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Editorial
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Mirada salesiana Entre el temor y la esperanza Mensaje del Rector Mayor Como bálsamo y como fuego La entrevista "Zatti se empeñaba cada día en ser santo"
El equipo del Boletín Salesiano Director Jesús Armando García Rodríguez, SDB
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Una palabra del Papa Bienaventurados los que lloran
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Planeta > Darhhan Don Bosco: una experiencia agrícola de éxito Al centro Un signo de los tiempos
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Cosas de Don Bosco El camino
Administración Congregación Salesianos de San Juan Bosco, Provincia de Cristo Rey y María Auxiliadora, A.R.
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Máxima Santidad yjóvenes
Distribuidor Congregación Salesianos de San Juan Bosco, Provincia de Cristo Rey y María Auxiliadora, A.R.
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Observatorio El derecho a la salud
Domicilio López Cotilla 1274, Colonia Americana, 44160. Guadalajara, Jalisco
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De aquí saldrá mi gloria Sin remitente ni destinatario
Colaboran en este número Ángel Fernández Artime, SDB Octavio Balderas Rangel SDB Francisco Enríquez Zulaica, SDB José J. Gómez Palacios, SDB Giulia Traversari Beatriz Iván Vega Ponce, SDB Agenzia Info Salesiana (ANS) Salesianos MEM
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Nos llamaremos salesianos Patrono de los periodistas
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Panorama
Editor Responsable Jesús Armando García Rodríguez, SDB Redacción y edición Edgar Velasco Diseño Octavio Morales Calderón Coordinación Audiovisual Diana Griselda Ocampo Curiel Promoción y ventas Alejandro Corona Montoya, SC Fotografía e ilustraciones Archivo
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Lectio Divina "No está aquí, ha resucitado según dijo"
Por todo el mundo De los dulces a las misiones
Katichisia La otra cara
Publicación periódica editada por CONGREGACIÓN SALESIANOS DE SAN JUAN BOSCO PROVINCIA DE CRISTO REY Y MARÍA AUXILIADORA, A. R. Calle López Cotilla 1390, Col. Americana, C. P. 44160, Guadalajara, Jalisco. Precio estimativo por inscripción anual 180.00 pesos, por número suelto 18.00 pesos. Reserva de derechos al uso exclusivo 04-2017-073H7505600-102. Certificado de licitud de tituio y contenido Núm. 16570. Se imprime en IMAGEN CORPORATIVA. Calle 5 No. 46o, Zona Industrial. Guadalajara, Jalisco, www.imagencorporativ3lm.com
Autosuficientes e inmediatistas
En las últimas semanas, todos hemos hablado sobre la más reciente pandemia sufrida por la humanidad. Los panoramas siguen siendo muy diferentes dependiendo del lugar y de las medidas que se han ido tomando para enfrentar la situación. En unos sitios pareciera acabado el problema, en otros reducido y en otros se prevé siga siendo un escenario de emergencia. En este punto, cada uno ha sacado alguna conclusión sobre las respuestas de las autoridades y las posibles soluciones, pero si todo esto no ha sido útil para volvernos más humanos, la tragedia será todavía mayor quedaría en evidencia que hemos terminado por volvernos insensibles. Saber que tantos congéneres —más aún, hermanos— están sufriendo o han sucumbido por la enfermedad debería movernos
a mostrar por lo menos empatia, aunque el ideal sería mostrar misericordia. Si no es así, entonces, aunque nuestro código genético sea de seres humanos, las evidencias harían suponer que queda poco de humano en la sociedad actual. Personalmente considero que hay dos palabras que explican la insensibilidad de tantos: autosuficiencia e inmediatismo. El hecho de sentirnos tan seguros, tan poderosos, tan suficientes provoca ahora sufrimiento, porque de golpe descubrimos que no hay nada más lejos de la realidad. Y como también nos hemos acostumbrado a que todo se resuelva inmediatamente, apretando un botón, haciendo una llamada, mandando un mensaje, por decreto, la frustración ha sido evidente. Incluso pareciera frustrarnos el hecho de orar, apenas una fracción de minuto, y aparentemente no obtener respuesta. Hay que orar, sí, pero sin cesar, sobre todo pidiendo la gracia de ubicarnos frente a la inmensidad de lo que nos sobrepasa fácilmente y redescubrir que, no obstante nuestra vida frágil, limitada y poca, a Dios le pareció bien hacerse uno como nosotros, que su Hijo quiso hablarnos del amor de su Padre, que predicó su Reino, que pasó haciendo el bien entre los necesitados y marginados, que padeció y murió en una cruz y que resucitó. Por esa Pascua nos consiguió la esperanza de una vida plena, sin estos límites que nos hacen sufrir, sin enfermedad, sin muerte eterna. Un cordial saludo. Jesús A. García R. SDB Director bs@salesianosmeg.org ñ
Entre el temor y la esperanza PorlnfoANS
Es medio día en Roma. La casa salesiana del Sagrado Corazón está frente a la estación de trenes más importante de Italia: diariamente medio millón de personas transitan por ella. Hoy apenas se puede ver a una veintena con sus rostros cubiertos por mascarillas. Pienso en las otras ciudades de Italia y sus calles vacías, restaurantes cerrados y gente forzada a estar en sus departamentos, cantando canciones por las ventanas no sé si por aburrimiento o para darse esperanza mutua. Creo que muy pocos de nosotros se imaginaron lo rápido que llegaría la enfermedad justo aquí a nuestras casas, nuestros colegios y oratorios. Pienso en las escuelas cerradas de tantos países donde los niños dependen de los desayunos y almuerzos escolares para su buena alimentación. Pienso en sus padres, que probablemente perderán ingresos, y me pregunto cómo van a hacer para proveer de lo necesario a sus familias. Pienso en nuestras vidas y nuestras comunidades religiosas acostumbradas a riesgos calculados, agendas organizadas y procesos previamente planificados que fueron violentamente interrumpidos, dejándonos perplejos en medio de una sensación de precariedad. Pienso en el papel que los medios de comunicación social están teniendo y que continuamente tienden al amarillismo en la presentación de los hechos, distorsionando la realidad. En la historia de las epidemias, frecuentemente se ha caído en el error de presentar los problemas inadecuadamente, causando pánico entre los ciudadanos. Me pregunto si no hay lugar para la esperanza en las acciones generalmente heroicas de muchos conciudadanos. Pienso en el gran mito que hemos construido de un mundo tecnificado, ciudades
planificadas y espacios seguros. Ahora experimentamos nuestra debilidad, y nuestro ego no desea reconocerla, ya que nos hace intuir que nuestra vida se encuentra en otras manos y que no somos nosotros, sino Dios, quien determina la Historia. Pienso en tantos salesianos, hombres de fe y esperanza, que comparten el sufrimiento junto a nuestros jóvenes que ven caer seres queridos a causa de esta pandemia, y que confortan a tantos que enfrentan el miedo a lo desconocido. Esperemos que la pandemia del coronavirus sea un ejemplo de colaboración global para vencer a otros desafíos de la humanidad: la desigualdad, los cambios climáticos, la intolerancia, el racismo y la exclusión. Esta situación va a finalizar, tarde o temprano. Mientras, espero que el virus nos haga entender mejor que todos somos seres humanos y que cuando, con la ayuda de Dios, unimos nuestras fuerzas, podemos lograr mucho. &
Mensoie del Rector Movor
Como bálsamo y como fuego Por Ángel Fernández Artime, SDB
Queridos amigos y hermanos de la Familia Salesiana: Comenzando mi nuevo sexenio, comparto con ustedes lo que siente mi corazón. Primero que nada, agradezco a Dios, en cuyas manos amorosas nos encontramos y movemos todos. Dios nos ha guiado hasta este momento. El sí que nuevamente he pronunciado nace de la confianza en Él y en todos ustedes, que forman la gran alma y el gran corazón de esta nuestra amada Familia. La emoción es grande. Me siento aún asombrado por el hecho de ser sucesor de Don Sosco, padre y centro de unidad de la Familia Salesiana. Y me quedo sin palabras, una vez más, cuando leo en el testamento espiritual de Don Bosco aquello que nuestro Padre nos dejó escrito al respecto: "Antes de partir para mi eternidad, debo cumplir con ustedes algunos deberes y satisfacer así un vivo deseo de mi corazón [...] Les
dejo aquí en la tierra, pero sólo por un poco de tiempo [...] su Rector ha muerto, pero será elegido otro que cuide de ustedes y de su eterna salvación. Escúchenle, ámenle, obedézcanle, recen por él como lo hicieron por mí" Las palabras de nuestro amado padre Don Bosco resuenan en mi mente y en mi corazón como bálsamo y como fuego al mismo tiempo. Su figura es tan grande que inevitablemente me siento pequeño e indigno. Sólo la gracia que viene del Señor a la cual me abandono, su ayuda, la de todos los salesianos en los más diversos lugares del mundo y el amor que tengo y tenemos por nuestros jóvenes, especialmente los más pobres, me dan la paz y la valentía necesarias. Muchos hermanos me han preguntado cómo me siento. Mi respuesta ha sido siempre esta: muy en paz y muy libre. Esto es lo que he sentido todo el tiempo, durante
J el Capítulo y durante el discernimiento. Es lo que he sentido antes y después de las elecciones: paz y libertad, porque no he buscado ni busco este servicio. Estaba espiritualmente listo para continuar —porque siento que ios seis años que vivimos precedentemente fueron años de gracia, no sin dificultades obviamente— pero no me han arrebatado ni quitado la esperanza y el deseo de fidelidad personal a la Congregación. Sin embargo, estaba también listo para concluir mi servicio, si tal hubiese sido el sentimiento de la Asamblea en el nombre del Señor Y es con esta paz y libertad que imprimo en mí lo que se dijo sobre las expectativas sobre el Rector Mayor buscaré ser, en lo posible, un verdadero hombre de Dios, con fuerte identidad carismática y pastoral, visionario, capaz de una mirada de fe y esperanza al leer la realidad. Es mi profundo deseo continuar siendo, en lo posible, hombre capaz de paternidad y afecto fraterno, de acompañamiento, cercano a los hermanos. Pienso que pondré muchas de mis energías para ser un hombre capaz de construir unidad, de involucrar y acompañar, de crear una visión común, de unir las diferencias, de construir comunión entorno a sí, de trabajar en equipo y delegar
Finalmente, dirijo la mirada a los jóvenes. Ellos son para nosotros el "sacramento" de nuestro encuentro con Dios. Constituyen "la zarza ardiente" a la cual nos acercamos en nombre de Dios. Son el lugar sagrado de la santificación que Dios nos ha asignado en Don Bosco. La presencia de los jóvenes en el Capítulo General ha dejado nuestros corazones llenos de emoción, con motivo de la fuerza de sus palabrasjuveniles. Los jóvenes nos han pedido estar con ellos, no abandonarles, no dejarlos a su destino. Nos han pedido quererlos, amarlos, porque nos anhelan y nos aman. Nos han pedido que los acompañemos en el camino de la vida. Y nos han pedido ser hombres capaces de hablarles del amor que Dios tiene por ellos. No nos han pedido estructuras, o más paredes, ni programas de gestión, ni tampoco actividades. Los jóvenes fueron cofundadores con Don Bosco, ha dicho el Papa Francisco en su mensaje al CG28. He aquí porque ellos y el ruido de sus voces — escribe el Santo Padre— son y deben ser nuestra mejor música. Estamos llamados a permear la vida de tantos jóvenes abandonados, en peligro, pobres, descartados que esperan una mirada de esperanza, que esperan aquel salesiano que será hermano, a veces padre y siempre amigo, ñ
"Zattí se empeñaba cada día en ser santo" P Ricardo Cámpoli, SDB Por Jesús García, SDB
Ricardo Cámpoli se define a sí mismo como "alguien convencido de la fuerza de los medios" Pero no sólo eso: también está convencido de su diversidad, por lo que le gusta explorar todos y cada uno. "He evolucionado en mi proceso de adquirir algunas habilidades para desenvolverme en el campo de las comunicaciones. No creo tenerlas todas, pero sí tengo un profundo gusto y respeto por la responsabilidad que implica ser un comunicador" Salesiano desde 1990 y sacerdote desde 1999, Cámpoli responde en esta entrevista preguntas relacionadas con su más reciente proyecto: una película centrada en el beato Artémides Zatti, SDB, contemporáneo del también beato Ceferino Namuncurá, y que se trata de una figura que no es tan conocida en México pero cuyo trabajo fue sumamente significativo.
