Octava Planta número 40

Page 6

nœmero 40_3:maqueta n”31.qxd

03/12/2009

3:15

PÆgina 6

Amargo como la vida, dulce como el amor, suave como la muerte Por Miguel García Sanz Hace veinte años cayó el Muro de Berlín. Un hecho que sin ninguna duda ha marcado un antes y un después, no solo en una ciudad, ni siquiera en Alemania; sino en toda Europa y el mundo. Comenzó entonces un nuevo periodo de democracia y libertad. Por desgracia aún quedan muchos muros. Unos metafóricos, otros reales. Aprovecho este espacio para hablar de uno de ellos. Un muro muy real pero que, al igual que el de Berlín, contiene un gran aspecto simbólico. En 1980 Marruecos comenzó a construir un muro con el objetivo de mantener alejados a los saharauis de fuentes de riqueza de su propia tierra (de la cual habían sido expulsados como todos sabemos) y para dificultar posibles ofensivas. Más de 2700 km de largo cruzan el desierto. 300 metros de ancho compuesto por un campo minado, un foso antitanques y una muralla. Todo ello vigilado por trincheras y con sistemas electrónicos antiataque. Algo que a los marroquíes supone unos dos millones de dólares diarios. ¿Cuándo caerá el muro? ¿Cuándo terminará el conflicto del Sáhara? La sociedad en general está con-

cienciada. Las entidades sociales también. La ONU emitió una resolución en la que se recogía el derecho de autodeterminación del Sáhara: muchos países hacen caso omiso, entre ellos España. Y es que España no solo debería reconocer la independencia del territorio y defender el derecho de los saharauis a regresar a su tierra. Marruecos es culpable, pero España responsable y debe encabezar políticas exteriores que solucionen este conflicto. No solo debemos apelar a la responsabilidad histórica de España. También a la voluntad de sus ciudadanos que, de forma general, están concienciados con el conflicto y deseosos de ver una solución. Y, mientras tanto, las familias saharauis viven en campos de refugiados porque un día alguien les cortó la luz, cerraron los colegios, los hospitales y les arrastraron hasta la parte más árida del desierto. Aún así, siguen luchando, educando a sus hijos para que algún día puedan salir hacia delante, organizándose políticamente y cooperando entre las familias. Todo ello con ayuda de cooperantes y la voluntad que tienen de recuperar lo que es suyo. Sáhara libre.

PATADAS A LA LENGUA Víctor Molina García Si bien la televisión no da buen ejemplo en prácticamente nada, llevan una temporada que, en materia de lenguaje, se están luciendo (y ya se sabe que todo lo malo se pega). Lo verdaderamente preocupante es que, debido a la expansión inminente de estos “palabros”, incluso algunos empiezan a aparecer en el diccionario de la Real Academia Española. Se nos está olvidando que en el castellano existen palabras (¿o debería decir existían?) que son comunes al género, es decir, son términos a los que no se añade ningún morfema para distinguir entre el masculino y el femenino. Entre esas palabras se encontraban las que provienen de los ya olvidados participios de presente latinos, tales como presidente, gobernante, paciente o solicitante.

Página 6

Bueno, pues en el D.R.A.E. ya se contemplan presidenta y gobernanta. Pero el delirio llega desde luego con ciertos términos de profesiones, tales como juez, abogado, arquitecto o ingeniero, donde la R.A.E. ha acabado aceptando los femeninos jueza, abogada, arquitecta e ingeniera. Lo gracioso es que determinados grupos luchaban por este cambio “porque las palabras que acaban en -o denotan género masculino”. En definitiva, al final acabaremos diciendo el periodisto, el dentisto, la cancillera, la estudianta, la miembra, el jirafo y demás barbaridades con tal de que nadie se ofenda: el Castellano está condenado a sufrir maltratos (¡ah, pero si en la tele dicen malos tratos!) sin sentido alguno.

Octava l a n t a

p


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.