran cantidad de colores y matices, tantos como para no aburrirse. Siempre habrá un estilo nuevo que crear o que descubrir.” Desde Granada, de donde el bardo García Lorca, surge con ellos la metanoia del amor, la música y la tierra; “Andalucía y Granada siempre ha sido un cruce de caminos de música y cultura. Somos un pueblo mestizo por naturaleza y eso se refleja en nuestra manera de expresarnos y sentir la vida.” El disco que presentan se centra en esas “historias de amor y otras mierdas”, de la que todo el mundo alguna vez se ha visto salpicado; “La vida está llena de historias de amor y otras mierdas y de lo que tratan las canciones son vivencias comunes que le pueden ocurrir a cualquiera. ¿Quién no ha amado plenamente o ha llorado por amor?” Seguirán esa senda que se marcaron al inicio de los tiempos, y cuyo horizonte está más que claro; “Hacia un futuro sin autotune ni cambio climático…”

OZANTOÑO TORRES

eSCAPaRATe

“Tiene como tema principal el paso del tiempo. Como te cambia la perspectiva de las cosas. Incluso aquellas que en el pasado significaron mucho”

AIRBAG

vienen de Málaga publican Vida Extra (Sonido Muchacho)

RR Tras su octavo LP de estudio, Siempre Tropical (22), quizás su disco más completo y definitorio hasta la fecha, los malagueños Airbag reaparecen a escena con una Vida Extra como EP, tres soleados trallazos marca de la casa que, cada una a su manera, tocan la fibra sentimental de principio a fin. Sin lugar a dudas, con más de 25 años de carrera a la espalda, son una de las bandas nacionales que mejor maneja esa alquimia pop de fundir vivencias cotidianas que nos unen y calan hasta los huesos en una canción. El paso del tiempo y las cosas que borramos (pero reflotan) para seguir adelante. Radiante power pop a corazón abierto. Lo que fue, lo que pudo haber sido y lo que será... Historias personales y sinceras que vuelven a situar a Adolfo, Pepe y José Andrés, Airbag, en esa cresta de la ola sonora que surfean como nadie.

Tres nuevas canciones que, por la calidad y lo trabajada que están, podían haber compartido surcos con las once canciones de Siempre Tropical, pero que “llegaron un poco tarde a la grabación del disco, estaban sin terminar, solo estaban más o menos clara las bases, pero faltaba todo lo demás, letras, arreglos, etc. Así que aprovechamos que estábamos en el estudio para adelantar trabajo y grabar ya las baterías y el bajo. Decidimos dejarlas para un EP, además nos gustan los discos cortos y no queríamos meter más de diez canciones en Siempre Tropical, al final metimos once porque “Todo Mal” dura 27 segundos”. Una brillante pieza instrumental y dos zarpazos directos al lado izquierdo del pecho. Primero, la titular, Vida extra, ese recuerdo imborrable de aquel gran amor que, aunque nos quede el resquemor amargo y nuestra memoria quiera rehuir de ella o él, siempre termina por reflotar cuando menos te lo esperas: “Habla en parte de amor, pero en realidad tiene como tema principal el paso del tiempo, cómo te cambia la perspectiva de las cosas, incluso de aquellas que en un pasado significaron mucho. El paso del tiempo es un tema que, a cierta edad, empieza a preocupar mucho. Y creo que es honesto hablar siempre de lo que a uno le preocupa de verdad. Cuando se expresan sentimientos personales reales y logras plasmarlo bien en el texto, las canciones suelen ser mejores”. Una “Vida extra” en la que palpamos ese extraño y necesario “mecanismo de defensa” que todos y todas tenemos,

por un lado, querer borrar los recuerdos de esa persona que quisimos, pero terminó por defraudarnos o hacernos daño de alguna manera; y, por otro lado, inconscientemente, sabemos que lo positivo que vivimos juntos, pesa e importa mucho más que cualquier otra cosa, por lo que la “vida extra” que nos queda, está marcada por esas pegadizas “tantas cosas que hicimos juntos por primera vez” de cierre: “Tendemos a recodar más las cosas malas y a veces olvidamos las buenas, creo que es injusto, a la larga hay que intentar sacar lo bueno de cada momento o cada etapa de la vida La canción tiene ese final porque intenta resaltar eso que, incluso en algo tan lejano que has casi olvidado, hubo momentos importantes que nos marcaron. Nos gusta hacer de vez en cuando canciones que tengan una especie de “punch line” final, un epílogo que sentencie lo que has querido ir explicando antes en la canción. Así son los finales de “La Estrella de la Muerte”, “Marcas en la Hierba”, “Phantasma” o “Eleven & Mike”, ya es casi marca de la casa”.

