EL LIBRO BLANCO DE SAN LA MUERTE
poder) y los pétalos de rosas (símbolo de amor), proseguiremos a decir al consultante que cierre sus ojos y piense en su pareja, en un momento. Alegre y prospero, este mensaje subconsciente está dirigido automáticamente al amuleto que luego la imagen de San La Muerte morara en dicho lugar. A su vez pasaremos al penúltimo paso en el que consiste en poner los granos de arroz (símbolo de prosperidad y abundancia) pidiendo al consultante que piense como llega la abundancia ya sea de su negocio o trabajo. Por último prepararemos la imagen talismán de San La Muerte, aconsejo dar la oración de nuestro San La Muerte antes de meterlo en la bolsita y empaparlo de su bebida predilecta. Diremos esta oración para cellar e invocar la presencia de San La Muerte en el amuleto talismán. El Señor de la Buena Muerte, llega a mí Para librarme del mal. Te ruego a ti, que fuiste El vencedor de los malos, dame fuerza y tu socorro En los días de peligro, Líbrame de los hombres malos, Y de los deseos crueles, no dejes ojos para verme Mi memoria sin sentido, Despliégate con todo tu poder en mi auxilio Dame valor constante, Hazme temible ante mis enemigos Hasta la última hora de mi muerte. Amén. Terminaremos el amuleto llevándolo a nuestro altar y diciendo a San La Muerte que este amuleto y protección será trabajado para (dar nombre de la persona) que así sea. Sentaremos a nuestro consultante frente al altar pediremos que mentalmente le pida a San La Muerte su pedido, esto tomara unos minutos en el cual no molestamos a la persona, al finalizar dará las gracias y golpeara 3 golpecitos en el altar en señal de despedida. Que quede claro que al cumplir nuestra Entidad, el consultante ofrendara a nuestra Entidad un ramo de flores y una botella de su bebida o si él quiere algo de oro. Damos las gracias a San La Muerte por trabajar ese día con nosotros y apagamos sus velas de altar, (aconsejo que por lo menos tengamos un velón blanco y negro prendido siempre en nuestro Altar siempre y cuando trabajemos muy seguido, para iluminar nuestra entidad). EL MAGO BLANCO
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