Nueva línea de recuperación de vidrio del Ecoparc 1 de Barcelona

La planta de tratamiento mecánico y biológico de residuos municipales Ecoparc 1, de la zona Zona Franca de Barcelona , cuenta desde el mes de diciembre del pasado 2022 con una nueva línea de recuperación de vidrio. El Ecoparc

1 cuenta con una capacidad de tratamiento de 245.000 toneladas/año de residuos, recuperando anualmente más de 15.000 toneladas de residuos valorizables, y produciendo casi 30.000 toneladas de bioestabilizado y 3.000 de compost. Además, en la instalación se producen más de 7 millones de metros cúbicos de biogás,

14.000 MWh/año de electricidad y valoriza energéticamente más de 50.000 toneladas de desecho. Ahora, y gracias a esta nueva línea, se aumenta la recuperación del vidrio contenido en los residuos urbanos procedentes de la fracción resto.

El objetivo de la nueva línea de recuperación de vidrio, desarrollada por

Urbaser, es la separación de vidrio en el material de arenas de rechazo de la línea de afino. Es decir, recuperar vidrio del rechazo del material bioestabilizado, disminuyendo así el rechazo que se envía al vertedero e incrementando la recuperación de un subproducto valorizable.

La actual línea de afino de residuos urbanos del Ecoparc 1 de Barcelona comienza con un alimentador primario alimentado mediante pala cargadora. A continuación, el material entra en un tornillo sinfín de doble hélice que divide el material en dos flujos al 50%.

Cada uno de los flujos alimenta a una criba vibrante de malla elástica con corte a 25 mm. El superior a 25 mm es llevado a troje como rechazo. El inferior a 25 mm es llevado a mesa densimétrica donde el flujo se divide en:

• El ligero de la mesa, junto al hundido en el filtro de mangas y en el ciclón es llevado a troje como material bioestabilizado.

• El pesado y los finos de las mesas son unificados y conducidos a troje.

La modificación realizada es sobre este último flujo, el pesado y fino de las mesas densimétricas con granulometría <25 mm, y recuperar el vidrio contenido en la fracción.

La modificación consiste en recoger este flujo y llevarlo a una nueva criba de barras. El material rebose (material redondo) es conducido a rechazo, mientras que el hundido es conducido a una criba vibrante con el objetivo de eliminar el material <10 mm. El material hundido en la criba es considerado rechazo, mientras que el material rebose alimenta al primer separador óptico. El equipo soplará en positivo el vidrio de la fracción, que será conducido al segundo separador óptico que se encuentra justo debajo de él. En este equipo se soplarán las impurezas que se unirán al no soplado del primer equipo y se enviarán a rechazo. El material no soplado en el segundo es considerado vidrio.

Este proyecto cuenta con la tecnología más avanzada del mercado. Entre los equipos técnicos que se han empleado en la línea se encuentran: criba de barras y de finos de malla elástica Dartek, alimentadores vibrantes Dartek, separadores ópticos Picvisa y varias cintas para canalizar las distintas fracciones. Un desarrollo que ha sido puesto en marcha con la participación de los técnicos de Ecoparc y Urbaser junto con las empresas Bianna Recycling para el montaje mecánico, Picvisa para los equipos ópticos y Nibble Automation para el montaje eléctrico y de programación.

El proceso del reciclaje de vidrio tiene múltiples beneficios, tanto para el medio ambiente, como para la economía y la sociedad en general. En primer lugar, ayuda en la conservación de los recursos naturales, ya que el vidrio es un recurso no renovable y gracias a su reciclado se reduce la energía necesaria para producir vidrio nuevo. De hecho, según la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos, el reciclaje de una tonelada de vidrio ahorra aproximadamente 42 kilovatios/hora de energía.

Por otro lado, el tratamiento de este material consigue reducir la contaminación, ya que se reduce la cantidad de residuos en los vertederos y, por lo tanto, la posibilidad de dañar el ecosistema. Y, además, hace disminuir la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera al no producir vidrio nuevo a partir de materias primas.

Por último, el reciclaje de vidrio contribuye a la creación de empleo, ya que es un proceso que requiere de mano de obra, lo que genera nuevos puestos de trabajo y estimula la economía local.

Este proyecto se suma a la lista de líneas de separación de vidrio implantadas recientemente en territo- rio nacional. Un ejemplo es la planta Algímia d’Alfara en la Comunidad Valenciana, cuyas instalaciones han conseguido recuperar más de 1.000 toneladas de vidrio en menos de un año. Un proyecto destacado a nivel nacional en los procesos de recuperación de subproductos y materias primas secundarias.

Datos De La Instalaci N

• Capacidad Planta RU de Ecoparc de Barcelona

172.000 t/año. (RESTO)

• Capacidad línea de afino: 18 t/h.

• Recuperación del vidrio del 2% de la entrada de RU.

• Bioestabilizado de un 20%. •

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