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Factor Clave, creando experiencias de aprendizaje para promover la inclusión productiva

Laura Gonzáles, fundadora de la empresa, busca trabajar de la mano de la industria para cerrar las brechas educativas de la población adulta.

¿Cómo nace Factor Clave?

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Factor Clave inició operaciones en 2013 y, básicamente, es la conclusión de muchos años de maduración. Empecé a detectar que había problemas en la educación para adultos, pues existen brechas que no se cierran, y sentí que en ese momento tenía la madurez, en términos de negocios, de entender el problema, liderar equipos y manejar una empresa de este orden. Estos elementos fueron importantes, pero, en esencia, Factor Clave surge para resolver una frustración personal: no soporto ver tanta desigualdad e indiferencia en nuestra sociedad, sobre todo por parte de las personas que tienen más posibilidades de resolver un problema real, que ha hecho parte de la historia de la humanidad.

¿Cómo supo que era una oportunidad viable?

No hice grandes estudios de mercado ni revisé plataformas. Viene de mi ojo, de mi experiencia, y no es simple noción. Realicé muchos años de consultoría y para mí el asunto era relativamente fácil. Hay desigualdad y falta de educación de calidad para la mayoría. En términos de cómo llegar a esta población, normalmente esto se hace a través de fundaciones, corporaciones u organizaciones internacionales que entienden la gravedad del problema y que tienen el presupuesto. Esa fue mi identificación de mercado y luego de eso tuvo un enfoque de ir seleccionando nichos.

¿Qué problemática están ayudando a solucionar desde Factor Clave?

Crear inclusión productiva para la mayoría, siempre desde la educación. Llamo inclusión productiva, por ejemplo, a adultos de 40 años anacrónicos en temas digitales, y que pueden tener experiencia, pero hay cosas que no entienden, lo cual les crea problemas de desempleo complejos y genera pérdida de conocimientos importantes para el país.

Hay también problemas de inclusión digital en mercados como el de los comerciantes informales, que también le generan un gran problema al país en términos de informalidad y de tributación. Ese tipo de trabajo de inclusión productivo es lo que hacemos.

¿Cuál es su factor diferencial?

Hay cuatro cosas que nos diferencian en el mercado. La primera es que nosotros sabemos muy bien cómo aprenden los adultos, porque no es como lo hacen los niños; la educación de adultos no se puede abordar desde la pedagogía.Lo segundo es que somos muy cuidadosos en cómo lo hacemos desde la producción. Todos nuestros procesos son pensados, no desde una perspectiva de trabajo de medios audiovisuales para entretener, sino de medios audiovisuales para aprender. Sabemos cómo usar los medios para que el adulto pueda aprender. La producción tiene que ser muy cuidadosa.

Lo tercero es que lo hacemos con mística y mi equipo tiene más mística que yo. Es la pasión por lo que hacemos lo que nos abre las puertas de grandes compañías y grandes proyectos, eso hace que confíen en lo que nosotros hacemos: educar a un adulto de manera deliberada e intencional.Lo último sería que le hacemos la vida fácil a quienes trabajan para nosotros.

¿Cuáles han sido los mayores logros de Factor Clave?

Uno es hacer proyectos ambiciosos. Hemos podido llegar con proyectos de calidad a la mayoría, aunque no en el formato que quisiera. Quienes tienen el presupuesto no se arriesgan a hacer las cosas que realmente funcionan y todavía la educación está bastante inmadura en términos de evolución.

Este es uno de los grandes problemas que tiene la educación virtual asincrónica, así como la sincrónica y las clases, pues no porque yo te explique tú aprendes. Si fuera así, nuestra sociedad sería otra.

Nuestros proyectos tienen como alcance mínimo Colombia y América Latina, y por lo general llegan a 200.000 personas. Son proyectos pensados para diferentes países e idiomas, y para solucionar problemáticas específicas.

Lo segundo que hemos hecho muy bien y que considero un gran logro es crear relaciones a largo plazo con los clientes. Las grandes compañías con las que trabajamos logran evolucionar y resolver el problema, pues creamos soluciones novedosas para situaciones de nicho, muy específicas.

Lo tercero es que hemos logrado entrar al mercado de Estados Unidos y tener una operación offshore siendo una empresa colombiana. Ni siquiera tuvimos que abrir operaciones en Estados Unidos, seguimos operando desde acá. Ellos confían en nosotros y tenemos ya varios clientes ahí. Algunos de ellos hacen parte de la lista Forbes 500.

¿Cómo han influido las redes sociales a lo largo de los años en la empresa?

En este momento no usamos las redes sociales para educar personas. Acá hay un error, pues el adulto debe redefinir sus creencias y eso no se hace con una píldora por WhatsApp. Gran parte de la educación se está enfocando así y es un acto de torpeza. Si tienes que redefinir un enfoque, no lo vas a lograr con una píldora de un video por WhatsApp. Tampoco vas a desarrollar una habilidad porque la habilidad te exige sistematicidad, es decir, hacerlo una y otra vez; para eso es mejor el gaming.Las redes sociales las utilizamos para generar conexiones, socializar, crear discusión y debatir.

¿Qué servicios ofrecen?

Hoy en día nuestra empresa está dirigida a negocios corporativos, fundaciones y organizaciones. Estos sectores van a cambiar precisamente por el nuevo enfoque de negocio que vamos a tener.Los productos que vamos a ofrecer, que son los temas de educación tradicional dentro de las corporaciones, son programas en formación muy especializados para ciertos roles y de acuerdo con el sector. Por ejemplo, nosotros no damos un curso de ventas, enseñamos a vender y desarrollamos habilidades para vender a los asesores o ejecutivos comerciales de mayoristas en bancos.

Así que vamos a seguir ofreciendo programas en formación especializados para el sector corporativo, de la misma forma que proyectos de inclusión productiva para comerciantes informales y productores campesinos, sin mencionar los programas de marca propia, contenidos de autor, etc.

¿Cuáles son las metas a corto y largo plazo que tienen?

A corto plazo queremos desarrollar más el mercado en Estados Unidos y seguir con proyectos propios para América Latina, proyectos que tienen que ver con productores campesinos y comerciantes informales para generar inclusión productiva.A largo plazo, aspiramos a desarrollar proyectos en paralelo que tengan sentido en América Latina y África. Queremos llegar hasta África, pues allí hay problemáticas similares, con unas dinámicas demográficas e impactos en las economías análogos, y creemos que lo que hacemos es expansivo.También queremos producir contenidos propios y desarrollar todo un modelo de crecimiento alrededor del capital intelectual de la compañía.

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