¿Cuál es la motivación detrás de esta película centrada en el beato Artémides Zatti, que es además tu opera prima? Junto con el P Pedro Naranbuena, que es de la Inspectoría del Sur y vicepostulador de las causas de Ceferino [Namuncurá] y de Zatti, nos parecía importante hacer algo para dar a conocer la figura de don Zatti porque, contrario a lo que se cree, tampoco es muy conocido en Argentina. Rastreando en Google y en comentarios que uno escucha, no se llega a entender bien quién era Don Zatti: ¿era religioso, era cura, no era cura? ¿Qué era? ¿Era un enfermero solamente? ¿Era un laico muy bueno? Como que don Zatti quedó muy encapsulado en nuestras capillas y en nuestras celebraciones internas como Salesianos, pero no es visto como una figura relevante que tiene mucho para decir hoy, tanto en Argentina como en el mundo. Entonces la ¡dea es aprovechar el medio cinematográfico para darlo a conocer Pensamos primero en un cortometraje de 20 minutos, aunque terminó siendo un poco más largo. Seguramente el proceso de la película requirió un análisis de su persona, elegir qué aspectos presentar de su vida, cuáles episodios. Desde esta perspectiva, ¿quién es el beato Artémides Zatti? El beato Artémides Zatti es, en primer lugar, un hombre muy bueno, muy consciente de sus límites, que se enamoró de Don Bosco y de su
proyecto. Fue un hombre que siempre tendió a hacer el bien a los demás, que siempre tuvo una actitud de servicio, una actitud oblativa y que sintió que podía plasmar todo eso en su vocación de religioso como salesiano laico, como coadjutor Hay salesianos de nuestra Inspectoría y de la Inspectoría del Sur que aún viven, lo conocieron y refieren que, si bien se distinguió por no sobresalir, siempre estaba en actitud de servicio. Fue un hombre que trabajó en equipo, que siempre supo que tenía una comunidad que lo respaldaba. Por ejemplo, en el proyecto del hospital de San José de Viedma había muchísimos voluntarios que se sumaban a las Hijas de María Auxiliadora que trabajaban con él, que se sumaban a salesianos sacerdotes que también ayudaban. Y bueno, había también enfermeros, enfermeras, médicos, la gran mayoría eran todos voluntarios, gente capacitada, muchos de ellos preparados por él, formados no sólo en la atención al enfermo, sino en el servicio al prójimo. Otro de los motivos que nos movió a hacer la película fue que en 2019 fue un año para reflexionar sobre la santidad a nivel de la Congregación y nos parecía importante un
mostrar un modelo de alguien que no sólo es un hombre bueno, un religioso convencido del proyecto al que Dios le invitaba como salesiano laico, sino que es un hombre santo. ¿Él lo sabía? Yo creo que no, él jamás se iba a poner a pensar si era o no santo, se empeñaba cada día en serlo. ¿Cuánta gente estuvo involucrada en el proceso de la película y cuánto tiempo se llevó? Cuando volví de Roma, a donde acudí al Seminario Causa de Beatificación y Canonización, inmediata-
mente me puse a escribir un guión. Cuando uno escribe un guión a veces tiene que darle mucho tiempo para que madure, porque es como plantar una semilla: hay que esperar que la planta crezca y uno va podando de acuerdo a lo que quiere que esa planta sea. Un guión es algo así, porque es un cuerpo vivo que evoluciona y hay que darle tiempo para que esa evolución se dé. En este caso trabajé con Alicia Giménez Guspi, que fue guionista de un largometraje premiado en el Festival de Rindas, en Londres. Pensé que era la persona indicada para confrontar lo que iba escribiendo porque no conoce de Zatti ni la espiritualidad salesiana. Cuando tenía el guión empecé a buscar productora acá en Córdoba,
pero me di cuenta de que nada mejor que la familia para entendernos en los temas nuestros, entonces me dirigí a Juan José Chiappeiti, que es el director ejecutivo del Boletín Sales/ano. Ellos ya vienen haciendo producciones audiovisuales desde hace un tiempo y cuando les conté la idea dijeron "¡Por supuesto!", estaban muy contentos de sumarse. Durante el rodaje intentamos crear un ambiente de Familia y de hogar, valorando el trabajo de todo el equipo, porque nos parecía importante que se sintieran valorados y, además, es algo que surge natural de nuestro trabajo cotidiano como salesianos. Participaron cerca de 50 personas en la producción de la película, entre técnicos y actores. El guión lo pudo ver también Juan
José Campanella, ganador del Óscar con El secreto de sus ojos (2009). Él vio el proyecto, le pareció que estaba emocionalmente bien logrado, nos dio algunos consejos que tratamos de seguir en la medida de nuestras posibilidades. Una vez que terminamos la posproducción sólo queda pasarlo al formato indicado para poder proyectarlo en cine. Estamos viendo algunos festivales, yo tengo una lista con 19, pero tenemos que ver en cuáles realmente vamos a poder participar Esperemos que entre ellos pueda haber alguno en México, es una buena ventana también. México tiene muchísimos festivales. Revisando las bases de datos de festivales puedes darte cuenta de que México tiene muchísimos y bueno, por algo es una de las industrias más reconocidas, más valoradas. El cine mexicano es una escuela particular dentro del cine mundial, en el pasado y en el presente ¿no? Los argentinos tenemos mucho que aprender del cine mexicano. ¿Cómo invitarías a los lectores mexicanos a ver la película? Los invitaría a conectarse con este hombre bueno, este religioso santo que en el trabajo cotidiano y con las
circunstancias que le tocó vivir, en lo único que pensó fue en servir a los demás y siempre con mucha alegría, como nos enseñó Don Bosco. La película les puede dar alguna mirada sobre lo que significa ser santo y buscar la santidad alrededor También pueden conocer el tema de la Escuela de Santidad con la presencia de madre Antonieta Bhóm, del P Carlos, monseñor Mariano Pérez, conCeferino Namuncurá. creo que es una riqueza muy grande no sólo para nosotros como cristianos, sino como salesianos también. Saber que contamos con estas personalidades puede ayudarnos a mirar nuestro día a día como una alternativa de santidad. &
Bienaventurados los que lloran Mensaje durante una audiencia general en febrero de 2020
Cf Exhortación apostólica postsinodal Chrístus vivit, 76; Discurso a los jóvenes de la Universidad Santo Tomás, Manila, 18 de enero de 2015; Homilía del Miércoles de Ceniza, 18 de Febrero de 2015. 1
Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días! Hemos emprendido el viaje en las Bienaventuranzas y hoy nos detendremos en la segunda: "Bienaventurados los que lloran, porque serán consolados" En la lengua griega, en la que está escrito el Evangelio, esta bienaventuranza se expresa con un verbo que no está en pasivo —de hecho los bienaventurados no sufren este llanto— sino en el activo: "se afligen"; lloran, pero por dentro. Es una actitud que se ha convertido en central en la espiritualidad cristiana y que los padres del desierto, los primeros monjes de la historia, llamaron penthos, es decir, un dolor interior que abre una relación con el Señor y con el prójimo, una relación renovada con el Señor y con el prójimo.
