1 minute read

Mar de Cortés

Pletórico de maravillas en sus litorales, islas y mundo submarino, el Mar de Cortés es desde su descubrimiento escenario pintoresco y abundante en recursos como lo exponen muchos de los primeros viajeros y navegantes desde hace alrededor de 400 años.

Aquel mar interior que se navega desde antes de saber que la Baja California era una península, es descrito en la historia de muchas formas, todas ellas coincidiendo en la descripción de su paisaje, atributos de su naturaleza, prodigios de sus aguas submarinas y lo exótico de los parajes de islas y litoral. Este mismo mar, en el que ahora arrastran redes miles de pescadores ribereños y cientos de embarcaciones pesqueras de camarón, sardina, atún y más, ofrece aún al mundo una oportunidad de aprovechamiento sustentable al plantearse como destino de viajeros que, procedentes de todo el mundo, naveguen en barcos de placer por sus aguas recorriendo sus litorales, visitando sus puertos y recreándose en su naturaleza, clima, y valores geoturísticos únicos en el mundo.

Advertisement

Los valores geoturísticos -entendiendo como tales aquellos valores únicos que le hacen diferente de todo el resto del mundo- que tiene esta región son importantes y valiosos y junto a ello la localización geográfica de este mar que le ubica cerca -porcarretera- de uno de los mercados mejor poblados y ricos del mundo como es California en Estados Unidos y también el estado de Arizona, con el que está conectado por la misma red de carreteras. Si a ello agregamos las condiciones del clima de todo el año, las posibilidades de aprovechamiento, tanto en invierno como en verano, además de entretiempo, ofrecen un amplio espectro de mercado, de orígenes de viajeros y de escenarios para su disfrute.

Son también ventajas que favorecen el desarrollo turístico, la infraestructura de aeropuertos, de carreteras, de medianas ciudades, de seguridad y atmósfera amigable y cordial de los pobladores de los puntos del litoral quienes ya conocen el espacio y entienden el valor de “desarrollo sustentable”.

Es tiempo de recabar su historia, de organizar su documentación, de reconocer sus valores, de proteger su ambiente, de publicar los descubrimientos, de establecer las reglas, y de prepararnos para invitar a todo el mundo y compartirles todas sus maravillas.