Corazón Titiritero

Page 1





CORAZÓN TITIRITERO 50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba


Agencia Córdoba Cultura. Teatro Real Corazón titiritero : 50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba . - 1a ed. - Córdoba : Teatro Real, 2012. 100 p. : il. ; 21x15 cm. ISBN 978-987-25525-1-0 1. Teatro de Títeres. 2. Homenajes. CDD 791.5

Fecha de catalogación: 10/05/2012

Copyright © 2012 | Teatro Real Diseño de tapa: Mauricio Micheloud Material fotográfico: Jorge Miguez Entrevistas y redacción: Horacio López das Eiras Diagramación: Bárbara Couto | Artilugio comunicación & Diseño Producción: Olga Albelo Primera edición: Junio de 2012 Está prohibida la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier método: fotográfico, fotocopia, mecánico, reprográfico, óptico, magnético o electrónico, sin la autorización expresa y por escrito del propietario del copyright. IMPRESO EN LA ARGENTINA - PRINTED IN ARGENTINA Todos los derechos reservados - Queda hecho el depósito que prevé la ley 11.723 ISBN 978-987-25525-1-0 Datos de contacto: Teatro Real, San Jerónimo 66, Tel. Fax 54 351 4331670/71 vamosalteatroreal@gmail.com


El Teatro Real, con más de ochenta años de historia y trayectoria, ubicado en el centro de la ciudad de Córdoba, nos brinda un espacio que posibilita la expresión de los diversos cuerpos artísticos, entre ellos el Elenco del Teatro Estable de Títeres. Las propuestas han ido variando, y desde el clásico títere de guante, se ha transitado por el títere de varilla, marionetas, objetos animados, y un sin fin de creaciones que convocan en cada función a grandes y chicos. “El títere nació”, nos dice el titiritero argentino Javier Villafañe, “cuando el hombre, el primer hombre, bajó la cabeza por primera vez, en el deslumbramiento del primer amanecer y vio a su sombra proyectarse en el suelo, cuando los ríos y las tierras no tenían nombre todavía. Y el día que modeló el primer muñeco tuvo que pensar en su sombra. Lo hizo a su semejanza, y nació el títere, sin vida propia, como la sombra del hombre, que necesita de él para moverse y vivir”. ¡Gracias a todos los que han hecho posible realizar este cálido homenaje!


Prólogo

El Teatro Real del Gobierno de la Provincia de Córdoba cumple un viejo anhelo: editar un libro de los 50 años del Teatro Estable de Títeres (TET). Medio siglo celebrado allá por Diciembre de 2010, y que sale a luz en Otoño de 2012. Este libro prolonga aquel festejo. Y coincidimos en llamarle “Corazón titiritero”, al resumir la pasión de hombres y mujeres que sustentaron cinco decenios la Vida del TET. Cinco son los dedos de una mano. La mano que manipula a los muñecos-personajes y que no cesó de articular dedos, corazón y cerebro. Porque solo un corazón perseverante atraviesa los muros del tiempo. Porque solo un corazón navegador, mantiene su rumbo firme. Hace mucho tiempo, así lo concibieron dos jóvenes hermanos, montando un teatro para títeres. Títeres. Mágico sustantivo que nos inspira el corazón de los pequeños. Titiriteros. Noble oficio que nos remonta en el tiempo. “Los títeres –escribe Javier Villafañe- vienen de muy lejos. Es perderse en el misterio pretender buscar su origen. Nacieron con la imaginación, y pertenecen a todos los tiempos y a todos los lugares de la Tierra”. También así lo entendieron antiguas autoridades culturales, que proyectaron un mundo propio para la vida del títere. De esta manera, junto al teatro, decidieron la construcción de una casa taller-escuela, llevando fantasía y 6


sensibilidad desde el Parque Sarmiento. Así nació esta historia. Y a una buena parte de ella, la cuenta Jorge Míguez, quien junto a su hermano Ricardo, con Nelly Canepari y Beatriz Georgis, dieron los pasos fundantes. El tiempo fue pasando. Llegaron y salieron nuevos actores y actrices. Nuevas obras y cambios diversos. Hubo mudanzas, traslados y soplaron fuertes vientos. Aún así, los títeres siguieron su rumbo. Se escribieron nuevas historias, ¡Muchas!. Ensayo sobre ensayo, función sobre función, el corazón titiritero no apagó nunca su luz.

Raúl Sansica Director Teatro Real

Prólogo

7



Primera parte Entrevista con Jorge Míguez sobre la historia del Teatro Estable de Títeres de la Provincia

Ciudad de Córdoba, invierno de 2011. De mesa a mesa, en un bar con buen aroma a café, dos personas inician una conversación espontánea. A uno de ellos, quien aparenta ser el de mayor edad, le llama la atención que el ocasional vecino, lea con detenimiento las ajadas páginas de un amarillento diario. -Permítame estimado, ¿Se puede saber que lee con tanta atención? -Je, me estoy actualizando de antigüedades noticiosas. Leo acontecimientos ocurridos en el año 1960. Me interesa saber que ocurrió en el transcurso del año en que asomé a la vida. -Mire usted. Yo ya estaba crecidito, tenía casi 25 años. Dígame qué cosas importantes ocurrieron a ver si las recuerdo. -Son muchas, infinidad de hechos. Pero le puedo decir las que mas me interesan, como la creación de la pastilla anticonceptiva, la de la vacuna Sabin oral y del Rayo Láser. ¿Qué me dice? ¡Pavadas de descubrimientos que modificaron las Ciencias y la Salud Pública! ¿No? -La verdad que sí, yo ni las tenía presente. ¿Y qué otras cosas aparecen en su diario del siglo pasado? -Bueno, en política destaca los sucesivos planteos militares. Las constantes intervenciones federales y la célebre Resistencia PeroPrimera Parte

9


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

nista. Córdoba no estaba nada ajena a estos acontecimientos y textualmente el diario decía: “Los militares acusan al gobernador Zanichelli de proteger al activismo peronista”. En otros párrafos se consigna que según el Quinto Censo Poblacional, éramos 20,5 millones de argentinos, casi la mitad de lo que somos hoy. La población mundial llegaba a los 3.000 millones de personas. Como hecho simpático, menciona el suceso televisivo del actor Pepe Biondi, con su famoso ¡Patapúfete! ¿Lo recuerda? -Y dígame señor, ¿Informa respecto a la creación del Teatro Estable de Títeres que se produjo justamente ese año en nuestra ciudad? -A ver… a ver… ¡Si! Acá dice algo, se lo leo: “Con asistencia de autoridades y numeroso público ha iniciado su labor en nuestro medio el primer Teatro Estable de Títeres de Córdoba. Se presentó el entremés de Alejandro Casona “El Mancebo que se casó con mujer brava”. -¿Vio? Usted me estaba hablando de hechos sobresalientes y omitía ese acontecimiento singular. -Je, sí… la verdad es que no me había percatado, quizás porque en el diario no apareció a grandes titulares. -Porque es posible que entonces no se haya tenido la verdadera dimensión de su significado. Léame algo más por favor. -Si señor: “Se ha recogido del público concurrente a través de las expresiones vertidas al final de la representación y del caluroso aplauso que brindó a tan encomiable labor, la favorable impresión con que se ha recibido el esfuerzo de montar este Teatro Estable de Títeres”. -Interesante, eh. Y dígame, ¿Usted conoce algo más de esa historia de los títeres? 10


