los argentinos se entretienen en casa solos y que nacieron entre los bips de una PC, gatearon usando tecnología. Los sociólogos definen la luego hasta llegar al teclado y no sacaron más tendencia: el consumo cultural se está perso- su ñata de la pantalla. Viven pegados a sus celulares y netbook, para nalizando. Estas actividades siguen arraigándose con fuer- ellos es su hábitat natural, los apasiona la tecza en los hogares, pero se hace cada vez más nología. Navegan sin parar, se cuelgan de Faen solitario. Navegar por internet, estar pen- cebook para contar cada movimiento que realidiente de Facebook muchas horas al día, usar zan en el día, suben sus fotos y se pavonean en el celular para jugar, son acciones realizadas la red como vedettes experimentadas. por fuera del entorno familiar, aunque se hagan El tema, en cambio, empieza a preocupar a los en el mismo hogar.Las nuevas tecnologías de padres. Los agobia que pasen tanto tiempo interactuando con máquinas la información (TIC) han en vez de estar con persoproducido un cambio ranas reales, y piensan que sus dical en cómo se utiliza el comportamientos son cada tiempo libre. vez más caóticos, no tienen Ha cambiado definitivaA los 20 años, la horarios y no cumplen con mente el paradigma del “generación tech” sus actividades escolares. Les consumo: el usuario ha aterra verlos tan dispersos. empezado a tener control, habrá pasado Según la consultora Booz a manejar su propio paquete tecnológico, a decimás de mil horas Allen, a los veinte años los chicos de la “Generación dir cuándo y cómo lo usa. jugando videoga- Tech” habrán pasado unas Alejandro Piscitelli desmil horas jugando a vicribe el nuevo panorama mes, habrá man- diez deogames, habrán mandado y en su obra Meta Cultura cuando nos dice que “los dado y recibido recibido unos 200.000 mail y sms. También usarán diez mil ciudadanos de la ciberculmás de 200.000 horas más hablando con sus tura sentimos, pensamos y actuamos en un tiempo mails y mensajes celulares. A ese paquete de horas usany un espacio irreductibles a los de la civilización de y usado más de do tecnología hay que sumarle la gran cantidad de tiempo consumo tradicional (…) mil horas en ha- que ahora le dedican a las Formamos parte de la priredes sociales, en particular, mera generación en tiemblar por celulares. Facebook y Twitter. po real”. Otro asunto que trae desconInmediatez, tiempo real, fianza para los padres es que cero espera, lo quiero ya. Internet permite el ciberaEl joven actual rompe nonimato, un elemento que el modelo de comunicalibera a algunos de sus inhición de masas, en donde biciones y timideces. Allí, se era fácilmente reconocipuede ser cualquier cosa, porble el emisor y receptor que los demás no pueden ver. de un mensaje, es decir, Los chicos necesitan consel recorrido era de uno a truir su privacidad para poder muchos en un momento hacer cosas de adultos, y en preestablecido. Ese dibujo la web la encuentran. La adocomunicacional se diluye lescencia como etapa tiene la con la aparición de la web misma esencia que hace 20 2.0, que implica un munaños, es el tiempo de la búsdo multidireccional. Aquí ya no hay unos pocos emisores, las redes so- queda de la identidad y la necesidad de rebeciales han permitido que cada uno consuma y larse frente a los límites se mantienen iguales. produzca contenidos al mismo tiempo, se los Pero ahora el camino es virtual. La tecnología es la nueva forma de independizarse, pueden llama prosumidores. En los hogares, la televisión dejó de ser el gran crearse su propio mundo online. protagonista. La PC y las netbook acaparan Pero no todo lo que reluce es oro, esa elección toda la atención, se navega a toda hora, incluso incluye un riesgo: la de caer en una dependensi en la casa hay Wi Fi pueden conectarse des- cia absorbente que lo lleve a una adicción a la de su dormitorio. Estos cambios siguen desaco- web. modando a los padres que intentan limitar las Motivaciones y uniformidad horas que pasan frente a la pantalla. Muchos especialistas estudian qué impulsa a La generación 2.0 Ya no se juega a la pelota en la calle, ni se le los adolescentes a estar tantas horas frente a la pone masilla a los autos para hacer carreras. Los pantalla. Para ello hay que comprender qué los niños de hoy son los nativos digitales, aquellos motiva y con qué se identifican. La aceptación
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