Menos rendijas para que se cuele la esperanza de todo amor sano y soñado, desprenden los surcos de “Cementerio de Parejas”, a base de la gris monotonía que vemos de cerca y de lejos en muchas relaciones de pareja, muertas en vida por la rutina, la dejadez y la incomunicación: “La letra es pura realidad, es la descripción de un lugar que existía en Málaga, un restaurante chino de barrio donde literalmente había ese ambiente siempre, íbamos allí a beber cerveza porque estaba cerca de una sala de conciertos y lo veíamos. Otra forma de escribir canciones que a mí personalmente me gusta mucho es imaginar las historias de la gente. Allí te dabas cuenta de que siempre iba la misma clientela, parejas tristes del barrio que sólo salían los sábados, siempre al mismo sitio, piden lo mismo, casi sin hablar, transmitiendo aburrimiento y rutina. Ahora ese lugar está derruido, pasamos por ahí el otro día al tocar en La Cochera Cabaret, y ahora lo de “solo quedarán esqueletos, nada más” cobra aún más sentido. Nos flipan las canciones que hablan de lo cotidiano, en cada persona que anda por la calle hay una canción”. La soleada “La piedra del rayo”, con aroma a The Straitjackets, atardecer con olas de fondo y novedosos teclados psicodélicos es el cierre perfecto para volver a levantar el vuelo: “Nos encanta el Surf Instrumental, pero intentamos darle otra vuelta de tuerca y meter otros matices para no hacer siempre la misma canción de ese tipo. En este caso, darle un toque psicodélico con el órgano Hammond muy al estilo de The Doors, una referencia que en principio nadie asociaría a Airbag, pero que nos gusta y era el momento de echarle mano” DAVID PÉREZ MARÍN

“Llevamos dos años, uno en Madrid y dos en Murcia. Le damos el verdadero valor a las cosas. Priorizas el compromiso a ensayar”

CROMO

vienen de Murcia. publican Están aquí’ (Desorden Sonoro) en la onda de Ramones, The Damned, Futuro Terror…

RR Cromo son Vane (batería y coros), Manu (bajo) y Guille (guitarra y voz) y ya ‘Están aquí’, como dice el título de su primer elepé. Un disco que les ha costado lo suyo sacar adelante, pero del que están muy

orgullosos. No es para menos. Lo componen once canciones de punk oscurete, con tramos más melódicos y sin llegar al post punk. Vamos, rollo The Damned, Misfits, Ramones, Buzcocks, Futuro Terror… Lo que les hace tilín, así de sencillo. Y en cuanto a letras, observamos una fascinación por el más allá o la ciencia ficción, mezclado con lo cotidiano. Algo que rompe con la línea de proyectos anteriores de sus miembros (Nueva Generación, Sabotaje, Tumefactum, Pintauñas Negro o Bici Hardcore). “La temática es la típica de esas bandas que tanto

PABLO CUEVAS

viene de Sevilla.

publica Los Cuatro Claveles (Family Spree Recordings)

en la onda de Josele Santiago, Pájaro, Chencho Fernández…

RR Sorpresón la noticia, el mismo año que Los Fusiles han publicado nuevo disco, de que su cantante Pablo Cuevas arranque su carrera en solitario con este Los Cuatro Claveles (Family Spree Recordings). “Bueno, tal vez tras sacar tres discos de rock con Los Fusiles que guardan cierta similitud entre sí me surgió la necesidad de hacer algo diferente que también me entusiasmara de la misma manera. Desde adoles-

cente empezó a interesarme por igual tanto la música de Elvis, Los Beatles o Los Clash como la de Charles Trenet, Gardel, Edith Piaf o Serrat. Sí es cierto que, en lo últimos años, escucho más música de jazz, tango, fado o boleros que rock and roll. Momento perfecto para desarrollar este proyecto en solitario con otros músicos y otros aires”. Impecable definición de lo que es un trabajo en el que el músico se aleja de esos sonidos a los que nos tenía acostumbrados para acercarse a otros que, quizá, solo podíamos percibir en algún guiño de su carrera grupal. Canciones que, tal vez, arregladas de otra manera podrían haber encajado ¿en el repertorio de Los Fusiles?