Este llanto, en la Escritura, puede tener dos aspectos: el primero es por la muerte o el sufrimiento de alguien. El otro aspecto son las lágrimas por el pecado —por nuestro pecado—, cuando el corazón sangra por el dolor de haber ofendido a Dios y al prójimo. Por lo tanto, se trata de amar al otro de tal manera que podamos unirnos a él o ella hasta compartir su dolor Hay personas que permanecen distantes, un paso atrás; en cambio, es importante que los otros se abran brecha en nuestros corazones. He hablado a menudo del don de las lágrimas, y de lo precioso que es.1 ¿Se puede amar de forma fría? ¿Se puede amar por función, por deber? No, ciertamente. Hay algunos afligidos a los que consolar, pero a veces también hay consolados a los que afligir, a los que despertar, que tienen un corazón de piedra y han desaprendido a llorar También hay que despertar a la gente que no sabe conmoverse frente al dolor de los demás. El luto, por ejemplo, es un camino amargo, pero puede ser útil para abrir los ojos a la vida y al valor sagrado e insustituible de cada persona, y en ese momento nos damos cuenta de lo corto que es el tiempo. Hay un segundo significado de esta paradójica felicidad: llorar por el pecado. Aquí hay que distinguir hay quienes están airados por haberse equi-
vocado. Pero esto es orgullo. En cambio hay quien llora por el mal hecho, por el bien omitido y por la traición a la relación con Dios. Este esel llanto por no haberamado, que brota porque la vida de los demás importa. Aquí se llora porque no se corresponde al Señor que nos ama tanto, y nos entristece el pensamiento del bien no hecho; éste es el significado del pecado. Estos dicen: "He herido a la persona que amo", y les duele hasta las lágrimas. ¡Bendito sea Dios si estas lágrimas vienen! Este es el tema de los propios errores que hay que afrontar difícil pero vital. Pensemos en el llanto de san Pedro, que le llevará a un amor nuevo y mucho más verdadero: es un llanto que purifica, que renueva. Pedro miró a Jesús y lloró: su corazón se renovó. A diferencia de Judas, que no aceptó que se había equivocado y pobrecillo, se suicidó. Entender el pecado es un regalo de Dios, es una obra del Espíritu Santo. Nosotros, solos, no podemos entender el pecado. Es una gracia que tenemos que pedir Debemos orary decir "Señor hazme entender el mal que he hecho o que puedo hacer" Este es un don muy grande y después de haberlo entendido, viene el llanto del arrepentimiento. Uno de los primeros monjes, Efrén el Sirio, dice que un rostro la-
vado con lágrimas es indeciblemente hermoso (cf Discurso ascético). ¡La belleza del arrepentimiento, la belleza del llanto, la belleza de la contrición! Como siempre, la vida cristiana tiene su mejor expresión en la misericordia. Sabio y bendito es el que acoge el dolor ligado al amor, porque recibirá el consuelo del Espíritu Santo que es la ternura de Dios que perdona y corrige. Dios perdona siempre: no lo olvidemos. Dios perdona siempre, incluso los pecados más feos, siempre. El problema está en nosotros, que
nos cansamos de pedir perdón, nos encerramos en nosotros mismos y no pedimos perdón. Ese es el problema; pero Él está ahí para perdonar Si tenemos siempre presente que Dios "no nos trata según nuestros pecados ni nos paga según nuestras faltas" (Sal 103,10), vivimos en la misericordia y la compasión y el amor aparece en nosotros. Que el Señor nos conceda amar en abundancia, de amar con la sonrisa, con la cercanía, con el servicio y también con el llanto, ñ
Darhhan Don Bosco: una experiencia agrícola de éxito Por Redacción
Cerca del 28 por ciento de la población de Mongolia vive en o debajo de la línea de pobreza, con un salto significativo al 35 por ciento para aquellos que viven en áreas rurales. Los pastores en el campo luchan por sobrevivir al tiempo que su estilo de vida tradicional se disuelve, y hay pocas oportunidades de trabajo para las generaciones jóvenes. Antes de 1990, el país recibía casi el 30 por ciento de su Producto Interno Bruto de la antigua Unión Soviética, y tenía una economía de planificación centralizada con el gobierno proporcionando bienes básicos y una gama completa de servicios públicos. Como resultado, la pobreza en el país era muy baja, incluso en las zonas rurales. Sin embargo, según el Banco Mundial la tasa de pobreza aumentó a casi el 60 por ciento después de 1990, lo que estuvo directamente relacionado con la transición del país a una economía de mercado después de la ruptura de la Unión Soviética y el colapso de la economía centralmente planificada de Mongolia. Hoy, en parte debido a los vastos recursos minerales y minería de Mongolia, la economía del país se está recuperando y la tasa de pobreza está disminuyendo, habiendo disminuido del 38.7 por ciento en 2010 a donde se encuentra hoy. Desde 2001, los misioneros salesianos brindan refugio y educación a jóvenes pobres en Mongolia. Los programas coordinados por los Salesianos ayudan a los estudiantes
que tienen dificultades para hacer frente a los entornos tradicionales de la escuela secundaria y a las familias que llegan a la ciudad capital, Ulan Bator, con una necesidad desesperada de empleo. Además de los cursos educativos básicos, los misioneros ofrecen mecánica automotriz, soldadura y clases de computación. Los misioneros salesianos en Darkhan, Mongolia, operan el Centro Don Bosco, que incluye educación agrícola y una granja en funcionamiento. El centro ofrece una oportunidad para que los jóvenes locales obtengan las habilidades necesarias para el empleo. El rendimiento de la granja también apoya el programa de alimentación en el Centro Juvenil Salesiano local. En 2003, respondiendo a las crecientes necesidades de la comunidad, los misioneros salesianos agregaron el Centro de Cuidado para Niños de la Calle y el Centro de Habilidades de Capacitación Indus-
trial Don Bosco. En 2004, el Centro Don Bosco y la granja, junto con el Centro Juvenil Salesiano, se integraron en un solo proyecto que recibió como nombre Darkhan Don Bosco. En 2004, esta comunidad inició una experiencia agrícola que con los años se ha convertido en la Granja Don Bosco, una maravillosa expresión del movimiento ecológico salesiano. A pesar de que la agricultura en Mongolia representa siempre un desafío debido al clima extremo —que oscila entre 40°C en verano y -40°C en invierno—, para los jóvenes, los colaboradores laicos de Don Bosco y los Salesianos Cooperadores, el "agro-oratorio" anual es siempre una satisfacción especial. Durante 2019, unos 40 niños y jóvenes participaron en la experiencia educativa oratoriana, con actividades agrícolas por la mañana y actividades educativas y recreativas por la tarde. En total, se recogieron 1,600 kg de calabazas y otras variedades. Por otra parte, en el verano de 2018 abrieron un pequeño "supermercado", donde los jóvenes que asisten a la parroquia pueden hacer compras a través de los cupones distribuidos entre los asistentes. Además, los 30 estudiantes del Centro de Estudios Don Bosco, quienes completaron el curso de dibujo, inglés y computación, realizaron una excursión, durante la cual se realizó una premiación. Además, Darkhan
Don Bosco organizó por primera vez un campeonato de fútbol en Hutul, a unos 60 km de Darkhan y en un centro dirigido por los Salesianos Cooperadores, al que asistieron 220 jóvenes y que contó con la presencia delP Joseph Dat, SDB. "Cada año, la cosecha trae una gran fuente de orgullo a la comunidad y permite a los jóvenes tener una experiencia práctica en la granja", ha dicho el P Mark Hyde, SDB, responsable de la Procura de New Rochelle, el brazo de desarrollo estadounidense de los Salesianos de Don Bosco. "Los misioneros salesianos en Mongolia continúan creando programas que ayudan a los necesitados. Desde la enseñanza de habilidades laborales y la provisión de refugios para niños de la calle hasta la construcción de centros juveniles a tiempo completo con programas de alimentación, los misioneros brindan ayuda a los más necesitados y ayudan a las familias pobres a romper el ciclo de la pobreza" Darkhan Don Bosco está a punto de unirse a la red global Don Bosco Creen Alliance. ñ
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Un signo de los tiempos Por Octavio Balderas Rangel, SDB
Estas líneas no tienen como objetivo insistir en lo dramático que ha resultado, y sigue resultando, la aparición del coronavirus en la humanidad. Nuestro objetivo es invitar a reflexionar sobre la importancia del discernimiento, de la madurez espiritual y humana en todos los momentos de la existencia y, naturalmente, en los momentos de crisis. Los signos de los tiempos La expresión "signos de los tiempos" aparece, en primer lugar, en el Evangelio (Mt 16, 3; Le. 12, 54-57) y luego es retomada por el Concilio Vaticano II (LG 11) para indicar la misión que tenemos los creyentes de escrutar a fondo e interpretar los signos de cada época para comprender el mundo en el que vivimos (LG 4) pues "la fe todo lo ilumina con nueva luz y manifiesta el plan divino sobre la entera vocación del hombre. Por ello, orienta la meta hacia soluciones plenamente humanas" (LG 11). Esto significa que, quienes nos consideramos como discípulos de Cristo, tenemos la misión de comprender los problemas humanos no sólo desde nuestra fe, sino también desde nuestra humanidad y en razón de la humanidad.
