EL SUEÑO DE UN VESTIDO
de novia por KEILA DÍAZ G.
SEGUIMOS A SILVIA –UNA NOVIA QUE ELIGIÓ CONFIAR EN UNA MODISTA PARA CREAR SU VESTIDO DE NOVIA A MEDIDA Y DESDE CERO– A LO LARGO DE TODO SU PROCESO PARA CONOCER, PRUEBE TRAS PRUEBA, CÓMO VIVE CADA INSTANTE PREVIO A VER HECHO REALIDAD EL SUEÑO DE SU VESTIDO DE NOVIA.
Toda novia sueña a imaginar cómo será el vestido de su boda, fantaseando con ese momento en el que se mire al espejo y se dé cuenta de que ha encontrado ‘su vestido’. Y si cierto es que las colecciones prêt-à-porter facilitan la búsqueda, ya que al instante eres capaz de verte vestida de novia, cuando se elige llevar un vestido de costura a medida el proceso se alarga en el tiempo, viendo, pespunte a pespunte, prueba tras prueba, como el mismo va tomando forma hasta convertirse en ese vestido de novia soñado.
La boda de Silvia tendría como original leitmotiv los puzles y por eso, novia y diseñadora, idearon un vestido de novia ‘desmontable’ que partía de un vestido corto con pronunciado escote en V, que servía como base (y que lució para el baile), al que se le añadían distintas piezas como un gran falda de encaje con cola y una torera, también de encaje, para lucir durante la ceremonia. ¿El resultado?... ¡El vestido de novia con el que Silvia había soñado!, y con el que, sin duda, se sitio cómoda, segura y guapa.
El 16 de agosto de 2013, el día de su pedida de mano, Silvia no sólo se embarcó en la organización de su boda, sino en el proceso de imaginar cómo sería su vestido de novia. Desde el primer momento tuvo claro que el vestido más importante de su vida tenía que ser especial, único e irrepetible confiando su diseño y confección en La Unike.
Durante todo el proceso de creación de su vestido de novia Silvia fue apuntando sus emociones, creando un pequeño diario de sensaciones que bien nos ayudan a hacernos a la idea de cómo una novia vive este hermoso proceso, y que si bien empieza con la palabra “expectación” termina con una única exclamación: “¡Felicidad!”
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