REPORTAJE VISIONARIOS
Francisco L. Valverde Profesor del Dpto. de CC de la Computación de la Universidad de Málaga
“ASISTIMOS A UNA VERDADERA METAMORFOSIS DE LAS TIENDAS FÍSICAS” La revolución tecnológica y el desarrollo del comercio electrónico han dado paso a un nuevo modelo de negocio para las empresas. La explosión del sector logístico ha cambiado las reglas del juego con nuevos retos y un futuro (que ya está aquí) lleno de oportunidades. Asistimos a una verdadera metamorfosis de las tiendas físicas, que dejan de ser solo puntos de ventas, para convertirse en una mina infinita de datos (oro) que nutre el canal on line y lo convierte en inteligente. Dos mundos, el digital y el físico, que se asisten y perfeccionan mutuamente. Aunque las tiendas reduzcan en número, potenciarán el componente humano y se optimizarán como complemento a las ventas on line, porque ya no son el único medio de adquisición de productos, pero sí cubren necesidades, personalizadas y urgentes, donde el comercio electrónico no llega. Sin embargo, su principal valor estratégico vendrá del feedback de los usuarios, como fuente de información privilegiada de sus comportamientos que, interpretados gracias a la Inteligencia Artificial –clave en este proceso– permitirá segmentar a los clientes y adelantarse a sus predicciones.
Apuesta por el comercio de cercanía.
Que Amazon esté abriendo pequeños supermercados y librerías es un signo de que las tiendas de barrio aún tienen futuro. Eso sí, deberán adaptarse al consumidor no sólo analizando sus datos de navegación virtual, ahora también los de su comportamiento en el entorno físico. Arriba, uno de los puntos de recogida de Amazon Locker dentro de una pizzería.
general adjunta de IKEA España. La empresa también ha abierto puntos específicos para la recogida de compra on line. Son movimientos que dan optimismo al pequeño comercio. Al ofrecer su productos on line, no sólo se abren al mundo, también facilitan al consumidor analizar su oferta, comparar y decidir incluso antes de poner un pie en la tienda. Ese comportamiento es también uno de los retos de la logística que viene, que podrá anticiparse a los gustos de las personas y así facilitar la distribución. Los algoritmos son claves para analizar los datos que ofrecen los usuarios a través de sus búsquedas, correos electrónicos o compras por Internet. Pero habrá más: su comportamiento real será igualmente estudiado. “Las llamadas cookies, que registran la navegación sobre la web, ahora son también cookies físicas. Básicamente, el móvil que llevas en el bolsillo”, explica Jaume Betrian. Los desplazamientos registrados con Google Maps y el GPS son solo la punta del iceberg. Con todo ello se puede conseguir que, por ejemplo, si hay una serie de personas veganas que se interesan por estos productos en un barrio, un establecimiento detecte esa información e incluya un nuevo lineal de alimentación vegana. Hay demanda, así que lanza la oferta. Es lo que hace Amazon con sus supermercados y librerías: adaptarlo a su entorno más cercano. “La combinación on line/off line permite que el cliente sea más feliz porque le das lo que busca”, concluye Betrian.
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