para ser esposa y “su virtud” por tanto se ve relegada a las tareas de servicio o docencia esto solo ocurría si su condición económica no era buena o no se casaba. Pero si contraía matrimonio su rol estaría alrededor del cuidado de los hijos y el mantenimiento del hogar.
Encontraremos posteriormente una segunda oleada de tunas femeninas en América pasados los años sesenta, donde ya se han dado importantes cambios y revoluciones sociales y una consolidación de la mujer dentro de la universidad. 30