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Discernimiento y sabiduría El discernimiento es una operación de la mente mediante la cual el sujeto es capaz de analizar aquellas situaciones complejas que se prestan a la confusión, de sopesar la validez de aquello que se le presenta, de distinguir la verdadera naturaleza de las diversas situaciones que debe afrontar Cuando este discernimiento, que no deja de ser una operación de la mente, se hace teniendo como base los criterios del Espíritu, se le llama discernimiento espiritual. El discernimiento se hace en vistas de la acción y, en particular, de la toma de decisiones. Es fácil comprender, entonces, que la experiencia de los individuos, su destino, depende en gran medida de su capacidad de discernimiento. El discernimiento es una característica de quienes han hecho un camino espiritualy, en consecuencia, son capaces de distinguir unas cosas de otras, de entender la validez de aquello que se les presenta, de distinguir y clarificar la verdadera naturaleza de algo o de las intenciones de alguien. En efecto, la historia humana, con todo y sus ambigüedades, es muy semejante para todos los seres humanos, pero la calidad de vida depende de cada individuo y, más concretamente, del discernimiento y de la sabiduría de cada uno. En los siguientes párrafos se propondrán algunas aplicaciones del discernimiento y de la sabiduría a la experiencia dolorosa del coronavirus en relación con la fragilidad humana y todo lo que ella representa para el ser humano y, en particular, al discípulo de Cristo en particular La Fragilidad humana Las situaciones generadas por el coronavirus han puesto en evidencia (sobre todo para quienes lo habían cancelado de su conciencia) que la vida
humana, aun siendo lo más valioso que tenemos desde el punto de vista natural, es muy frágil. Dios nos ha colocado en un mundo extraordinariamente equilibrado que responde a las múltiples condiciones que necesitamos para vivir Con frecuencia olvidamos esta fragilidad y hablamos del ser humano con una autosuficiencia fuera de la realidad. Quizá hemos olvidado que el primer pecado consistió en "querer ser como Dios" (Gn.) y que el único resultado de esta pretensión es la constatación de los fatales efectos que resultan al no vivir armonizados con la propia condición de creaturas. Un llamado a la humildad La experiencia que nos ha hecho vivir el coronavirus ha puesto de manifiesto los límites de la ciencia y lo falso que resultan algunas expresiones como aquellas que afirman que "el hombre que ha conquistado el espacio" sólo porque un número reducido de seres humanos logró llegar a la Luna, que está a una distancia microscópica de la Tierra si la comparamos con la extensión del espacio sideral (que el hombre dice haber conquistado). La experiencia actual no es para despreciar la ciencia, la capacidad para salir de espacio atmosférico u otros logros humanos, sino para entenderlos y darles la debida proporción al reconocer sus límites.
Un llamado a la gratitud La contingencia en la que hemos estado viviendo las últimas semanas pone en evidencia que la vida es un regalo maravilloso que nadie puede darse a sí mismo, y tampoco conservarlo por propia decisión. Siendo así, lo único que podemos hacer es cuidarla (viviendo saludablemente), vivirla (sin desperdiciarla en cosas inútiles) y, sobre todo, agradecerla, teniendo siempre presente al Padre Amoroso que ha querido regalármela. Si Dios me llamara hoy mismo a la vida eterna (a causa del coronavirus o por cualquier otra causa), le estaré infinitamente agradecido por los años que me concedió de tener ese grandísimo don que se llama vida y, en todo caso, me arrepentiré de no habérselo agradecido suficientemente, habiéndome Él concedido tanto tiempo para hacerlo. Un llamado a "estar preparadas y preparados" Cuando escuchamos en el evangelio "estén preparados porque no saben ni el día ni la hora" (Mt 24, 42-51), seguramente pensamos en el momento de nuestra muerte. Esto es correcto, pero la crisis del momento presente nos sugiere tener presente que ese "estar preparados" es, o debería ser, una condición ordinaria, puesto que en la vida de todos los seres humanos siempre existirá el riesgo de que aparezcan situaciones críticas y es posible que no estemos preparados para ellas, tal como ha sucedido con muchas personas a causa de la contingencia provocada por el coronavirus. La crisis provocada por los cambios en la rutina cotidiana, la renuncia a ciertas gratificaciones, los desajustes económicos, la enfermedad y la muerte de muchas personas han provocado en muchas personas ansiedad, angustia, depresión y desesperación, mientras que, para otras, la misma situación ha sido ocasión de reflexión y maduración personal. La diferencia entre estas dos formas de reaccionar está en la preparación remota y próxima para afrontar situaciones de crisis. Para entender estas diferencias, y para aprender de ellas, es útil el concepto de crisis ofrecido por Karl Slaikeu, que la define como "un estado temporal y agudo (que aparece en forma repentina) de desorganización, en el cual las herramientas dejan de servir" Dicho en otras palabras, la crisis aparece en forma aguda cuando una persona debe afrontar una situación para la que no tiene herramientas suficientes. Esto significa que quienes han afrontado la situación crítica de forma positiva poseían pre-
como el mal carácter, las adicciones, las actitudes narcisistas, sólo por mencionar algunas, que, además de ser contagiosas, también son dañinas y, en algunos casos, mortales. Sin embargo, la conciencia de esta dimensión social del mal, en cuales quiera de sus manifestaciones, pasa, por lo general, desapercibido. Enseñanzas y aprendizajes (y después, ¿qué?)
viamente una serie de herramientas relativas al conocimiento, mismas que les han permitido entender con sabiduría lo que está sucediendo. Poseían también herramientas relacionadas con habilidades humanas de autoconciencia, de empatia y de capacidad de relación interpersonal. Estas habilidades no se improvisan, lo cual significa que buscaron crecer independientemente de que se les presentaran momentos de crisis. Una nueva conciencia de "lo social" Aparentemente lo dramático de la pandemia del coronavirus radica en el número de muertes que ha provocado, sin embargo, existen otros factores que producen aún más muertes. Sólo por señalar algunos: en 2014, tan solo en México fallecieron diariamente 23 personas por hambre y desnutrición; 147 por tabaquismo y 34 por alcoholismo. En 2017, según datos de la OMS, se realizaron en el mundo más de 50 millones de abortos. Es claro que el hambre, el alcoholismo, el tabaquismo y, sobre todo, los abortos, poseen un índice de mortalidad mayor que el producido por la pandemia del coronavirus. Existen otras situaciones humanas evitables, como la delincuencia, los accidentes irresponsables, las guerras, etcétera, que producen más muertes que el coronavirus. ¿Por qué, entonces, el coronavirus ha generado tanto miedo, tantos cambios en las relaciones interpersonales y tantos problemas para la economía mundial? La respuesta es clara: por la facilidad de contagio. La facilidad con la que se contagia el coronavirus nos está diciendo que cuando un ser humano está dañado, el daño afecta a quienes están en relación con él. Quizá existen ciertos males,
¿Qué pasará después de la pandemia del coronavirus? Seguramente, quienes ya estaban preparados, saldrán con más sabiduría y fortaleza gracias a su capacidad de aprendizaje. Habrá otros que se habrán despertado y habrán iniciado un camino explícito de crecimiento humano y espiritual interesándose en comprender los signos de los tiempos presentes, siendo más humildes y agradecidos, así como más solidarios, responsables con los demás y más fraternos. Seguramente existirán también aquellos que, después de pasar un período de tiempo angustiante y confuso olvidarán lo vivido y repetirán los mismos errores de siempre. Dios, a través de la historia, nos invita a aprender, a cambiar, a crecer El tiempo que estamos viviendo nos invitada a crecer en sabiduría, en humildad y, sobre todo, en gratitud. Es posible que alguien se pregunte, ¿cómo ser agradecidos ante tantas muertes? Las dificultades que podamos encontrar para ser agradecidos son el resultado de no estar preparados para percibir que la vida es un regalo completamente gratuito de Dios. Es un regalo que nadie puede darse a sí mismo o, menos aún, comprarlo; se trata de un regalo que sólo puede agradecerse. Estos momentos de crisis nos invitan, entre otras cosas, a agradecer y apreciar siempre ese don de la vida y, al final de nuestra existencia terrena, la vida eterna, donde encontraremos a un Dios que nos ha amado siempre y sin límites. &
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"No está aquí, ha resucitado según dijo Solemne Vigilia Pascual, ciclo A Por Francisco J. Enriquez Zulaica, SDB
Antes de comenzar es necesario leer, serena y tranquilamente una o varias veces, el texto de Mateo 28,1-10: 1 Pasado el sábado, al amanecer del primer día de la semana, vinieron María de Magdalay la otra María para ver el sepulcro. 2Y he aquí que sucedió un gran sismo, pues un ángel del Señor bajando del Cielo y acercándose, removió la piedra y se sentó sobre ella. 3Su aspecto era como un relámpago y su vestimenta blanca como nieve. 4Los guardias temblaron de miedo y quedaron como muertos. 5Entonces el ángel, respondiendo a las mujeres, dijo: "No tengan miedo, sé que buscan a Jesús, el crucificado; 6no está aquí, ha resucitado según dijo. Vayan, vean el lugar donde había sido puesto. 7Y vayan rápidamente a decir a sus discípulos que ha resucitado de entre los muertos, y he aquí que va delante de ustedes hacia Galilea, allí le verán. He aquí que les he dicho" sEntonces se fueron rápidamente del monumento con miedo y gran alegría, corrieron a anunciar a sus discípulos. 9 Y he aquí que Jesús les salió al encuentro diciendo: "Alégrense", ellas se acercaron aferrándose a sus pies y se postraron ante Él. 10Entonces Jesús les dijo: "No teman, vayan y anuncien a mis hermanos que vayan a Galilea, allí me verán"
¿VleXto Busca leyendo... (Lo que dice el texto en sí mismo, para entenderlo mejor) Pasado el sábado [el tercer día de la muerte] nos indica el tiempo que los judíos pensaban que tardaba el espíritu del hombre en abandonar su cuerpo; en este caso, Jesús se levanta entero. A diferencia del actuar de Jesús, que en repetidas ocasiones hace el bien incluso en sábado, esta vez "lo observa" descansando en el sepulcro. Es la Pascua solemne de la liberación del pueblo actualizada en la liberación de la corrupción de la muerte. El primer día del sábado (traducido como "de la semana"), nos presenta esa mañana tanto como el inicio de un nuevo ciclo como la plenitud del Sabbath eterno, prometido por Dios a quienes le son fieles. Las protagonistas son dos mujeres que, al momento de sepultar a Jesús, se quedan sentadas a la puerta del sepulcro (27, 61), y ahora van a ver el lugar En la tradición de Mateo no se menciona la intención de ungir el cuerpo. Como al momento de expirar Jesús en la cruz, también ahora se produce un terremoto. El ángel que desciende y abre el sepulcro se sienta como lo hicieran las mujeres antes. El aspecto del ángel trae ecos de la manifestación del Hijo del Hombre (Dn 7, 9; 10,
6; Ap 1, 14; 2, 18) que anuncia la era mesiánica. Tanto los guardias puestos por Pilato (27, 62-66; 28, 11-15) como las mujeres, se llenan de miedo; pero mientras ellos quedan como muertos (v. 4), ellas son enviadas a anunciar la vida (v.8). Jesús es presentado como el crucificado: no se niega su pasión, pero se afirma que se ha levantado y remanda a la comunidad de discípulos a Galilea. Allí se cumplirá lo que las mujeres querían hacer yendo al sepulcro: ver al Señor Sin embargo, Él sale al encuentro y les permite verlo antes — en esta versión — sólo a ellas. Ellas realizan un acto de fe al postrarse ante Él pero, al mismo tiempo, intentan aferrarse sujetando a Jesús con fuerza. Él les envía a anunciar la resurrección, sin temor, pues es en Galilea donde le verán.