Corazón titiritero

-Y algo… bastante le diría. El Teatro Estable de Títeres (TET) tiene 50 años de Vida, de los cuales tuve el honor de permanecer treinta y seis y ser además uno de sus fundadores. Por esta razón, me interesa que la historia se divulgue y se conozca. -¡No me diga! Usted ha sido un protagonista de aquellos años. Si le parece bien y dispone de tiempo, podríamos armar esta historia. La curiosidad mueve montañas y siento avidez por husmear en aquel universo de magia y fantasía. -¿Ah si? ¿Y que piensa hacer con el relato? Le anticipo que son muchos años de lucha y pasión titiritera. -Se me ocurre de repente que podríamos plasmarlo en un libro. ¿Qué le parece? Medio siglo de actuaciones pueden caber adentro. Alguien dijo que “la lectura de un buen libro, es un diálogo incesante en el cuál el libro habla y el alma contesta”. Eso le propongo. -¡Me entusiasmó! ¿Qué debo hacer? -Memoria, mi estimado, memoria. Que recuerde acontecimientos, anécdotas y conceptos con la precisión de un relojero. Y si dispone de cosas archivadas, mejor. -Mire, tengo cajas con fotografías, recortes de diario, afiches. Solo tengo que meterme a revolver en el “barullo” de mi taller en casa. -Hágalo y destrabe las compuertas de los recuerdos. -¡Listo! ¿Y cuando empezamos? -Ya estamos despegando. ¿O no se dio cuenta? ¿Como prefiere que lo llame? Primera Parte

11


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

-Titiritero, sencillamente. -¿Le parece que le diga señor “Tit”? -Bueno. Es una abreviatura acertada. -Y usted puede decirme cronista, simplemente. ¿Puede ser? -Si, amigo cronista. -De acuerdo señor “Tit”. Dejemos ahora que los duendes titiriteros nos cuenten sus peripecias a través de 50 años del Teatro Estable de la Provincia. ***

Ricardo Míguez, primer director del Elenco del Teatro Estable de Títeres (1960).

12


Jorge MĂ­guez, uno de los fundadores del cuerpo artĂ­stico (TET).


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Debut. El TET inicia su actividad el 4 de diciembre de 1960 en casa propia del Parque Sarmiento.

-Señor Tit, viajemos al día en que rompieron cascarón. Según el diario, era 4 de diciembre de 1960. (Con razón no me enteré, nací dos días después…). -Así es. Era domingo. Apacible, soleado y caluroso, a alrededor de las 5 de la tarde en el Parque Sarmiento. Quizás peco de arrogante por lo que voy a decirle, pero el surgimiento del Teatro Estable de Títeres y Taller – Escuela, fue “un antes y un después” en la historia de la cultura cordobesa. -Así de claro y rotundo. -Y le explico el porqué. Ese día hubo un doble estreno: Casa nueva y obra nueva. Los títeres y titiriteros empezamos a ser parte de las políticas culturales del Estado Provincial. 14


Corazón titiritero

-Suena muy de “avanzada” que el Estado Provincial haya decidido construirle una casa propia a los títeres… -Realmente fue así. Le aseguro que fue un momento de gloria. Hasta proyectábamos que en un futuro allí funcionaría el “Primer Coliseo de los Títeres de la Argentina y Sur América”. Para que tenga una idea de cómo vivíamos aquel acontecimiento. -¿Y a que se debía tanto entusiasmo optimista? -Imagine usted amigo cronista, lo que iba a significar ese lugar para nuestro género teatral titiritero. Allí íbamos a concentrar todos los trabajos de investigación y de búsquedas de nuevos sistemas, en pos de enriquecer los recursos de nuestra profesión. -Realmente, verdaderos idealistas y emprendedores. ¿A las autoridades de Cultura las recuerda? - Claro, el Director era Gaspar Pío del Corro y Alberto Díaz Bagú era el Sub Director. Por ahí tengo fotografías de ambos presenciando al estreno con sus pequeños hijos. A nivel de Gobierno no recuerdo muy bien si había una Intervención Federal o gobernaba Don Arturo Zanichelli. -Ya se lo confirmo señor Tit, permítame que lo consulte en Wikipedia: “Afectado en su salud, (Don Arturo Zanichelli) presentó la renuncia el 27 de abril de 1960, tras una controversia con el gobierno del presidente Frondizi quien dispuso la intervención de la provincia poco después”. Es decir, que como Interventor Federal estaba…a ver,… acá está, Juan Francisco de Larrechea. En aquellos tiempos usted debe haber sido un muchachito. -¡No tan muchachito, ya tenía 24 años! Y antes de que lo pregunte, le nombro al elenco completo: Las dos mujeres eran Nelly Canepari y Beatriz Georgis. Los dos varones éramos mi hermano Ricardo y yo, Jorge Míguez. -Su hermano llevaba la batuta. -Era el director, sí. Sobre todo, él supo ‘contagiarme’ de su Primera Parte

15


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

amor por los títeres. Y hay algo que se me está escapando. A mis 12 años, yo había creado un títere llamado el “Changuito Piquillín”, con quien hicimos una serie de funciones en el teatrino del zoológico que se llamaba “Romano”. Bueno, me fui un poquito atrás en el tiempo, amigo cronista. -Regresemos entonces, ¿Dónde me dijo que funcionaba el Teatro Estable y el Taller- Escuela? -En la avenida de los Carolinos en pleno parque Sarmiento, la que es la actual avenida “el Dante”. Se le decía Los Carolinos por la abundancia de esos árboles que había allí. La edificación de aquel viejo teatrino todavía está y puede verse entre el embarcadero de los botes y la leona. Allí estuvimos casi veinte años. -Dígame señor Tit. Cómo era aquel lugar, transpórteme a su magia. -Lo llevo gustosamente, usted quiere que le hable de la ambientación escénica. El predio estaba al aire libre y el público se sentaba en banquitos de madera. Había una capacidad como para 250 personas. Los actuantes y títeres estábamos bajo techo. El escenario era muy artesanal y con detalles novedosos.

Arriba: La imauguración del Elenco en el periódico La Voz del Interior. Abajo: Gaspar Pío del Corro y Alberto Díaz Bagú, autoridades culturales en la primera actuación.