“Puede que, al menos, un par de ellas. Sí. Tampoco creo que muchas más... En cualquier caso, es normal que ocurra esto teniendo en cuenta que el que compone y canta en ambos proyectos es la misma persona. No obstante, intenté ser cuidado-

nos gustan y con las que compartimos aficiones más allá de lo musical. No son letras muy ambiciosas, pero forman un imaginario bastante claro de lo que es Cromo”. Si algo es Cromo, es una banda de directo. Por eso, El Miradoor de Marco A. Velasco parecía el mejor sitio para grabar estas once canciones. En cambio, llama la atención que aparezca el reputado Carlos Hernández en las labores de producción. ¿Cómo se explica esto? “Aunque parezca una cosa muy pensada para buscar sonar de determinada forma o salirnos de nuestro círculo de acción, es algo mucho más sencillo. Carlos Hernández se podría decir que es compañero de trabajo de uno de nosotros, ya conocía la banda y le molaba. Así que nos ofreció probar con un tema, nos gustó y al final se hizo todo el disco. Currar con Carlos (al igual que con Marco Velasco) es bastante fácil. Un tío bastante claro y que entiende perfectamente lo que quieren las bandas. Aprovechamos para mandarle un saludo y las gracias desde aquí”. Al final, las relaciones humanas marcan la diferencia. Sobre todo, si hablamos de punk y DIY. Esto es lo que permite a la banda organizar sus giras, pese a no vivir todos en la misma ciudad; cosas de haber tocado mucho e ir guardando contactos de aquí y de allá. “Llevamos años tocando por ahí y conservamos buenas amistades, que sabemos será lo único que nos vamos a llevar de la música. Llevamos casi dos años funcionando separad@s, uno en Madrid y dos en Murcia. Aunque es más difícil de gestionar todo, lo estamos llevando bastante bien. Le das el verdadero valor a las cosas, priorizas el compromiso a ensayar”. Va a ser verdad que lo de ensayar está sobrevalorado. VÍCTOR MARTÍNEZ

“Era el momento perfecto para desarrollar este proyecto en solitario. Con otros músicos y otros aires”

so con eso y, otras cosas no, pero eso creo que sí se ha conseguido. Me refiero a poner tierra de por medio a lo que hago solo y lo que hacen Los Fusiles. “La boda civil” y “Mi dimisión” son las dos únicas canciones que podrían haber tenido cabida en un disco de Los Fusiles en uno de sus registros menos usuales”. Eso sí, Cuevas duda sobre el futuro del proyecto. Parece tener claro, y si no ya se lo decimos nosotros, que ha grabado un gran disco, pero aún no sabe si esto será el principio de algo o una simple anécdota en una carrera en la que tiene claro que su banda – afortunadamente para los fans – son Los Fusiles. “Pues a día de hoy aún no sé responderte con exactitud. Puede que sea más anecdotario que otra cosa, quedando el LP Los Cuatro Claveles como excepción. Es muy diferente trabajar con una banda de rock a montarte un tinglado de este tipo por tu cuenta. Todo tiene ventajas e inconvenientes, claro. Con una banda tienes más fácil operar. Los músicos amigos que altruistamente me han ayudado en este disco tienen varios proyectos paralelos y, claro, siempre hay problemas para cerrar fechas de ensayo o bolos. El tiempo dirá qué recorrido le daremos a este disco”. Y ahí estaremos, esperando la decisión. Porque creemos firmemente que la música en este país es mejor con Los Fusiles, pero aún es mucho mejor si además, Pablo Cuevas publica discos como Los Cuatro Claveles EDUARDO IZQUIERDO