Y encontrarás meditando. (¿Qué me dice la Palabra?) En Mateo, la resurrección se cuenta como una serie de acciones concatenadas pero, más que describir lo sucedido a Jesús, nos narra la teofanía de la tumba vacía. Hay un deseo de ver a Jesús, y en el pasaje los elementos de luz son repetitivos: clarear del día, relámpago, blancura; a esto se auna el sepulcro abierto. El ángel (a través del cual actúa Dios) se sienta en el mismo lugar donde lo hicieron las mujeres a ver la muerte de Jesús. Es el mismo punto de observación con dos visiones distintas. Dios asume el duelo de las mujeres, no lo niega, y les abre los ojos para descubrir en la tumba vacía la inauguración de un tiempo nuevo, marcado por la buena noticia. Éste pregón se cumplirá plenamente en Galilea, donde comenzó la misión de anunciar el Reino. Las mujeres, en su fidelidad ante la tumba, son las primeras en gozar de este ver al Resucitado, antecediendo a los once (vv. 9. 17), pero en ellas no hay duda, sino la vehemencia de sujetara Jesús. La frontera de la muerte de nuestros hermanos, la oscuridad de nuestra propia muerte, son vistas desde
una visión humana — transida en el dolory la incertidumbre — y desde una visión divina — iluminada por la Pascua de Cristo —, ambas visiones van acompañadas de un terremoto, que nos sacude y atemoriza. La muerte tiene este doble sabor del descanso eterno, pero también de una vida nueva en la Resurrección. Es esta visión divina la que nos llena de luz y de alegría. Aunque busquemos sentirnos seguros en ella, Jesús nos invita a no aferramos en la seguridad del sepulcro, sino a verlo verdaderamente en la misión que nos encomienda. Ahí está el respiro de la Fe que mantiene viva nuestra esperanza..
Llama orando... (Lo que le digo, desde mí vida, al Dios que me habla en su Evangelio) Dios de la vida, en la muerte de Jesús, tu Hijo, compartes el duelo que todos los hombres y mujeres experimentamos ante la muerte. Te sientas junto a nosotros, delante de nuestros sepulcros, y te conmueves de nuestro dolor e incertidumbre. Enséñanos a ver como tú: donde sólo percibimos muerte, tu presencia nos invite a ver vida nueva, a ver que ya inicia entre nosotros el tiempo de la salvación. Enséñanos que no es en el sepulcro vacío donde encontraremos a tu Hijo, sino en el anuncio gozoso de tu Reino, justo donde Él nos llamó, y desde ahí esparcir esperanza hasta los confines de la tierra: el amor ha vencido al pecado y a la muerte. ¿JaJcontempiaXtol Y se te abrirá por la contemplación (Hago silencio, me lleno de gozo, me dejo iluminar y tomo decisiones para actuar de acuerdo a la Palabra de Dios) ¿Cuáles son los sentimientos que experimento ante la muerte?, ¿qué experimento al escuchar esta Palabra? ¿Dónde he visto la presencia del Señor Resucitado? ¿Me siento llamado a compartir esta esperanza? ¿Cómo anuncio la Resurrección, lo hago desde un discurso, o sentándome junto a aquellos que sufren el duelo? &
El camino Por José J. Gómez Palacios, SDB
Todavía recuerdo a Don Bosco recorriendo la distancia que separa a Turín del pueblo campesino de Sassi. Cuando le sentí caminar sobre mi cuerpo de piedra y tierra, no pude evitar una sensación de pena y lástima. Y es que los caminos percibimos también el ánimo de quienes nos transitan. La tez pálida de su rostro contrastaba con el color negro de la sotana que le cubría. A pesar de su juventud, se apoyaba en un improvisado bastón. Pasos lentos. Fatiga y cansancio. Me esforcé todo lo que pude para que llegara a su destino: la parroquia de Sassi. A partir de aquel día, le acompañé cada atardecer en los cortos paseos que daba sobre mí. Me acostumbré a la cadencia de sus pisadas. Percibí sus cuitas y desvelos. Así fue como supe que dedicaba sus días y sus noches a ayudar a los chicos pobres de Turín. Había iniciado el Oratorio; hogar para la acogida, el afecto y la educación. Se desvivía. Pero el agotamiento había hecho mella en él. Para evitar un irreparable desenlace, Don Bosco se había retirado a aquella parroquia rural alejada del tumulto urbano. Semanas después, percibí un incipiente vigor en sus pasos vacilantes. Mejoraba su salud. Pero él añoraba regresar Cuando la nostalgia por sus muchachos se tornaba insoportable, yo inventaba cualquier excusa para retenerle. Pero aquella mañana lluviosa no pude hacer nada por evitar lo que ocurrió. Las nubes rozaban las colinas. La niebla tendía su manto sobre los sembrados. Mi cuerpo de tierra se tornó barro. Entonces llegaron ellos: sus pies menudos se adueñaron de mi cuerpo, ya convertido en lodo. Sonreían. Chapoteaban en los charcos. Preguntaban a gritos por Don Bosco. Quise impedirles el paso. Pero tuve que ceder ante el centenar de muchachos que buscaban al sacerdote que era padre, maestro y amigo. Cuando dijeron que deseaban confesar-
se con él, me estremecí. Don Bosco no lo resistiría. ¡Todavía estaba convaleciente! Cuando le hallaron, la niebla se transformó en claridad. El tibio calor de las confesiones secó el barro espiritual de los muchachos. Renació la vida. Creció la alegría. Y mis temores se desvanecieron por completo al descubrir que Don Bosco no sólo ofrecía alimento espiritual a las almas de sus jóvenes, sino que con pan, polenta, salchichón, queso y fruta fortaleció también sus cuerpos. Nunca supe cómo lo hizo, pero la fiesta fue completa. Horas después, regresaron los muchachos a Turín. Al despedirles, sentí que sus pisadas eran distintas. Más que huellas, trazaban estelas de luz sobre mí. Don Bosco les había liberado del peso de la tristeza y la soledad. Sobre mi cuerpo de piedra y tierra peregrinaban hacia un futuro cargado de oportunidades.