16

-Ya estoy sentado frente a él. -Je, bueno. Figúrese un escenario frontal, o panel pintado de gris plomo y cortinas rojas, de tela piqué. -Imagino también algún firulete en los bordes, una fantasía. -¡No! Justamente era una superficie lisa por-


Corazón titiritero

que como actuábamos a la luz del día, considerábamos que cualquier decoración externa podría distraer la atención del público. ¿Me explico? -Claramente. Cuénteme más del panel, del detrás de escena. -Bien. Le habíamos hecho tres carros desplazables o telar de maniobras para alojar escenografías. Esto nos permitía realizar cambios simultáneos a través de un sistema de carriles aéreos o colgantes. -¡Qué ingeniosos! ¿Y porque dice “habíamos”? -Porque nosotros hacíamos toda la carpintería en nuestro taller. Hacíamos los muñecos, el escenario, en fin, lo inherente a la producción completa. Le cuento además que el escenario estaba diseñado especialmente para el ‘títere de guante’, es decir, el muñeco que depende exclusivamente del pulso de su manipulador, que es el titiritero que se expresa con la figura en sus manos. -¿Y en el sonido cómo andaban? -Bastante bien… ¡Pero no piense en micrófonos inalámbricos, eh! Usábamos tres micrófonos convencionales colocados debajo del proscenio, del lado de adentro. Con dos bafles, o parlantes exteriores que se colgaban en la pared. También había luces… ¡Y de fabricación casera! Teníamos tres o cuatro tarros de lamparitas de luz blanca comunes, hechas con tazas y fondo de budineras de aluminio. ***

Nelly Canepari, Beatriz Georgis y Jorge Míguez, en plena labor del taller.

Primera Parte

17


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Arriba: Escenas de “El Camaleón” de Antón Chejóv, año 1960-1961). Abajo: El taller.

18


Corazón titiritero

Ensayo de la primera obra: “El mancebo que casó con mujer brava”, de Alejandro Casona.

Primera Parte

19


¡Cuánto público concurría los domingos!



50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Afiche de reposición de “El mancebo que casó con mujer brava” de Alejandro Casona (Año 1980).

22


Corazón titiritero

La primera obra mostraba las duras costumbres domésticas de la España medieval

-Señor Tit… La verdad es que me está entusiasmando su historia. ¿Cómo fue aquella primera escena? -¡Pero amigo cronista si ni si quiera le dije el nombre de la obra…! -¡Ah cierto! Empecemos por ahí entonces. -Antes debo decir que lo charlamos mucho hasta que acordamos la obra a estrenar. Queríamos algo que llegue al niño y que a su vez interesara a los adultos que los acompañaban. -¿Entonces? -Entonces elegimos un entremés cuyo autor es un ilustre escritor español del siglo pasado llamado Alejandro Casona. Y la obra se titulaba “El mancebo que se casó con una mujer brava”. Esta obra se iniciaba con un presentador de nombre Patronio, que hacía entrar en clima al público y cuyas palabras de presentación eran estas: “¡Ahora escuchad, señores!, si os queréis divertir con un antiguo cuento. Y sabed que soy Patronio, criado y consejero del muy ilustre Conde Lucanor, el cual ha por costumbre consultarme en cuantas dudas le acaecen. Y es la duda esta vez que a un su criado le tratan casamiento con una moza muy más rica que él y de más alto linaje; y siendo así que el casamiento es bueno no se atreve a llevarlo adelante por un recelo que tiene. Y es el recelo, que la tal moza es la más

Primera Parte

23


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba fuerte y la más brava cosa que hay en el mundo, y tan áspera de genio que, a buen seguro, no habrá marido que con ella pueda. Por eso yo, Patronio, consejero fiel, quiero sacar hoy al teatro este cuento que viene aquí como de molde, para que a vosotros y a mi amo sirva de ejemplo. Y es La historia del mancebo que se casó con una mujer brava”.

-Imagino que usted era Patronio. -Imagina bien. Me encantaba hacer ese tipo de presentación poética. Y también hacía del mancebo. Mi hermano Ricardo encarnaba al padre de la familia y Beatriz Georgi a la niña brava. Su madre era interpretada por Nelly Canepari. Le cuento además que Ricardo poseía una llamativa destreza para remedar el sonido de los animales, especialmente al burro y al gallo. -Me pareció escucharle decir que esa obra era un entremés… -Si, antiguamente el entremés cumplía la misión de relajar al público entre obra y obra. Y respecto al debut, debo decir que salió muy bien y que tuvo muy buena aceptación. Coincidíamos en el grupo en que estuvo bien elegida. Porque era una obra concebida para el teatro clásico y logramos “transferirla” al género de los títeres. -Digamos que fue una apuesta fuerte. -No tenga dudas, y ese era nuestro mayor desvelo previo. Porque habíamos resuelto presentar una sola función de 45 minutos. Generalmente una función se componía con dos o tres temas breves. -Resumidamente, ¿Que sociedad reflejaba la obra del mancebo? -La de la España medieval, de alrededor del 1335. El mancebo era un muchacho de condición muy humilde pero de fuertes convicciones. El hecho de jugarse ante una manifestación conflictiva conlleva un alto valor humano. 24


Corazón titiritero

Escena de la obra “El Camaleón”.

-¿Qué otra obra rescata de aquellos inicios? -También decidimos escoger un cuento del escritor ruso Anton Chéjov -“El Camaleón”- de 1884. Su contenido era el efecto de la obsecuencia no solo de abajo hacia arriba –sumisión, miedo, cobardía- sino también de arriba hacia abajo. -Qué tema para los niños. Nunca de un osito mimoso y el chanchito picarón, ¿eh? -¡Já! La única situación que se presentaba en el cuento, nos dio pie para recrearlo con acciones y juegos que atrapaban a los chicos. Le reitero que nuestra preocupación central, siempre era elegir temas que brindaran un mensaje al adulto y al joven y que al mismo tiempo interesara al niño. -Ahora le estoy viendo la punta al ovillo. -Bien, déjeme que redondee la idea: Teníamos la convicción de que al niño de la tercera infancia -12, 13 y 14 años- se le inculcara valores y que no se cayera en falsedades, mentiras e hipocresía de los adultos con intereses de poder. Primera Parte

25


Objetivo del Taller Escuela: que los niños adquiriesen sensibilidad artística y estética.


Corazón titiritero

"El Taller-Escuela tenía como fin despertar la sensibilidad artística y estética en los chicos"

-Que le parece si damos vuelta la página y me cuenta sobre el Taller - Escuela. -Bien, eso fue otra cosa muy buena. Estaba dirigido a niños y niñas de hasta 14 años de edad y concurrieron a la inscripción padres interesados en que sus hijos adquirieran la sensibilidad de una actividad artística y estética. Así lo habíamos consignado en nuestra gacetilla de difusión. -¿A qué nivel sociocultural pertenecían los alumnos concurrentes? -La mayoría provenían de familias conformadas convencionalmente, de clase media para arriba. Sólo un adolescente se presentó sin acompañante adulto. “Me llamo Salvador dijo-, tengo 14 años y vivo aquí cerca en la Bajada Pucará”. -¿Y ustedes que decidieron hacer con el pibe? -Le dijimos que era necesario presentarse con una persona adulta para la inscripción. Pero él, después de asentir con un gesto de cabeza continuó diciendo: “Me gustan los títeres y quisiera saber como se hacen, como se pintan, dibujar esas casitas…” -¿De que casitas hablás?, le preguntó mi hermano Ricardo. -Esas, de donde salen los títeres, respondió el niño. Primera Parte