MONDOSUR

Música en cuerpo y alma en el Festival de Málaga

El Festival de Málaga se prepara para su vigésima séptima edición en los primeros días de marzo, y entre su variada programación, hay que destacar muchas cintas de contenido y continente musical. En la sección de documentales, fuera de concurso, se presentan propuestas interesantes como Generación Lagartija, de César Martínez Herrada que introduce a los espectadores en un entorno surrealista e innovador, explorando la inspiración que los miembros de la banda recibieron de figuras como García Lorca, Val del Omar o Luis Buñuel. Este no es un simple documental; es un lienzo que se extiende más allá de las notas y acordes, para tejer una narrativa que se entrelaza con las fibras de la vanguardia del siglo XX. Carlos Zapata, por su parte, nos lleva al mundo de María del Mar Rodríguez, conocida como La Mari de Chambao, en un documental titulado Chambao; Veinte años en la música, que muestra su lado más íntimo. Otros dos proyectos destacados son Tivoli, que relata la historia del parque de atracciones y espectáculos de la Costa del Sol, Tivoli World, recordado por sus conciertos. Además, Marisol, llámame Pepa, dirigido y escrito por Blanca Torres, se centra en la figura de Pepa Flores, desentrañando la dualidad entre la persona real y el ídolo de masas.

EL NO BIOPIC DE LOS PLANETAS

En la sección oficial, se estrena Segundo premio. Una oda a la ebullición cultural que marcó la Granada de los noventa. Isaki Lacuesta y Pol Rodríguez, dos nombres que se han labrado un nicho en el cine español con sus narrativas audaces y profundas, se unen en este largometraje para contar una historia que es, y a la vez no es, sobre Los Planetas. Es una promesa de nostalgia, un espejo retrovisor al que nos asomamos para contemplar los días de un indie que, aún en su gestación, estaba destinado a redefinir el sonido de una generación.

El certamen recupera los conciertos de su FM Festival, con cuatro citas en la sala París 15, protagonizadas por artistas representativos de la escena independiente española. El 1 de marzo FM Festival se inaugura a la par que el 27 Festival de Málaga con una noche especial que nos traerá de vuelta a Chambao. Le seguirán Shinova con Valira el 2 de marzo; La Bien Querida, el 9, y cierran el cartel Lia Kali con Vera GVR el 10 de marzo. MS

FOTOGRAMA: SEGUNDO PREMIO

CRÓNICAS

Cala Vento

Lugar: Sala La Trinchera. Málaga

Fecha: 27/01/24

+ AUSTIN TV

Cala Vento tiene una Casa Linda (2023) llena de habitaciones que ellos han decorado con un montón de lámparas que cuelgan de cada techo (sala) bajo el que hacen hogar con sus canciones, dándole un plus a la sobria puesta en escena de esta banda-dúo con tanta personalidad. Entre esas “habitaciones” de este cuarto álbum, que ha sido casi una continuación de Balanceo (2019), -ambos con su propio sello-, no solo nos encontramos con ellos, sino con colaboraciones tan impresionantes como las de Amaral, o Gorka Urbizu en dos temas tan enérgicos como reivindicativos.

Una llamada a la nostalgia a través de una intro ochentera, el “Never Gonna Give You Up” de Rick Astley tras el que una locución daba paso a la energía desbordante de Aleix Turon y Joan Delgado. Los catalanes de Figueres y Torroella de Montgrí llevan ya unos cuantos años demostrando que se puede triunfar en esta llamada “industria musical” conservando la propia personalidad, pero para ello, hay que hacer una fuerte apuesta por sí mismos.

En Málaga, un nutrido grupo de fans llenó La Trinchera y demostró que sus seguidores no han hecho más que aumentar exponencialmente desde que en 2016 sorprendieran con su primer larga duración

homónimo y se consolidaran con Fruto Panorama apenas un año después. Entre medias, nosotros les descubrimos en el escenario Melgarejo del Vértigo Festival (Martos) en la edición de 2016, viéndoles actuar en un horario nada favorecedor, junto a la piscina, lo cual no fue obstáculo para que la gente se viniera arriba y coincidieran en que Cala Vento había sido el descubrimiento del día. No sabemos si ellos recordarán esa cita en concreto, pero sí recordaban haber estado en Antequera y así lo compartieron con los fans que se lo mencionaron entre el público. La formación, que apostó desde el principio por hacerlo todo DIY contando solo con guitarra y batería para sus composiciones y puesta en escena, al más puro estilo Japandroids o Royal Blood, ha llegado a un punto en el que su forma de hacer música no solo es sello de la casa sino que ya no se concibe de otra forma, a pesar de que, durante el concierto, vemos cómo a veces exploran el sonido a dos guitarras o Joan se encamina al centro del escenario para tocar la guitarra mientras canta. Una buena ristra de pedales, vigorosos riffs de guitarra y mucha distorsión es lo que configura su particular sonido con el que son capaces de llenar todo el espacio entre los dos, sin fisuras.