La historia Año 1846. Don Bosco inicia el Oratorio. El intenso trabajo quebranta su salud. Debe retirarse a la parroquia de Sassi, población campesina cerca de Turín. Un centenar de muchachos recorrerá el camino hasta Sassi para confesarse con él en una mañana lluviosa (Memorias Biográficas, II, 341-344) 0
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De los dulces a las misiones Por José María Vergara Castillo, SDB, misionero de las Filipinas en la Amazonia
Estudiaba en el colegio salesiano de Canlubang (FIN) cuando me encontré con el P George Schwarz, SDB, un anciano misionero alemán que estaba a cargo del laboratorio de ciencias de nuestra escuela. Me enteré de que era estricto, así que tenía miedo de acercarme a él. Un domingo por la mañana, mientras me preparaba para servir la misa en la capilla del colegio, vi un paquete de caramelos y chocolates volando hacia mi cara. Me golpeó directamente en la nariz. Venía del P George. Rascándome la cabeza, lo mire y con una sonrisa me dijo: "¡Toma unos caramelos para hacerte dulce!" Desde entonces, Fui a confesarme con él, servía en sus misas, hacía muchos experimentos en su laboratorio y aprendí de su hermosa misión en China y en Filipinas. Me inspiró a ser Salesiano y después recé para ser como él: ¡un misionero! Era formador en el Postnoviciado cuando entregué personalmente mi carta al P Ángel Fernández, SDB. Fue un largo camino de siete años de discernimiento desde que recibí una invitación cuando estaba en el Tirocinio. Hubo muchos desafíos a lo largo del viaje, incluso antes de llegar a mi destino. Después de la misa de Nochebuena en la entonces Casa Generalicia de la Pisana, recibí la triste noticia de que mi padre había fallecido. Como Don Bosco, el P Ángel estaba allí para darme consuelo. Conocido por muchos salesianos, mi padre solía escuchar la misa diaria en la capilla del colegio Salesiano desde mis años de formación hasta el día antes de morir Ahora su hijo-misionero tiene un guerrero de la oración en el cielo. En 2017 llegué a la Provincia de Manaus sin saber nada de portugués, un gran desafío para un neófito. Gracias a Dios, nuestro inspector pidió a una anciana hermana salesiana que me ayudara en mi primera inmersión lingüística. Trabajar en una ciudad remota es otro desafío, ya que crecí en grandes ciudades en mi país. Además, adaptarse
a la cultura y a la forma de trabajar también fue agotador, especialmente cuando muchas cosas parecían incomprensibles. El cansancio y la nostalgia pasan a un segundo plano cuando vemos a los estudiantes mejorar su comportamiento, cuando comparten su experiencia de crecimiento en el centro juvenil salesiano, cuando se vuelven más participativos en la parroquia e incluso cuando soy capaz de sentarme al lado de un estudiante para escuchar sus retos y dificultades. Mirando los casi tres años en las misiones y poniendo a Dios en primer lugar, me vi a mí mismo convirtiéndome cada día en un mejor salesiano, madurando en mi vocación y creciendo en santidad, aunque el camino no fuera fácil. A los jóvenes que sienten la llamada a ser misioneros, les digo: no tengan miedo de dar un salto de fe, porque seguro que Dios está siempre ahí para guiarlos y ayudarlos. Dios bendice a aquellos que son "pacientes, pacientes y pacientes" para abrazar una vida de desafíos y sacrificios para los jóvenes, ñ
El derecho a la salud PorGiuliaTraversar
Tienen derecho a disfrutar del más alto nivel posible de salud Art. 50 Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes
El brote pandémico por COVID-19 ha despertado al mundo, poniéndonos, por un lado, frente a la extrema vulnerabilidad de nuestro sistema social, psicológico, cultural, político y económico, es decir, del orden mundial como lo conocemos, y, por otro, recordándonos la importancia de vivir en un Estado que garantice a sus ciudadanos las condiciones necesarias para un nivel de vida adecuado a través de derechos como la educación, el trabajo, la vivienda, la protección del medio ambiente, la asistencia social y el derecho a la salud y a la asistencia sanitaria. Los primeros casos confirmados de COVID-19 en México han movilizado a los medios de comunicación y a la opinión pública, quienes cuestionaron la capacidad del sistema de salud mexicano para enfrentar una pandemia. A la fecha de escribir este artículo se hablaba de un sistema de salud debilitado, insuficiente para hacer frente a una emergencia sanitaria si los casos escalaran. Los testimonios de personal médico realizados por los medios de información reportan una preparación teórica en línea con los protocolos establecidos por la Organización Mundial de la Salud y la Secretaría de Salud, pero denuncian que, en la práctica, hay una grave escasez de recursos y de elementos para implementarlos en los hospitales.1 El Capítulo IX de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (NNA) estipula el Derecho a la Protección de la Salud y a la Seguridad Social de esta población como un derecho básico. Allí, el artículo 50 marca y cita que los menores "tienen derecho a disfrutar del más alto nivel posible de salud, así como a recibir la prestación de servicios de atención médica gratuita y
de calidad de conformidad con la legislación aplicable, con el fin de prevenir, proteger y restaurar su salud [. .]". Es, por lo tanto, obligación del Estado garantizar las condiciones óptimas para la supervivencia y el pleno desarrollo de NNA. Aun así, aunque en los últimos años se han realizado más esfuerzos para ampliar el acceso al servicio público de salud, en 2018 la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) señalaba que 2 de cada 10 niñas, niñas y adolescentes no tenían acceso a servicios de salud, y 3 de cada 10 jóvenes entre 20 y 29 años estaban desprotegidos en ese sentido. Otros indicadores que miden el acceso al derecho a la salud refieren que en México la población considerada como NNA enfrenta retos para su sano desarrollo desde la primera etapa de vida. En 2015, la tasa de mortalidad infantil era de 12.5 por ciento para menores de un año y 7.3 por ciento en menores de 5 años, y sólo 8 de cada 10 niñas y niños son vacunados contra sarampión.2 Creciendo, los NNA son expuestos a otros riesgos, como el sobrepeso y la obesidad, en los que México ocupa el primer lugar al mundo. Estos son sólo algunos del los indicadores que miden el nivel de salud de NNA y que llevan a afirmar que el Estado mexicano todavía enfrenta grandes desafíos en términos de acceso, calidad y educación a la salud. La pandemia de COVID-19 seguramente nos ayudará a recordar la importancia de vivir en un Estado donde los derechos no sólo queden escritos en decretos y legislaciones nacionales e internacionales, sino que se cumplan en la práctica, ñ
Disponible en: https://www.¡nfobae.com/america/mexico/2020/03/16/coronavirus-en-mexico-reportan-carencias-en-hospitales-para-atender-la-emergencia/y https://www.eluniversal.com.mx/opin¡on/carlos-loret-de-mola/en-mexico-el-coronav¡rus-se-encontrara-un-sistema-de-salud-debilitado (consultados el 20/03/2020). 2 Comisión Nacional de Derechos HU (2018) Estudio sobre el cumplimiento e impacto de las recomendaciones generales, informes especiales y pronunciamientos de la CNDH 2001-2017 Tomo I, Niñas, Niños y Adolescente 1
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Sin remitente ni destinatario Por Beatriz
La Parroquia de María Auxiliadora en Chihuahua fue erigida en septiembre de 1967 En cuanto a la estructura de la parroquia, es moderna y sencilla. Cuenta con un vestíbulo, un presbiterio amplio en el que se encuentran, en el centro, la imagen de Jesús crucificado y a la izquierda una imagen de María Auxiliadora. También se puede ver un retablo para una imagen de María de Guadalupe, ubicado en la entrada del templo, a mano izquierda. La parroquia cuenta con sacristía, sagrario/oratorio y confesionario, también tiene una sola nave. El techo es de estructura metálica tipo industrial, y tiene un cielo azul desde la entrada hasta donde esta Jesús Crucificado en donde se une al camino de la tierra, señalado éste con un pasillo central obscuro que va desde la puerta hasta el presbiterio. La imagen de María Auxiliadora fue entregada por la Parroquia de Nuestra Señora del Refugio, Chi-
huahua, aledaña a esta Parroquia de María Auxiliadora. Se desconoce quién la envió. La gente cuenta que fue enviada desde Europa, sin remitente ni destinatario, y como no se había dedicado la parroquia decidieron que sería buena idea encomendarla a María Auxiliadora. El cuadro de María de Guadalupe fue adquirido por el P David Jaime Quiñónez en 2007 En mayo de 2010 se hizo una remodelación al presbiterio, ya que estaba en muy malas condiciones, y en mayo de 2015 se inició la reconstrucción del templo a cargo del actual párroco, P Héctor García Estrada. En la actualidad faltan los últimos detalles, como son la puerta corrediza del vestíbulo y las dos puertas laterales. La festividad de María Auxiliadora es el 24 de mayo, la fiesta patronal se realiza siempre en domingo, un solo día. Hay matachines, música en vivo por diferentes grupos musicales, bailes regionales o folclóricos; también se cuenta con venta de comida, particularmente antojitos mexicanos, tómbola, lotería, bazar y en la Santa Eucaristía en diferentes horarios, con arreglos especiales en el templo. Asisten de 300 a 350 personas durante el horario de 9:00 a 21:00 horas. Entre semana hay dos celebraciones de la Palabra, el lunes y el miércoles; martes, jueves y viernes hay misa a las 8:00 horas. Los sábados a las 19:00 horas, asisten aproximadamente 50 personas y más cuando
hay bodas, XV años, acción de gracias por diferentes motivos como renovación de votos por matrimonio. Los domingos a las misas de las 8:00 horas asisten aproximadamente 100 personas, en la de 12:30 horas más o menos 200 personas y a las 18:00 horas entre 40 y 50 asistentes. Los grupos con los que cuenta son: jóvenes San Juan con 20 integrantes, se reúnen los sábados a las 3 pm y reciben formación y dirección de la Pastoral Juvenil. Grupo de Liturgia, los proclamadores se reúnen los miércoles a las 5 pm para la Lectio Divina del evangelio de la siguiente semana y para asuntos propios de su servicio. RVM reciben formación y estructura del Movimiento Familiar Cristiano. Colectores reciben formación y atención del grupo de Liturgia. Hay varios grupos de Escuela Bíblica en Introducción a la Biblia, Historia de la Salvación I y II, Historia de la Iglesia y Nuevo Testamento. Se prepara la Hoja del Evangelio de la semana que viene para que en grupos o en forma personal o familiar se estudie el evangelio con la metodología de la Lectio Divina. Grupo de Catequistas con el método del Buen Pastor todavía, ya que el obispo ha dado instrucciones para que se adopte el método de Guadalajara "Buscando a Jesús" Los niveles que atienden van de 1o. a 7o. de Confirmaciones. Los Coros que se manejan independientes, no se han podido unir para formarse en este servicio pero en sus participaciones atienden los cantos ligados a la liturgia de la Palabra. En la Parroquia de María Auxiliadora se cuenta con una bonita labor a cargo de la Comisión de Pastoral Social, quien recibe ayuda de 30 despensas mensuales donadas por la Fundación Best del Dr Simi. Además de las despensas, las personas que son beneficiadas también reciben atención médica, la cual es brindada la misma fundación. La Comisión de Pastoral Social está vinculada a Caritas Diocesana, quien brinda estruc-