27


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

-Esas casitas se llaman escenografías, agregó mi hermano. -¡Esas mismas! - se entusiasmó el chico- y a la vez preguntó ¿Puedo venir? -Un compromiso para ustedes. -Si, pero desde ese momento comenzó a concurrir a clase con puntualidad y mucho esmero. Salvador era de una personalidad muy simpática. “En el barrio me dicen “Sonrisal”, nos contaba. Y si bien a lo largo de su participación en el taller, no se destacó por sus habilidades, era notorio que en el Taller - Escuela el accedía a un mundo diferente de su cotidiano entorno social. -¿Qué piensa que el muchacho encontraba allí? -Que los títeres le llenaban su espíritu de un encanto que jamás había imaginado, y que de algún modo, lo ponía a salvo del mundo delictivo en el que podía caer. Hoy puedo decir con propiedad que Salvador fue parte de la historia de aquel Taller - Escuela. -Una historia muy sencilla y bonita. ¿Cómo respondía el resto de los alumnos? -Por lo general, estaban bien dispuestos a las tareas creativas que le proponíamos. Estas solían iniciarse con lectura de un tema para luego pasar a un proceso que iba de la teoría hacia la práctica. Siempre el titiritero en calidad de guía, sin llegar a conducir, pero permitiendo las tendencias naturales y estimulando las distintas personalidades de los pequeños. -¿Qué se hacía con el material producido por los alumnos? -Hacíamos exposiciones. Como pintura en papel con los personajes de obras y cuentos tratados en lectura; se hacía modelado de rostros en semi relieve con arcilla y pasta papel maché; y modelado sobre mates o calabazas junto a elementales rasgos fisonómicos de distintos personajes. A lo largo de los tres primeros años del Taller- Escuela, siempre fueron 28


Corazón titiritero

El trabajo creativo de los niños se exponía al final de cada año.

Primera Parte

29


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Exposición de trabajos del Taller-Escuela en su tercer año de vida.

30


Corazón titiritero

invitadas a esas exposiciones las autoridades culturales, padres de alumnos e invitados especiales. -¿Para que otra cosa servían esos encuentros? -Los convertíamos en una suerte de “asamblea general” en la cual proponíamos a los concurrentes, considerar y poner a juicio de todos, los logros y evolución del aprendizaje por parte de los niños y de nuestros métodos de trabajo. Esto nos hacía suponer que con la experiencia realizada en los tres primeros años, podíamos planificar y aplicar mejoramientos al siguiente año, ya que sería el cuarto período de existencia. -¿Qué pasaba mientras tanto con las funciones en Domingo? -¡Continuaban! Con obras, además del Mancebo y El Camaleón, como “Odisea de un Brahmán”; “El Tigre, el Zorro y el Labrador”; “La Flauta Mágica”; “El Changuito Piquillín” (¿Se acuerda que ya se la nombré a esta obrita?);”Romance del navegante”; “Quien es el rey”; “La calle de los fantasmas” y alguna otra que fugó de mi memoria… -Podemos decir que con el Taller - Escuela de Títeres y las funciones de la cartelera dominical permanente, el proyecto marchaba viento en popa. -Si, en forma paralela y con buena respuesta de público, lo que nos hacía ser optimistas. -Claro, iba tomando forma el sueño del Coliseo. -Exacto, pero hubo palos en la rueda. ¡Mas que palos! Nuestro destino venía alzado en brazos de los vaivenes y cambios de Gobierno. Le cuento. -Cuénteme, no todo suele ser siempre color de rosa. -A mi hermano lo citaron para una entrevista con el flamante Director de Cultura (Fernández Ordóñez) y de allá vino con la cara larga…este señor recién asumido le dijo que por disposiciones “de arriba”, quedaba sin efecto toda actividad Primera Parte

31


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

inherente a la escuela y organismos formativos comprometidos dentro del área Cultura. -Lo que en boxeo se dice un golpe de knock out. -Así es amigo cronista. De un plumazo dejó de existir el Taller – Escuela. Podíamos decirlo así: “Cerrado definitivamente por cambio de firma”. -¿Y ustedes que hicieron, que dijeron, que sintieron? -Hacer, nada; decir, menos; sentir…bueno imagine usted nuestra tristeza. Pero dimos prioridad al paradigma que dice “tantas veces te caes”, “tantas veces te levantas”… -“Tantas veces te mataron, tantas resucitarás…” Como la Cigarra, canción de la entrañable obra de María Elena Walsh… -Una gran verdad dice esa canción. Fíjese como son las cosas: a los pocos días nos enteramos que esas mismas flamantes autoridades habían dispuesto que el Teatro de Títeres pasaría a ser un cuerpo artístico más, dependiente de la Dirección de Cultura de la Provincia y que para pasar a formar su elenco estable, como era norma general, se llamaría a concurso para dos integrantes. -No hay mal que por bien no venga, decían las abuelas. -Seguro. Con mi hermano nos miramos y en nuestros oídos empezaron a sonar clarines y trompetas, como cuando celebran sus bodas la reina y el rey. Y nos pusimos en carrera de concurso. Nelli, la otra actriz integrante, prefirió no hacerlo. Finalmente, nos presentamos con mucha fe en que el triunfo sería nuestro. -A su juego los llamaron. ¿Cómo se prepararon, que planificaron presentar? -Bueno, sabíamos que el concurso se realizaría por “antecedentes y oposición”, lo cual pasó a ser nuestra preocupación mayor. Y teníamos esta incógnita: ¿Se trabajaría frente a pú32


Corazón titiritero

blico infantil o solo estarían los miembros del jurado? Por las dudas ideamos el plan “a”, con dos obritas infantiles en caso de que fuera con asistencia de niños y el plan “b”, en caso de que la presentación fuera ante adultos. Al final, al confirmarse que rendiríamos frente a jurado adulto, presentamos la obra “El Fausto”, de Goethe, en versión para títeres, por Javier Villafañe. -¿Donde se hizo el concurso y cuántos grupos decidieron presentarse? -Bueno, el concursó se hizo en el foillet del Teatro Rivera Indarte, como antes se llamaba el San Martín actual y fuimos tres los grupos concursantes. Al final, recuerdo que una señora miembro del jurado tenía la intriga de porqué nos habíamos presentado con una obra para adultos. La respuesta fue que para evaluar con justeza un espectáculo para niños, debía realizarse frente a un público menudo; pero al ser los miembros del jurado personas mayores, decidimos rendir con un tema para adultos. -¿Y? no me haga esperar tanto, ¿Quién se quedó con el concurso? -¡Nosotros! A los pocos días recibimos la notificación por correo que habíamos resultado los ganadores. Esto marcó el fin de una etapa y el principio de otra: La del Teatro Estable de Títeres, que permanece hasta hoy.

Obra “El Fausto” de Goethe en versión para títeres de Javier Villafañe.