Obviamente, Casa Linda tuvo un gran protagonismo en la noche, pero fue con sus temas iniciales, donde los pogos y la gente siendo llevada en volandas fueron subiendo los decibelios y la temperatura

hasta que toda la sala se hizo un campo de batalla amenizado por los temas que no podían faltar, como “Isabella Cantó”, “Abril”, “Sin apenas conocernos”, “Isla desierta”, “Un buen año” o “Fin de ciclo”, cerrando la noche con “Conmigo” en medio de la apoteosis compartida entre grupo y público en una noche a la que no se podía pedir más, porque ya lo habían dado todo.

Faltaría decir que la noche la abrieron Austin TV, con quienes han compartido varios conciertos tras haberse conocido en México y, aunque los mexicanos también están haciendo fechas sin ellos, parecen haber conformado un buen equipo para compartir carteles, como así ha sido en La Trinchera, donde vimos que la banda está en plena forma a pesar del largo parón del que vienen y siguen sonando con solvencia, demostrando las tablas y la experiencia que acumulan y desarrollando a la perfección un show dentro de lo esperado para una banda instrumental que sabe conectar con el público tanto a nivel musical como por sus momentos de conversación y cercanía con los asistentes, a los que llegan incluso a subir al escenario para compartir baile con ellos. Un tándem perfecto que sólo opacó levemente la presencia de los mexicanos porque después, al subirse Cala Vento al escenario, absorbieron toda la energía que había quedado flotando en el aire y es que, los del Ampurdán son mucha banda y ellos, lo saben.

MARIA VILLA

The Fuzztones

Lugar: Sala Garaje Beat Club. Murcia

Fecha: 17/02/24

CICLO MICROSONIDOS

Sin duda, uno de los conciertos más esperados de esta edición del ciclo Microsonidos. Con unas cuatrocientas personas (peinando canas en su inmensa mayoría) en el Garaje Beat Club, The Fuzztones pararon en Murcia dentro de su última gira española hasta la fecha. Aunque de los miembros fundadores, en aquella Nueva York de principios de los ochenta, solo queda ese animal escénico llamado Glen Dalpis, más conocido como Rudi Protrudi. Eternamente al frente, con su icónica guitarra Vox Phantom haciendo

Ginebras

de escudo. Aun así, la banda sigue teniendo un directo más que solvente; ahora con Marcello Sallis a la guitarra, Pau Rodas al bajo, Marco Rivagli a la batería y Nico Secondini a las teclas. Algo que quedó claro desde el primer tema: la versión del “Blues Theme” de Davie Allan & The Arrows. Tras esta introducción, empezaron a dar al público lo que vino a buscar: esa típica canción de género llamada “Bad News Travels Fast”, la coreada “Action Speaks Louder Than Words”, la mágica “I Never Knew”… y, por supuesto, canciones del indispensable ‘Lysergic Emanations’ (de 1985) como la hipnótica “Ward 81”, la primitiva “Highway 69”, la frenética “She’s Wicked” o el “1-2-5” de los canadienses The Haunted. Ese

Lugar: Sala Berlín Social Club. Almería Fecha: 09/02/24

Ginebras colgaron el sold out en su primer concierto en gira en Almería. Lugar que su batería confundió con la tierra de David Bustamante, un lapsus que quedó en anécdota. Arrancó el concierto con una explosión de confeti verde, como un presagio de la noche que prometía transformar la saturación en celebración. Sonaron los primeros acordes de “Alex Turner” en una sala asfixiada no solo por la multitud, sino por el entusiasmo de un fandom que no conoce límites geográficos. Venidos desde diferentes puntos de la península, se metamorfoseó un microcosmos donde la cronología personal era irrelevante y se daba cabida tanto a patriarcas del indie, que confirmaron un espíritu afín a las letras rebosantes de juventud del grupo, como a infantes, prematuramente indies, que ocupaban con

ambiente sesentero inundaba una sala entregada al grupo, con una atmósfera llena de garaje rock, fuzz y psicodelia, propia de otra época. Con un repertorio ganador y una actitud innegociable, nada podía ir mal (o casi nada). También caerían las celebradas “In Heat” y “Romilar D”, antes de cerrar con el clásico “Strychnine” de The Sonics (no tocaron “Cinderella”, por más que se pidió) y ver a Protrudi haciendo de Protrudi con el show de la cerveza eyaculadora. No le pidamos más, hay cosas que no van a cambiar. Pero también es cierto que nadie daba un duro por ellos y ofrecieron un bolo estupendo que les valió para callar muchas bocas. Ay, Rudi. Siempre en la brecha. VICTOR MARTÍNEZ