tura y orientación para realizar otras actividades de beneficio social. Los sacerdotes que han atendido esta parroquia en orden cronológico son: P Jesús Esquivel M., Joaquín H. Astorga, Modesto Rodríguez S., Saturno Chacón H., Enrique López del Río, Carlos Pérez Barrera, David Jaime Quiñones, Juan Olloqui Martínez y Héctor García Estrada. Día a día los agentes de pastoral y los sacerdotes de esta comunidad esperan que nuestra Madre María Auxiliadora haga llegar más feligreses que puedan colaborar con el Reino de Dios, ñ
Patrono de los periodistas Por Redacción SDB
La Iglesia Católica adoptó una actitud más abierta y positiva Frente al mundo de la comunicación cuando, como parte de los trabajos del Concilio Vaticano II (1963), se redactó y promulgó el decreto ínter Mirífica, que trata sobre los Medios de Comunicación Social. Ese documento, considerado parteaguas en la materia, impulsó la reflexión y la participación de todos los miembros de la Iglesia en iniciativas y tareas de comunicación. Un Fruto importante de este decreto es la celebración de una jornada mundial anual dedicada a este tema. La Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales tiene tres momentos, uno de los cuales está evidentemente ligado a san Francisco
de Sales. El primer momento es la publicación del tema de la jornada, que ocurre el 29 de septiembre, día de los arcángeles Miguel, Gabriel y RaFael. El tercero consiste en la jornada como tal, la cual se lleva a cabo el día de la Solemnidad de la Ascensión del Señor El segundo momento es la publicación del mensaje de la jornada, que se hace público el 24 de enero de cada año, Fiesta de San Francisco de Sales. Francisco de Sales es un santo reconocido por su abundante producción escrita. La obra del obispo de Sales está integrada por obras de diversos tipos, pero también podría decirse que está centrada en dos temas de gran utilidad para la época que le tocó vivir el primero,
la presentación de argumentos que ayudaran a los católicos que se habían pasado al calvinismo a reconsiderar su pertenencia a la Iglesia y volver a abrazar la fe católica, o bien, invitar a aquellos nacidos bajo la doctrina protestante a cuestionarse la validez de sus planteamientos y dar el paso hacia la fe verdadera. El segundo tema de la producción editorial del santo obispo fue la vida espiritual, más particularmente la vida devota. En otra entrega se profundizaré este segundo tema. El medio utilizado por Francisco de Sales fue la distribución de breves y numerosas publicaciones, más bien panfletos u hojitas, que se distribuían por toda la región del Chablais, donde ejerció su ministerio pastoral misionero. Como se mencionó antes, Francisco de Sales quería evitar las discusiones o debates contra los calvinistas, que se llevaban a cabo en público y a cuyos enfrentamientos acudía la población para apoyar a su orador o predicador Sabiendo que el reconocimiento de la derrota por parte de sus adversarios era lo más duro de aceptar, optó por escribir sus predicaciones y argumentaciones contra la doctrina protestante. Así, aunque en público los calvinistas se negaban a oírlo, al final estas hojitas llegaban hasta sus manos, teniendo un gran éxito. Así fue como muchos volvieron a la Iglesia Católica. El 26 de enero de 1923 el Papa Pío XI fue quien proclamó a san Francisco de Sales como patrono de los periodistas por medio de la encíclica Rerum Omnium. Pero ¿periodista? ¿De veras? En efecto, el obispo de Ginebra fue periodista porque puso sus dotes de escritor para incidir en la opinión pública, un público desviado de la doctrina católica que, a través de estas publicaciones periódicas volvió al catolicismo. Pero la comprensión de Francisco de Sales como periodista va necesariamente unida a su labor misionera. Es ésta la que explica a la otra. En septiembre de 1594 Francisco se puso en camino a través del territorio de los calvinistas, a pie, llevando apenas lo indispensable y en compañía de su primo, de nombre Luis, junto con
quien realizó la distribución masiva de folletos de puerta en puerta, técnica que sigue vigente en nuestros días. Fue una estrategia que mantuvo hasta que ya no hubo necesidad, es decir, cuando, convencidos por aquellas predicaciones escritas, quienes antes se negaban a escucharlo estuvieron dispuestos a atender sus sermones y explicaciones públicas. No debe causar extrañeza que, luego de madurar en su propia vida espiritual y también siendo obispo, quien se mostró hábil escritor para promover la fe católica, sin renunciar a un estilo sencillo, fuera capaz de escribir importantes obras de espiritualidad. Las dos más conocidas son Introducción a la vida devota o Pilotea, y el Tratado del amor de Dios, a cuyos textos se dedicara más espacio en esta sección del Boletín Salesiano. &
El P. Ángel Fernández Artime, SDB, tendrá un segundo periodo como Rector Mayor El Capítulo General 28 de la Congregación Salesiana ratificó al P. Ángel Fernández Artime, SDB, en su mandato como Rector Mayor para el sexenio 2020-2026. La elección tuvo lugar en la primera votación. El P. Ángel Fernández Artime, de 59 años, nació el 21 de agosto de 1960 en Gozón-Luanco, Oviedo; emitió la primera profesión el 3 de septiembre de 1978 y realizó la profesión perpetua el 17 de junio de 1984; fue ordenado sacerdote el 4 de julio de 1987 Originario de la Inspectoría de León, fue delegado de Pastoral Juvenil, director del colegio de Orense, miembro del Consejo Inspectorial y Vicario. De 2000 a 2006 fue Inspector de León. Es licenciado en Teología Pastoral, Filosofía y Pedagogía. Fue miembro de la Comisión Técnica que preparó el Capítulo General 26. En 2009 fue nombrado Inspector de Argentina Sur En el ejercicio de su encargo como Inspector de Argentina pudo conocery colaborar personalmente con el entonces arzobispo de Buenos Aires, el cardenal Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa Francisco. El 23 de diciembre 2013 fue nombrado Superior de la Inspectoría de España-María Auxiliadora, un encargo que nunca asumió pues el Capítulo General 27 lo eligió como nuevo Rector Mayor y décimo sucesor de Don Bosco.
El P. Hugo Orozco Sánchez, SDB, es el nuevo titular de Interamérica A mediados de marzo, durante los trabajos del Capítulo General 28 que tuvo lugar Turín, Italia, los participantes han elegido como nuevo consejero regional para Interamérica al P. Hugo Orozco Sánchez, para el periodo 2020-2026. De esta manera el P. Hugo ahora formará parte del Consejo General de la Congregación Salesiana, grupo de salesianos que asisten al Rector Mayor en su tarea de animación y gobierno de la Sociedad de San Francisco de Sales. El P. Hugo Orozco Sánchez nació el 30 de junio de 1968 en San Luis Potosí, San Luis Potosí. Hizo su noviciado en Chula Vista y emitió sus primeros votos el 16 de agosto de 1989 en Tlaquepaque. Hizo la profesión perpetua el 10 de septiembre de 1995, también en Tlaquepaque. Fue ordenado sacerdote en el templo de Cristo Resucitado de la misma ciudad el 15 de marzo de 1997 Antes de ser nombrado Superior también había servido para la Inspectoría México Guadalajara (MEG) como Delegado de la Pastoral Juvenil y también de Formación. Agradecemos el servicio prestado por el padre Hugo como titular de MEG y le pedimos a Dios le fortalezca y bendiga en este nuevo servicio que prestará a la Congregación y, en particular a las inspectorías que Forman parte de la región de Interamérica.
La Opción Valdocco: así concluyó el Capítulo General 28 "¿Con qué puedo comparar el reino de Dios? Es similar a un poco de levadura: si una mujer la toma y la amasa con tres grandes medidas de harina, entonces la levadura hace que la masa entera fermente" Esta hermosa parábola de Jesús puede ser una buena comparación para el Capítulo General 28 que, si bien fue más corto de lo esperado, su trabajo acaba de comenzar esparcirá su fuerza y sus fermentos beneficiosos en la Congregación. El Papa Francisco resaltó este escenario en su mensaje: "La opción Valdocco de su 28° Capítulo General es una buena oportunidad para confrontar las fuentes y preguntar al Señor Da mihi animas, caetera talle (Dame almas, llévate lo demás). Esto requiere que superemos los temores y aprensiones que puedan surgir" Tampoco se pueden olvidar las palabras de los jóvenes presentes en el Capítulo: "Salesianos, no se olviden de nosotros los jóvenes, porque nosotros no nos hemos olvidado de ustedes y del carisma que nos han enseñado" En un clima de verdadera armonía, el Capítulo demostró con empatia y coherencia otra verdad subrayada por el Papa: "Los interlocutores de Don Bosco ayer y del Salesiano de hoy son protagonistas vivos del oratorio a realizarse. A través de ellos y con ellos el Señor nos muestra su voluntad y sus sueños"
abril Los Salesianos del mundo enfrentan al coronavirus (covid-19) En los últimos meses, la pandemia por coronavirus (covid-19) se ha extendido por diversos países del mundo, y las presencias salesianas no han quedado inmunes a su paso. Ante esta situación, se han organizado diferentes iniciativas para seguir atendiendo las obras y brindando acompañamiento a los jóvenes. Algunos ejemplos: En Brasil, los equipos educativos de la Inspectoría San Juan Bosco de Belo Horizonte (BBH) ofrecen muchas propuestas y mantienen el contacto con los estudiantes que están en casa a través de redes sociales y una aplicación para dispositivos móviles. En Perú, la Fundación Don Bosco entrega de alimentos a las familias pobres, mientras que en El Cairo, Egipto, el Instituto Don Bosco Cairo —con 860 estudiantes y 60 profesores— tomó inmediatamente medidas para poner en marcha un plan para seguir impartiendo formación a distancia. En España, uno de los países más afectados por la pandemia, casas como Palma del Río, Elche, Cádiz, Martí Codolar, Atocha, Pamplona, Puertollano, Salamanca o Santander entre otras, han puesto sus dones al servicio de diferentes iniciativas de colaboración con centros sanitarios, aun cuando la Inspectoría Santiago el Mayor con sede en Madrid, está siendo muy castigada por la pandemia.