***

Primera Parte

33


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Augusto Criado, Olga Romero y Jorge Míguez con la figura del “Payasito travieso”.

Se cierran las puertas del Taller y se abren las del Teatro Estable. -Para ubicarnos, señor Tit. Estamos en el año 1964. Usted me dice que se iniciaba una nueva etapa en el Teatro Estable de Títeres. ¿La casa del Parque Sarmiento seguía siendo su sede? -Sí, solo que nos parecía mucho más grande, porque el espacio donde funcionaba el Taller de Títeres había quedado vacío. Es decir, conservábamos el lugar y teníamos la llave. -Entonces volver ahí fue un triunfo dentro de la adversidad de haber cerrado el Taller. -Así es, estábamos heridos pero no vencidos. Ganar el concurso fue una victoria de una batalla más. Ahora debíamos ponernos manos a la obra. Y con mi hermano nos abocamos a organizar los programas del “Equipo Móvil”. Fue nuestro objetivo principal. Teníamos varios asuntos al mismo tiempo: 34


Corazón titiritero

disponer de temas adecuados a diferentes edades del niño; elegir obras; realizar figuras de personajes… También la confección de elementos escenográficos procurando que fueran transportables y que no difiriesen del concepto sintético del género teatral de los títeres. -¿Qué significa “concepto sintético”? -Me refiero a elementos transportables. El concepto se extiende hacia los valores literarios. Fíjese que algunas de las características que mejor identifica a nuestro género titiritesco es, precisamente, la síntesis. -Ahondemos un poco más. - Con todo gusto: la síntesis en los textos; la síntesis en la expresión facial y corporal de las figuras; la síntesis del espacio y el tiempo en donde estos actores irreales se mueven y se proyectan y obtienen credibilidad de vida propia, mediante el poder de subjetividad que la magia de su género los ha dotado. -¡Caramba! Empezamos a hilar fino, de la síntesis al poder de subjetividad… -Así es. Me explayo un poco más sobre este tema. Grábeselo: Síntesis y poder de subjetividad son dos virtudes que el género teatral de los títeres ostenta con verdadera propiedad. Y subrayo: la síntesis es una característica que identifica al títere con genuina naturalidad…Mire, sabrá usted por lo general que los titiriteros realizamos nuestros muñecos o figuras animadas… -Si algo pesqué de lo que me ha dicho, es así. -Bueno, y una vez analizado el texto que hemos adaptado y establecido las pautas psicológicas de los personajes en la obra, partiremos desde la concepción de que uno de ellos se mantiene “irascible” a lo largo de la trama. -Sí, fruncido el ceño. -Bien, cuando llega el momento de modelar el rostro, ¿Qué Primera Parte

35


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

La síntesis en la expresión facial de el mancebo, la niña brava y su madre.

36


Corazón titiritero

expresión cree usted que hay que imprimirle a sus facciones? -La que acabo de decirle, señor Tit. -Sí amigo cronista, correspondería una cara enojada. Pero mi intención es significar con esto que ese personaje lleva una sola expresión implícita y no habrá de cambiarla durante la obra. (Como sí puede hacerlo un actor de teatro humano). De allí surge y se impone una condición al texto. Sintetizar la sucesión de estados de ánimo, para que esa gama de sentimientos se circunscriban en torno al congruente del término “irascible”. -¿Entonces el recorrido sería, del texto al modelado y luego del modelado al texto? -Je, el huevo o la gallina… y todos los caminos tienen que ver con los tres centros de fuerza con que contamos los seres humanos… -El nudo es cómo se traslada eso a los títeres. -Tal cual. Cómo trasladamos nuestra humanidad a ellos. ¿Me sigue? Cuando priorizamos nuestro poder de razonamiento, todo se encamina hacia un orden esperado. Pero cuando irrumpe una corazonada, ¿Me entiende? Cuando el corazón hace punta de lanza y damos prioridad a lo mas hondo de nuestro sentimiento, unido a la energía que nos provee la libido… -¿Qué sucede en tal caso? -Nuestra mente se trastoca y se impone el orden. ¿De quién? ¡Nada menos que del corazón! Entonces ahí quizás comencemos confeccionando primeros los títeres y damos el segundo paso a los ensayos, sin contar con textos escritos y fijando los diálogos a medida que se improvisan las escenas. -La “dinámica de lo impensado”, diría el gran maestro y periodista Dante Panzeri, en referencia al juego del fútbol. -¿Y acaso el arte no es fruto de lo espontáneo? No una, sino Primera Parte

37


El titiritero, la figura y el niĂąo. Un trĂ­ptico de ternura.


Corazón titiritero

muchas veces lo hicimos de ese modo, y créame que todos los caminos son válidos. Mientras sean auténticos, son válidos. Quienes debemos ser auténticos somos los artistas titiriteros, que nos proyectamos a través de este medio de expresión tan puro. ***

“Nuestra energía viaja por el brazo y las manos hasta darle vida al títere”.

-Aún así, creí entender que el personaje o títere creado ya expresa algo. Lleva implícito en su rostro una expresión. -Sí, pero no se halla del todo listo con sólo tener la apariencia fijada en su fisonomía. Si el titiritero no lo siente, si no extrae lo más profundo de su interioridad, y hace viajar su energía, junto a una fracción de su espíritu, por medio de su brazo, de su mano y dedos, hasta llegar a la figura que pretende darle “credibilidad de vida”, por mejor acabado estético que ostente, insisto… es una obra inconclusa. Solo cuando la energía y emotividad llegan al destino esperado, y se instalan en el personaje, podremos considerar que está lista. -¡Que interesante lo referido al viaje por el brazo, la mano y los dedos del titiritero! -Así es. Se trata de un viaje y le amplío la idea: Emana de la profundidad y aflora a la superficie en la imagen del personaje. De este modo, se cumple con el objetivo de su apariencia modelada y pintada previamente. Primera Parte

39


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

-¿Puede darle un ejemplo a los amigos lectores? -Sí, se puede dar el caso de un personaje que según el texto debe expresar la ira (¿se acuerda?) y su “médium”, el titiritero-manipulador no participa con autenticidad, y en vez de ira, apenas expresa una irritación mínima. Usted me mira extrañado porque debe estar pensando qué sucede si se trata alguna marioneta colgada de hilos. En este caso, nuestra energía viaja igual, incluso por medio de hilos, de alambre o varilla de madera. Grábeselo: viaja, siempre viaja y no se interrumpe jamás. -¿Jamás? -Jamás. Los títeres perciben el alimento proveniente de su “progenitor”, el titiritero, igualmente por medio de cualquier material o artificio y entiéndame bien: a título de “cordón umbilical”. Si esa logística se detiene, o no llega, entonces el personaje no logra su cometido es decir, no basta contar con la figura realizada.

Ejecutivo y secretaria de la obra “Perezcantropus”.