orgullo un lugar privilegiado en primera fila, conformando una masa, cuanto menos diversa, que evidencia la universalidad del atractivo del grupo. La noche, fría y lluviosa, se transformó bajo el techo de la sala en un verano anticipado con aires de verbena. Ataviadas con su característico despliegue cromático, Magüi, Sandra, Raquel y Juls establecieron un fuerte vínculo con sus devotos, intercalando su pop morado con ritmos de chirigota, batucada y hasta nuestro internacionalmente conocido “lololo”, dando a los asistentes un espectáculo ecléctico que cerró con “La típica canción” que ayer, gustó. M&M`S

ON THE. ROAD.

“Tener salas muy pintonas que suenan a culo es otra de las paradojas absurdas de la música en España: invierte en insonorizar y en equipo propio y bueno y no en muebles y luces guays. ¿O será que eres un empresario de la noche y no de la música?”

Camellos

Imagino que en proceso de preparar disco nuevo. ¿No? ¿Salir de gira ayuda o retrasa?

Estamos haciendo el disco nuevo a fuego lento, tu mirada, sí. Y está quedando realmente bien, sí. Salir de gira podría ser el calentamiento previo al partido (la grabación) y viceversa. Sin uno no funciona bien lo otro, aunque evidentemente te lleva tiempo de viaje y logística que puede retrasar una grabación. Por eso, esta vez hemos optado por ir grabando en sesiones cortas, sin volver a la fórmula del aislamiento.

¿Qué ha cambiado en vuestro día a día en la carretera desde los inicios hasta ahora?

Te vuelves un poco pijo. Ya hemos dormido en el suelo de un cuarto vacío o en el sofá del padre de la banda telonera local suficientes veces, por decirlo así. La mejora de nuestra carrera y las condiciones en las que salimos a tocar favorece nuestra salud física y mental y nos aleja de Sanitas, Adeslas y demás: que se jodan, nunca tendrán nuestros millones.

¿Qué no conseguís que cambie? ¿Qué es lo que eliminaríais de las giras?

Eliminaríamos los tiempos muertos, cla-

ro, aunque supongo que hasta que lleguemos al punto de movernos en helicóptero, así seguirá siendo. En un finde de conciertos tocas igual un total de 2-3h de música, viajas un múltiplo de eso y pierdes el tiempo un múltiplo del anterior. No conseguimos dejar de poner los grandes éxitos de la furgoneta, que al principio son recibidos con un “otra vez...” y finalmente son aplaudidos: “Antonio Alcántara” (Cecilio G), el himno del Real Madrid, “Fiebre” (Biznaga), “Policía del amor” (Space Surimi), Start! (The Jam), etc.

En el último single y bueno, en todas vuestras canciones, sois muy certeros describiendo lo que os rodea. ¿Cambia mucho al salir de Madrid?

No mucho. Es decir, la esquizofrenia de gran urbe que hay en Madrid no la encuentras tanto fuera pero la rapiña laboral, las locuras humanas, los dejes fascistas del personal, el sentido del humor ibérico es bastante generalista. Nosotros hemos cumplido años y algunas novedades se han añadido al repertorio y, por suerte, seguimos visitando sitios por primera vez. Sin embargo, y por desgracia, hay cosas surrealistas y absurdas que no desaparecen. “Ahí estamos” a ver si, a fuerza de señalarlas, surte algún efecto.

Antes de salir de gira. ¿Qué no se puede olvidar en el local o en casa?

Los instrumentos. Suena a broma, pero no. Además, ibuprofeno, botella grande de agua, cepillo de dientes, cable para cargar en la furgoneta el móvil, altavoz bluetooth para el hotel y los ratos muertos, parafernalia del Real Madrid, plátanos.

Y hablando de equipaje. ¿Quién lleva el bulto más grande? ¿Qué lleva dentro? -No cuenta el backlineEn el siglo XX te habrían dado una respuesta soez, y lo sabes. Jorge (batería) tiende a traer una bolsa de viaje de 150kg para un finde. Tommy, sin embargo, podría venir semidesnudo.

¿Clubs con futbolín o salas con camerino de Ikea?

