Navidad
Tradiciones Por Elsa Eugenia Anz
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La autora es miembro de la Congregación Evangélica de Río Negro y Neuquén
abemos que en Navidad –al menos así debería ser- se festeja el nacimiento de Jesucristo, y que su nombre en español Navidad, es decir, Natividad significa nacimiento. En alemán, en cambio, Weihnachten sugiere otra de sus características y significa noche consagrada. Los primeros festejos navideños de los que se tienen noticias más concretas a través de la literatura y la historia datan del año 320 d.C en adelante. En general, se llevaban a cabo en base a una conjunción de costumbres y tradiciones heredadas y a lo largo del tiempo fueron sufriendo modificaciones conforme a las influencias provenientes de diferentes países. Consistían en llevar a cabo algunos ritos –sangrientos en sus comienzos- a los que se fueron agregando juegos, bailes en ronda, representaciones bíblicas, se cantaban himnos y el pesebre era infaltable. Los juegos y bailes tenían lugar antes de la misa principal, la misa de gallo. Según atestigua la literatura de alto alemán medio, estas fiestas eran de origen pagano. Al recorrer sus páginas, remontándonos a esa época (320-353 d.C) descubrimos que ese tipo de festejos en esas “noches ungidas” que en algunos casos se las define como “noches secretas” se daban por acontecimientos especiales -como el nacimiento de un rey, por ejemplo- y se producían durante el solsticio invernal. Con el tiempo, esos momentos especiales fueron ubicados, según las memorias literarias, en el período que va desde el 24 de diciembre hasta el 6 de enero, lapso que abarcaría la fecha más aproximada en que se habrían concretado los acontecimientos antes citados. Originariamente, en Navidad no se festejaba el nacimiento de Jesucristo. Más bien la iglesia, sobre todo en Oriente, había determinado que se festeje la Epiphanía (llegada de la gracia) el 6 de enero, instaurándola como fecha del nacimiento del Señor.
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El triunfo de las festividades navideñas fue desplazando con el tiempo casi por completo las fiestas de la Epiphanía, concentrándose en el nacimiento de Jesucristo. Sin embargo, y a pesar de todas las investigaciones correspondientes, el origen puntualmente exacto de la Navidad no quedó del todo aclarado. Hay que distinguir aquí entre la pregunta acerca de la fecha del nacimiento de Jesús y la otra pregunta que se refiere a la fecha del festejo de su nacimiento en la iglesia. La pregunta acerca de su nacimiento surge en el Siglo III d.C. Al no existir una tradición respectiva, dicha fecha es deducida de la reconstrucción histórico-teológica de la salvación, de la que se desprende, como dato importante, la fecha en que se produce el equinoccio primaveral (25 de marzo), tomándola –conforme a los estudios científicos - como el primer día de la Creación. Basándose en métodos de investigación, se deduce luego que el 25 de diciembre sería efectivamente la fecha en que se produjo el nacimiento de Cristo. Si bien hubo también otro tipo de conclusiones basadas en otras metodologías, no prosperaron por carecer de relevancia científica. Se comienza a festejar la Navidad el 25 de diciembre a partir del segundo tercio del Siglo IV. Hasta ese momento, (en tiempos de Orígenes, Arnobius, Clemens de Alejandría y Epiphanius) la resistencia para con estos festejos era fuerte, ya que el hecho de recibir festivamente el nacimiento de un rey era considerado una costumbre pagana. A pesar de ello, se continuó celebrando el acontecimiento y finalmente se aceptó masivamente. El motivo por el que el obispo de Roma (Papa Julio I) decidiera entonces determinar que el 25 de diciembre la iglesia festeje el nacimiento de Jesús, fue probablemente porque el emperador Aurelio (270-275) había designado ese día para adorar al sol. El obispo decidió que, de este modo, la victoria de Cristo como verdadero sol