40


Corazón titiritero

-¿Esa logística o alimento el público la nota? -Es esencial para la intencionalidad, sobretodo de los movimientos de locomoción de la figura. Y los movimientos y desplazamientos son muy sensibles a la audiencia. ***

“En la ‘Odisea del Brahmán’ abordábamos el trato depredador sobre la Naturaleza”.

-Señor Tit, por un rato dejemos este aspecto esencial del mundo de los títeres y nos refiramos a alguna obra que conformaba el repertorio del equipo móvil del Teatro. -Con todo gusto. Me viene espontáneamente a la memoria “Odisea de un Brahmán”, un cuento anónimo hindú que enviaba un mensaje referido al trato depredador que le damos a los elementos de la Naturaleza y a los vínculos siempre conflictivos entre ella y los hombres. -¿Cómo estaba presentada la obra centralmente? - En texto original era un relato de una persona adulta hacia un niño, pero en nuestra visión no. Sin fijar los diálogos, sólo habíamos leído el cuento y comenzamos ordenadamente a improvisar las escenas con los personajes. Por otra parte, a la transferencia del género llevada a la versión escénica, la hicimos entre mi hermano Ricardo y yo.

El Brahamán de la obra “Odisea de un Brahmán”

Primera Parte

41


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

-Cuénteme algo de la trama de la “Odisea”. -Todo empezaba con un brahmán que se paseaba predicando por la selva. Un día encontró a un tigre enjaulado suplicándole que lo liberara, bajo juramento de que, una vez en libertad, no iba a atacarlo. El brahmán accedió, pero el tigre lejos estuvo de cumplir su palabra. A partir de allí, el felino inició una fuerte persecución y al brahmán no le alcanzaban sus largas piernas para huir. Se armó entonces una suerte de juicio popular con la presencia y opinión de una palmera (“Palmira”), un cocodrilo (“Coco”), y el chacal, quienes expresaban sus puntos de vista referidos a la compleja situación planteada. -Viene a mi memoria la canción “El Oso” o “Carta de un León a otro”. ¿Y de la confección de los personajes que puede decirme? -Bueno, al brahmán lo habíamos concebido muy espigado, exageradamente alto, cosa de que transmitiera una fuerte autoridad espiritual. Hasta un turbante lucía… Queríamos, pues, que su presencia, como le dije, irradiara fuerte espiritualidad. Entonces confeccionamos el llamado “títere de pértiga”, o de vara larga, cuya altura era de 0,60 cm de alto con un solo comando central. Este asomaba por debajo de su túnica y sus largos brazos se movían graciosamente al caminar o correr.

Palmira la palmera y Coco, de la obra “Odisea de un Brahmán”.

42

-¿Y los animales como estaban concebidos? -Bueno, el tigre se movía alternando continuamente las patas delanteras y traseras. El cocodrilo era un “títere de boca” que permanecía


Corazón titiritero

al ras del piso. A Palmira la hicimos como una palmera con cara de mujer, a la altura de su follaje, sostenida en un soporte de alambre rígido. Mas abajo, su cuerpo, era la continuidad del tronco, de goma espuma, pegada a una esfera que representaba las caderas cubiertas por cordones de yute, al estilo de pollera hawaiana. Este personaje tenía su comando en la zona baja, y al darle movimiento giratorio, sugería compases de bailarina. Y el chacal, directamente era un títere de guante. ***

Primera Parte

43


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Diálogo entre Don Din y Ricardo Miguez

“Don Din fue un títere único. Era mitad hombre, mitad títere”.

-Señor TIt, en nuestras charlas (“fuera de papel y birome”) le escuché mencionar a Don Din, un títere muy simbólico y entrañable para usted. -¡Si señor! Don Din no fue un títere más. Fue único ¿Y sabe? Surgió de nuestra propia necesidad de investigar y encontrar nuevos recursos para el género titiritesco. Recursos que rompieran con los moldes ya conocidos y clásicos y que contribuyeran al enriquecimiento visual de los títeres. -Sin embargo, en la obra del brahmán desfilaron distintos tipos. -Si, pero supeditados siempre a asomarse sobre el retablo tradicional de títeres de guante. Con “Don Din” buscamos, y felizmente hallamos, al títere metamorfoseado…es decir, por la mutación de formas o transmutación entre titiritero y títere. 44


Don Din, un personaje “único”. Dentro de él latía la humanidad del manipulador.


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

“Mascaranímica” (máscara animada) Confluencia de máscara y sentimiento.

46


Corazón titiritero

-Metamorfosis, palabra que me conduce al diccionario (y a su vez me recuerda a un célebre cuento de Kafka). “La metamorfosis es el cambio anatómico y de hábitos que experimentan algunos animales en el transcurso de su vida. Entre las especies que se desarrollan de esta forma se encuentran la mayoría de los insectos y los batracios”. Nada dice acerca de que un títere pueda metamorfosearse… -¡Ja Ja! Pero con “Don Din” lo logramos. Fue un títere con el cual compartíamos parte de nuestra anatomía. Lo denominamos “Mascaranimica”. Se lo describo: Se trataba de una máscara y cabeza de títere montada sobre un casco, que el titiritero se colocaba en su propia cabeza, cubierta por una vestimenta del personaje y cuyas manos eran las propias manos del titiritero actuante. ¿Comprende porque le digo metamorfosis? -Totalmente era una especie de mitad títere, mitad hombre; ¿Y cual fue el personaje elegido? -Un presentador y animador payasesco que se asomaba de una caja de sorpresas. Tenía gran vivacidad y movimientos ondulantes y su dimensión era mucho mayor que los títeres de guante. Don Din también improvisaba juegos pantomímicos con mi hermano. Era un títere muy simpático, muy participativo y producía mucha algarabía en el público. - ¿Por qué le llamaron Don Din? - Porque al presentarse o despedirse insinuaba leves tañidos de una campana con movimientos laterales por espacio de varios segundos. Fue un personaje entrañable, que nos acompañó durante muchos años. Hoy, al haber pasado tanto tiempo, puedo afirmar que Don Din fue una creación única, propia y original, a la cual le profeso un sentido recuerdo. Y de cómo fue su “desaparición” mejor no acordarme ***

Primera Parte

47


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Crece la familia del TET con el ingreso de la actriz Olga Romero (1969). -Amigo cronista, permítame hacer un breve racconto para contarle lo que venía. -Adelante señor Tit. -Habían pasado los primeros años como cuerpo artístico y el TET mantenía solo a dos integrantes, a Ricardo Míguez y yo. En ese lapso, nos destacamos entre los dependientes de actividades artísticas por jerarquía y por ser muy solicitados dentro de la provincia y algunas provincias vecinas. Por este motivo, las autoridades del Departamento de Arte Dramático decidieron reconocernos. -¿De que modo lo hicieron? -Disponiendo de una plaza más en el número de integrantes. Nos propusieron a una actriz y titiritera oriunda de Laboulaye, Olga Romero, quien venía desarrollando experiencias en el género en su lugar de orígen. Con ella empezamos a aunar criterios 48