Futbolín y música alta, por favor. No queremos oír las gilipolleces ebrias que decimos ni se dicen a nuestro lado. Más allá del cliché, tener salas muy pintonas que suenan a culo es otra de las paradojas absurdas de la música en España: invierte en insonorizar y en tener equipo propio y bueno, no en muebles y luces guays, joder. ¿O será que eres un empresario de la noche y no de la música?

¿Y para comer? Arroz con cosas, asalto a una gasolinera, tuppers…

Intentamos comer bien, enlazando con la segunda pregunta. Ya hemos comido mierda para tres vidas, hemos ido desfallecidos de comer casi nada, hemos cenado en vaso demasiadas veces. Ahora intentamos mirar antes de salir dónde vamos a comer e incluimos en nuestras necesidades y exigencias que haya comida digna en la sala. Parece una pijada, pero es supervivencia.

Un ritual antes de subir a tocar. Algo que no debe faltar. Insultarnos entre nosotros.

Y tras el bolo. Incendio o vuelta a la calma.¿Quién es el último en llegar al hotel?

Los últimos suelen ser Fer, Jorge y Abel. A Frankie y a Tommy les suele tumbar la cena en vaso. Si sabemos que tenemos un viaje largo y jornada dura al día siguiente, nos portamos bien. Al final, nadie quiere decepcionar al público del día siguiente por estar en estado comatoso.

Una anécdota o suceso que se pueda contar de los últimos viajes….

Una avería en las vías del tren nos hizo llegar tarde (Sevilla-Madrid) a coger nuestro tren con destino Castellón para tocar en el puerto de esa ciudad, un sábado. Habiéndonos levantado a las 5:00 am para coger el primer tren a Madrid, teniendo casi una hora de margen entre un tren y otro, la avería nos hizo llegar tarde. Habíamos hecho varios ese esfuerzo para poder tocar a las 14:00, habiendo ido la otra mitad del equipo en furgoneta durante toda la noche (Sevilla-Castellón) para llegar a tiempo a montar el escenario y probar el sonido.

Al no llegar la primera mitad por perder el tren (Madrid-Castellón), la segunda mitad se quedó con el escenario montado y el sonido probado, bajo el sol y sin apenas haber dormido. Tuvieron que pedir disculpas al público allí reunido, recoger, sacar fuerzas de donde no las había y volverse en furgoneta a Madrid.

08.03. PlantaBaja. Granada

09.03. La Almazara. Bullas (Murcia)

DÓNDE ESTÁ LA

S. TEATRO TRAJANO Muza, 50 Mérida

DISCOS KERAMIDAS

C.C. El Descubrimiento Cáceres

JAZZ BAR Alvarado, 6, Mérida

LEMON ROCK

Montalbán, 6, Granada

SEVILLA RECORDS

Amor de Dios, 17, Sevilla

LA CAJA BLANCA

Editor Ángel Caffarena,8 Málaga

EL BAR DE ERIC Escuelas, 8 Granada

LOUIE LOUIE

Luis Braille, 1, Estepona

LA TÉRMICA

Avenida de los Guindos, 48, Málaga

KAVKA LIBROS

c/ Joaquín Ruano, 27. 23700 Linares

MAPA TABERNA

Simón García, 57 Murcia

FARÁNDULA

Sindicalista Luis Cobos, 3, Algeciras

SALA CONTACTO

Crta Jarandilla. Navalmoral de la Mata.

SUBTERRÁNEA

Horno de Abad, 8 Granada

MARCAPASOS

Duquesa, 6, Granada

BORA BORA Plaza Universidad 1, Granada

BOTÁNICO CAFÉ

Málaga, 3, Granada

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Desde solo 10€/mes

PLANTABAJA

Horno de Abad, 11, Granada

JAM

Obispo Hurtado, 11 Granada

VINILO ROCK BAR

C/ C. Relator, 21 Sevilla

TEATRO CIRCO

Enrique Villar, 11, Murcia

VELVET CLUB

Convalecientes, 11, Málaga

Y EN LOS CENTROS

FNAC DE:

Granada - MurciaMálaga - Marbella - Sevilla

FUNCLUB

Alameda 61, Sevilla

TRÁFICO

Victorio, 35, Murcia

LOCOLOCO VINTAGE

San Carlos, 15 Murcia

TEATRO LÓPEZ DE AYALA Plaza Minayo Badajoz

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