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La aparición del radar durante la segunda guerra mundial obligó a cambiar la estrategía militar. Los aviones podían ser fácilmente detectables a cientos de kilómetros de distancia. Por ello desde un primer momento se intentaron buscar soluciones para burlar estos dispositivos. La primera de todas y la más simple fue el vuelo bajo ya que los radares suelen estar orientados hacia el cielo, quedando las zonas de poca altura fuera de su zona de influencia.
Sin embargo, los problemas de maniobrabilidad a poca altura junto con el desarrollo de unas cada vez más sofisticadas técnicas de detección, obligó a buscar nuevas formas de hacer indetectables a los aviones. son las conocidas como “tácticas anti-radar” o “técnicas furtivas”. La esencia de la furtividad al radar es intentar que las ondas electromagnéticas no retornen al emisor, sino que sean absorbidas por la forma, estructura o materiales del avión, o que sean reflejadas hacia otras partes. Por tanto, es uno de los más importantes factores a tener en cuenta en el diseño es la forma del avión, tanto que muchos de los aviones actuales tienen una superficie efectiva a los radares comparable a la de pájaros o insectos.
Aparte de emplear materiales que ni reflejen ni dejen seguir el camino de las ondas de radar, otra forma para lograr la “invisibilidad” es emplear un camuflaje óptico. Razón por la cual se pintan uniformemente de negro y no llevan insignias fácilmente visibles, como hacían los cazas nocturnos de la segunda guerra mundial y principalmente atacan de noche, cuando el cielo está tan oscuro como ellos.
BARCOS FURTIVOS Al igual que los aviones, los barcos furtivos emplean técnicas que evitan que las ondas de radar o sónar que llegan a su casco sean devueltas al dispositivo emisor. No solo la forma y el diseño del casco son factores cruciales a la hora de evitar ser detectados, también la salida del barco a la superficie tiene que evitar ser vertical, ya que si no se devuelve directamente la onda al emisor. Es por ello que las superficies de los barcos “invisibles” (a los radares) se construyen con salientes para que no reflejen las ondas de radar.
Conseguir el diseño óptimo no es tarea sencilla y es por eso que se tardaron varios años en lograr un primer prototipo, cuando se dispuso de los sistemas informáticos y programas de computación que permitían predecir la reflexión de las ondas de radar cuando se variaba la forma del fuselaje del avión.
ENLACES DE INTERÉS - http://www.youtube.com/watch?v=qgbFUsk7ZBo - http://www.youtube.com/watch?v=g8eRc61DrtQ - http://planetagadget.com/2007/10/13/f-117-nighthawk/ - http://lles.lacoctelera.net/post/2008/08/11/tecnologias-furtivas-invisibilidad-y-camuflaje
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