Corazón titiritero

y afianzamos la teórica y la práctica. Olga se adaptó a nuestro estilo de trabajo y nosotros receptamos sus valiosos aportes e ideas que enriquecieron nuestro patrimonio. -Como una simbiosis… -Usted lo dijo, ella encontró un camino que benefició a sus anhelos artísticos y nosotros pudimos confrontar y tomar conciencia sobre conceptos de una tercera óptica. -¿Cuales fueron los pasos iniciales del nuevo trío? -Primero nos abocamos a recopilar y a leer cuentos de autores varias en búsqueda del campo propicio en donde volcar ese cúmulo de reforzadas ideas. Luego de seleccionar algunos y desestimar otros, surgió uno que colmó nuestro entusiasmo. -¿Cuál sería esa primera criatura? -“Los maravillosos inventos de Serafín”, del autor francés Philippe Fix. Fue ardua tarea que nos demandó mucha constancia y esmero por extraer las pautas más simbólicas del cuento y transferirlas a la versión teatral de los títeres, pero conservando el contenido y la idea original. Así llegamos a entablar el texto, aunque sin fijar fecha de estreno porque el presupuesto era insuficiente. -¿Mucho dinero hacía falta? -Era necesario un alto presupuesto, si, comenzando por invertir en el aval al autor y a la edición del libro de consulta. Además, utilizaríamos el sistema de dobles del personaje central -Serafín- un joven genial, idealista, que Primera Parte

49


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

aparecía en distintas profesiones y oficios con sus variados vestuarios, por lo que se debían hacer diversos moldes para obtener siete réplicas de su cabeza. En fin, era una obra con un despliegue dinámico inusual, de corte cinematográfico, que por las razones que le conté, no se llevó a cabo ese año. -¿Qué hicieron entonces? -En su lugar concretamos varias obras cortas, como “La niña y la flor”, repusimos “El changuito piquillín”, debutó “La gallinita moñuda” y otros temas breves. En ese tiempo, ingresó un nuevo integrante, “Buby” Criado, un músico al estilo juglar, quién con su guitarra ponía melodías y letra a muchos temas del repertorio. Recuerdo un poquito de la canción en la obra “La gallinita moñuda”, que daba comienzo a la acción: “La gallinita moñuda / que encontró, que encontró / un granito de trigo / doradito como el sol…” -¿Cómo siguió conformado el grupo en ese tiempo? -Para nuestro pesar, Olga Romero decidió radicarse en Brasil con lo que tuvimos una baja muy importante. Y hacia mediados de los ‘70 se volvió a llamar a concurso para cubrir dos cargos de titiriteros. De este modo, ingresaron Enrique Orozco y Galia Kohan. Ya con el elenco reconstituido nos concedieron el tan ansiado presupuesto para realizar la no menos anhelada obra de “Serafín”. Arriba: La Voz del Interior (abril de 1980) Abajo: Revista Billiken

50

-¡Por fin “Serafín” saldría a la luz! -Felizmente… Y como le dije, hicimos esta


Corazón titiritero

obra empleando un tiempo superior al de otras debido a la cantidad de personajes y por el complejo recurso escenográfico. Por ejemplo: cuando “Serafín” y su amigo “Pluma” construían su extravagante vivienda, los distintos bloques se iban levantando rítmicamente hasta formar en conjunto una unidad ambiental. De este modo, reflejaba las originales e insólitas ideas que anidaban en la cabecita y alma de “Serafín” y mientras la casa se iba formando, simultáneamente, las figuras de los dos personajes iban y venían siguiendo el mismo ritmo y transportando los elementos de construcción. -¿Dónde se produjo el estreno? -En la Alianza Francesa, pues la sala “Luis de Tejeda” estaba en refacciones y de paso era un homenaje al autor del cuento, el francés Philippe Fix. -¿Qué significo Serafín como hecho artístico? -Fue una experiencia superadora y se habló de la puesta en escena con verdadera trascendencia. ¡Hasta de la revista Billiquen vinieron a entrevistarnos! Fue un logro y un desafío al riesgo de utilizar recursos desconocidos y no saber su resultado. Pero nuestra intención siempre era no perdurar en métodos cómodos y reiterados. -¿Las idas y partidas de los miembros continuaron? -Sí, tiempo después también se fue Galia Kohan, dando espacio para la llegada de Rosa Cuenya, y poco después, Aidé Andreoni. Al tiempo se fueron sumando integrantes como Alvin Astorga, José Luis Beresovsky, Graciela

Serafín, otro hit del TET.

Primera Parte

51


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

De izq. a der.: Aidé Andreani, Entique Orozco, Alvin Astorga, Galia Kohan, Luis Beresovsky y Jorge Míguez en la obra de “Serafín”.

Gambino, Miriam Míguez. Fueron épocas de mucha transición, de constantes altas y bajas, hasta llegar a contar con cuatro integrantes. Además de mi hermano y yo, Graciela Molina y el ya mencionado Enrique Orozco. -¿De que época estamos hablando? -Finales de los ’70, principios de los años ’80. Fue momento de crisis política en la provincia y tuvimos que arreglarnos sin presupuesto todo un año. -Dígame señor TIT, ¿La llegada de la Democracia, después de tantos años de dictadura, modificó en algo sus actividades? -Algo cambió en nosotros mismos. Pese a que durante la dictadura no habíamos sido objeto de represión alguna. Al menos, las autoridades nunca plantearon ajustarnos a determinados planes de política cultural, restringiendo o censurando la elección de los temas. 52


Corazón titiritero

-Aún así, habrán recibido al nuevo tiempo con gran alivio. -Por supuesto. Todos sentimos el cambio, ya que nos liberábamos de aquel temor, quizás producto de nuestra propia autocensura que nos imponíamos en el subconsciente por todo lo ocurrido en nuestro país. Había que prestar mucha atención en aquellos temas que hicieran alguna mención u objeción a la no libertad de expresión porque ello podía irritar al poder de turno. Temíamos entonces que se tomaran medidas represivas o de clausura del cuerpo artístico con el consabido deterioro que hubiera causado. -¿Y unos años después le tocó mudarse de la casa propia? -Sí, con nostalgia, recuerdos y alguna lágrima, como toda partida. ¡Habíamos permanecido 20 años! Por eso fue inevitable alguna lágrima derramada sobre mosaicos que lucían desnudos y donde cerrábamos la puerta por última vez para alojarnos en el Teatro Libertador San Martín. -¿Cuál espacio le asignaron allí? -Nos dieron un lugar en la escuela Emilio Olmos, que había dejado de funcionar como tal y estaba en manos del Teatro. Allí se ubicó al Teatro de Títeres, junto al Seminario de Danzas, el ballet Oficial, etcétera. Pero allí estuvimos poco tiempo, debido a las malas condiciones edilicias…hasta una pared se desplomó. -Se fueron de ese espacio de la Olmos ¿Y donde fueron a dar? -Mire, “no hay mal que por bien no venga”, ¿No? Nos adjudicaron un aula muy amplia donde armamos una pequeña platea de 50 sillas para funciones didácticas a escuelas y que se sumaba a nuestras giras constantes con el equipo móvil. Allí todo funcionaba muy bien. Había taller de realizaciones, sala de estudio y ensayos, mini plateas para funciones didácticas. Fue así hasta que llegó la privatización de la ex escuela Olmos, o sea…se eliminó un espacio cultural para dar paso a un centro de consumismo ¡Y zas! Primera Parte