Las reliquias de san José Sánchez del Río visitaron el Colegio Ángela Segovia El Colegio Salesiano Angela Segovia de Serrano, en Barrientes, Estado de México, recibió la visita de la reliquia insigne de san José Sánchez del Río, hecho que la comunidad educativa, dirigida por el P. Miguel Ángel Lezama Rojas, SDB, vivió con gran júbilo. El P. Lezama presidió la solemne misa con la que se dio la bienvenida a la reliquia. Al finalizar la celebración se recordaban las palabras que convencieron a la madre de José para permitirle unirse a la gesta católica en defensa de la fe cristiana: "Nunca ha sido tan fácil ganarse el cielo como ahora" El grupo de Novicios Salesianos (CAM, ANT HAI y MEG) participó en la celebración en compañía del P. Héctor Hernández, SDB (CAM), miembro de la comunidad de formadores del Noviciado Interinspectorial de México. Alumnos y alumnas, docentes, personal del colegio y padres de familia se turnaron para venerar la reliquia, dejando sus peticiones bajo la intercesión de "san Joselito" San José Sánchez del Río es un adolescente y mártir mexicano. A ios 14 años sufrió el martirio durante la Guerra Cristera. Fue beatificado el 20 de noviembre de 2005 por el Papa Benedicto XVI y canonizado el 16 de octubre de 2016 por el Papa Francisco. Su celebración fue establecida el 20 de noviembre de 2005.
De Sherbroohe a México: una experiencia apostólica desde hace 25 años El Instituto Salesiano Juan Ponce de León recibió a los jóvenes estudiantes salesianos de secundaria de la escuela en Sherbrooke, de Quebec. Este grupo de jóvenes canadienses llegan todos los años a una de las obras significativas de la Inspectoría México México (MEM), el proyecto Chavos Don Bosco, con la finalidad de ofrecer tiempo y energía al servicio de los más necesitados. Durante 25 años, los jóvenes del Colegio Salesiano de Sherbrooke, de Quebec, realizan esta actividad, que beneficia a los chicos en vulnerabilidad y, sobre todo, los hace crecer como verdaderos promotores de un mundo más solidario y más humano. El domingo 1 de marzo se reunieron en el Instituto Salesiano Juan Ponce de León chicos y chicas salesianos de Sherbrooke que pertenecen al Movimiento Juvenil Salesiano de Canadá. El primero objetivo fue conocer una de las antiguas casas de MEM y que era el Aspirantado y hoy se ha convertido en una escuela. Los jóvenes canadienses estuvieron acompañados por el P. Alain Leonard, SDB, de la Inspectoría SUE (Este de los Estados Unidos-Canadá), el salesiano Moisés Rubén Illescas Morales y el P. Noé Jorge Lara, del Artesanado de Nazareth, donde los jóvenes del MJS de Canadá tienen contacto con muchachos en situación de vulnerabilidad.
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La otra cara Por Iván Vega Ronce, SDB
Hace unos días Dios me dio un regalo no pedido: tuve la oportunidad de pasar cerca de diez días en un hospital público. En ese tiempo pude aprender varias cosas, entre ellas, me gustaría señalar algunas: Uno ingresa como desconocido, ves a mucha gente que está al igual que tú, en espera de noticias de los médicos, y conforme pasa el tiempo te conviertes en un miembro de esta comunidad de espera; te haces Familia de otras personas que pasan por una situación como la tuya y dejas de sentirte solo; ver a otros y conocer sus nombres, sus historias, sus dolores y angustias, te hace sentir parte de algo más, el pensar y el sentir con otros puede aliviar tu pena y puede abrirte a confiar y proteger al prójimo. En el transcurrir de las horas, pueden verse muchas cosas, desde gente que, sin fe, está sufriendo la situación de enfermedad; gente con fe a quienes la misma situación de enfermedad las hace salir al encuentro de otros, de buscar el consuelo en otros y de volver la mirada a Dios y a quienes, quizá por sentirse seguros y cómodos en lo cotidiano de la vida, se les había olvidado agradecer a Dios por todas la cosas que tenemos en la vida diaria. Puede verse cómo se afronta el tema del sufrimiento: desde permanecer frío y, en lugar de ver personas vers sólo expedientes y números, o profesionista de la salud que tratan de aportar humanidad en los momentos difíciles de la enfermedad; puede verse gente prepotente y egoísta que sólo piensa en su persona, en su dolory quiere que el mundo gire a su derredor, o gente que, a pesar de llevar horas en espera de ser atendida, renuncia a su turno cuando ve que llega alguien que sufre más. Por la tarde-noche es agradable cuando llegan grupos de personas a regalar comida, sabiendo que cuando se está en la situación de cuidar a un
familiar muchas veces ni se tiene tiempo, dinero u oportunidad de buscar alimento; pero es más agradable cuando no se limitan a dar cosas materiales, sino que dedican su tiempo a platicar, a conocer la historia y a echar porras en el caso de cada paciente. Muchos de estos grupos son jóvenes. Algunos se acercan con miedo, otros por compromiso, muchos con alegría de compartir su vida. Cuando se van, queda la resonancia en la sala de espera: escuchar la gratitud por estos gestos de caridad, sentirse escuchados, sentirse humanos, es algo que todos agradecen. Nos acercamos a la Pascua, la fiesta por excelencia de la Iglesia donde celebramos que la muerte es vencida por Dios, donde recordamos que el sufrimiento, el sacrificio, el dolor, quedan atrás porque Cristo nos trae vida, y vida en abundancia. Aprovecha los momentos que tengas para dar una sencilla catequesis desde el servicio, para encontrarte con la otra cara de la realidad que muchas veces no queremos ver el sufrimiento de los demás. Te aseguro que al ponerle nombre dejará de ser algo desconocido y podrás tomar partido para construir una mejor sociedad, una mejor iglesia, una familia más unida, ya que nadie puede dejar a un familiar sufrir solo. Hay muchas formas en que puedes acercarte a la realidad del sufrimiento para hacerlo más llevadero. Creo que lo más importante es darle tiempo, más que cosas materiales: si regalas dinero al que pide limosna, pregúntale su nombre, eso puede ayudarlo más de lo que te imaginas; si llevas comida a hospitales o albergues, dedícales tiempo para que no se sientan solos o abandonados. Que conozcan o recuerden el amor que Dios les tiene por medio de tu presencia, de tus acciones y, si es necesario, recuérdales con palabras que Cristo nos ama y quiere, ñ
Juan José Bartolomé (editor)
¿QUE SALESIANOS PARA LOS JÓVENES DE HOf Reflexiones bíblicas y salesianas Dentro de la presentación del libro, el Rector Mayor, Ángel Fernández Artime, SDB, menciona lo siguiente: "El título de este libro —editado por la Asociación Bíblica Salesiana— ¿Qué Sales/anos para tos jóvenes de hoy? Reflexiones bíblicas y salesianas nos revela sus contenidos y la perspectiva: partiendo de la Palabra de Dios y de una relectura fiel y dinámica de las decisiones de Don Bosco por los jóvenes, tiene como objetivo fundamental iluminar a los Salesianos, en especial, y también a otros miembros de nuestra Familia Salesiana, en el contexto del Capítulo General 28. Tener el Evangelio como norma de vida cristiana y a Don Bosco como padre y fundador nos lleva a conocer vitalmente al Don Bosco trasmitido por la tradición salesiana y a vivir en estado de adoración, atentos a las situaciones que viven y sufren hoy día nuestros jóvenes. Estas son las condiciones previas que garantizan una relectura, o mejor una escucha de la Palabra de Dios verdaderamente salesiana" El ejemplar, editado en septiembre de 2019 por el P Juan José Bartolomé, reconstruye desde la óptica de diferentes autores, todos ellos salesianos, algunas perspectivas del perfil salesiano de la actualidad mediante un recorrido histórico de la experiencia personal de Don Bosco. El ejemplar indica, ante todo, las motivaciones espirituales de sus opciones, sus intuiciones en el ámbito
social, educativo y eclesial, los proyectos que realizó y las estrategias que adoptó para asumir y formar a sus colaboradores. Los autores que participan de esta compilación abordan las diferentes experiencias de Don Bosco en puntos fundamentales o innovadores respecto a su época; además, presentan algunas sugerencias para repensar seriamente el perfil del "salesiano de hoy" y, por tanto, del proceder de la Congregación Salesiana. Este texto se sitúa en el horizonte del reciente Sínodo sobre los jóvenes y concluye con una mirada al futuro, una especie de síntesis para el salesiano actual, ñ
Con información de editorialccs.com/libro/5467/que-salesianos-para-los-jovenes-de-hoy/.
Salesianos de Don Bosco ^ México Norte P.Óscar Miguel Martínez Velazco, SDB P. Gabriel Gómez Gutiérrez, SDB Hno. Efrén Flores González, SDB López Cotilla 1274, Col. Americana, 44160 Guadalajara, Jal. Cel. 333 809 9238 vocaciones@salesianosmeg.org
Salesianos de Don Bosco México Sur Hno. Sebastián Marcisz, SDB Colegio Salesiano 38, Col. Anáhuac, Miguel Hidalgo 11320 México D.F Tel. 553 653 7618 seb.marcisz@gmail.com . -•••••-• :
Salesianas Hijas de María Auxiliadora México Sur Sor Elvia Castillo Juárez, FMA Laguna de San Cristóbal 64, Col. Anáhuac, Miguel Hidalgo 11320 México D.F Tel. 555 396 6697 siguemef ma@yahoo.com.mx Salesianos Cooperadores (MEM) Ma. Elena Ochoa sale_cooperadores_mes@yahoo.com Voluntarias de Don Bosco ydb mex@hotmail.com
Salesianas Hijas ' de María Auxiliadora México Norte Sor Karla Marrón Trasvina, FMA Felipe Angeles 700, Col. León XIII, 67120 Guadalupe, N LJels.8, 8 3 7 9 7 3 9 2 * 8 1 8 3 7 9 3 7 3 7 monterreyfma@gmail.com iwww.salesianasdemexico.org
Salesianos Cooperadores (MEN) • Alejandro Corona Montoya ssC'G.provinlia.mexico.norte@gmail.com