53


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

-¿Zas porque? -¡Otra vez a buscarle cobijo al TET pero ahora dentro del Teatro del Libertador! Y encontramos lo que pudimos: un lugar pequeño, colocando mueble sobre mueble, en fin, hacinados. De mini sala para didácticos ¡Ni hablar! -¿Estos contratiempos y limitaciones frenaron la evolución artística? -Le diría que no. Y que cada época tuvo sus expectativas de mayor o menor ambición. Fuimos encontrando nuevos y distintos caminos que fueron ampliando y enriqueciendo los recursos del género. Fue así, ya sea en distintos tipos de títeres, como en el avance de la profundidad temática a modo de compensación de lo material con los valores literarios. -¿Qué quiere expresar con eso? -Que no se trata de realizar un sinnúmero de técnicas de títeres; sino que la superación de su arte se logra cuanto más se investiga para encontrar nuevas formas de expresión, dando muestra de la llamada evolución. A propósito: le dije antes que a veces la inspiración se puede presentar de distintas maneras… -Si lo recuerdo. -Bueno, tomar un cuento y llevarlo al género, es una manera. Otra, es tomar una obra teatral y transferirla a los títeres. Y otra alternativa es sentir la necesidad de escribirla pensando en los títeres y de este modo ubicarla directamente en el camino del género a tratar. -Bien, me quería referir usted algo sobre el escritor y poeta indio Rabindranath Tagore… -Ah sí. Porque ahí tiene otro ejemplo. Una poesía de su creación “El ladrón de sueños” fue mi musa inspiradora de una obra. Es soñar y soñar con algo que uno anhela, y cuando está cerca de conseguirlo, aparece quien le roba el sueño y se lo quita. 54


Corazón titiritero

-¿Le quita el sueño cumplido? -Le quita la capacidad de soñar. Despierta a quien sueña y le impide ver su sueño realizado. -¿Y como vinculó usted a la poesía de Tagore con la obra en ciernes? -Le cuento amigo: leyendo al “Ladrón de sueños” vino a mi memoria una imagen de cuando era chico. En un baldío del barrio habían quedado despojos de una calesita, abandonada, raída y casi desarmada. A duras penas podían verse un botecito, caballitos, autitos y otros. Ese lugar de fantasía había sido ocupado por un linyera. Con imaginación de niño me pregunté: ¿Por qué no podría volver a dar vueltas y lucir espléndida y colorida? -Y allí comienza a hacer girar su imaginación… -Bueno, en algún momento de la vida, aquella triste calesita se me juntó con el cuento de Tagore y ¡pum! me nació el ar-

“La calesita que quería vivir”, una obra que estimulaba los sueños y aspiraciones.

Primera Parte

55


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

gumento. En lugar de una persona mayor instalé allí a un niño solo en la Vida a quien bautizamos “Tachín”. Este niño vivía en una calesita abandonada y soñaba siempre que recuperaba el esplendor y volvía a girar con luces y música. Pero de pronto se despertaba y estaba allí, rodeado de la triste realidad… ¿Me sigue? -Lo sigo, sin bajarme de la calesita… -Un día “Tachín” se lamentaba de la desgracia, y en lo alto del espacio aparecía la luna contándole porque no podía materializar su sueño, señalándole lo que puede hacer. -¿Qué le señala? -Que se vaya detrás del ladrón de sueños hasta encontrarlo y exigirle que le devuelva su sueño. “Allí tienes muchos amigos que te dirán donde encontrarlo…el botecito, el caballito, a la sirena ellos te dirán y te llevarán al lugar donde se esconde el ladrón. Y así comienzan variados viajes aventureros. Van al mar y el botecito y la sirena le ayudan. Otro viaje lo hace en el caballito y llegan al lugar dónde nace el arco iris; allí conocen al patriarca de los colores… y muchos viajes más. Pero siempre llega tarde, todos le dice el ladrón de sueños ya se marchó de aquí. Desilusionado, “Tachín” vuelve a la calesita y se da con la inmensa sorpresa de encontrar a su perseguidor. Él se las ingenia para retenerlo y así logra recuperar su sueño. Escenas de “La Calesita que quería vivir”.

56

-Una metáfora que sintetiza bastante el sentido de la Vida… -Así es y quiero destacar que yo había demarcado la estructura de la obra -comienzo,


Corazón titiritero

desarrollo-final- sin detallar diálogos; a eso lo fijamos precisando las escenas, en calidad del grupo; Orozco, Kohan, Andreone y yo. Lo que le llamo creación compartida. Galia fue quien propuso el nombre de “La Calesita que quería vivir”. -¿Y el público como la recibió? -Lo recibió como un espectáculo muy original, no se parecía a ninguno antes visto. Gran atractivo para niños en edad de jardín y hasta 8 años. Usted puede ver allí algunos dibujos de alumnos de una escuela de La Calera que como parte de una tarea debían expresar lo vivido durante la obra. Y cuando nos presentamos en el Colegio Alemán su director nos dijo que era una obra digna de ser exhibida en Europa porque sería muy valorada. -¿Cómo hacían para ir con la calesita de acá para allá? -Bueno, Raúl y Marcos Reyeros, los hermanos a cargo de la Utilería del Teatro San Martín, con gran capacidad construyeron una gran sombrilla de unos 4 metros de diámetro que se abría y cerraba mediante una manija sujeta a un carrete. ¡Un mecanismo excelente! -¿Presentaría esta obra de nuevo hoy si le tocara? - ¡Si! Pero sin mecanismos. El giro lo haría más sutil, sugerido actoralmente. Es una puesta que quise mucho…hay obras y puestas en escena que han sido grandes hitos en nuestra historia del TET. “La Calesita” fue una de ellas…

Programa de la obra.

Primera Parte

57


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Alumnos primarios de la Escuela Juan José Paso, de La Calera, representaron en sus cuadernos la obra "La Calesita que quería vivir". Como eje de su accionar cultural, el TET actuaba constantemente en espacios escolares.

58


Corazón titiritero

-¿Y que otras obras rescata su memoria artística? -“El Herrero y el Diablo”, como no. Aclaro que su autor, Carlos Gené, la compone como “fiesta teatral” y está basada en el capítulo 21 de la novela “Don Segundo Sombra”, de Ricardo Güiraldes. Allí el protagonista central cuenta la leyenda del Herrero y el Diablo en una noche de fogón. Pero aquí quiero detenerme unos segundos. -Bueno, concedidos. -En ese año, 1987, ya lo dije antes, no habíamos estrenado ninguna obra por falta de presupuesto, y a eso lo suplíamos con muchas ganas de trabajar. Además, hacía rato que me seducía la idea de hacer una puesta de literatura gauchesca. Decidimos reemplazar el bajo presupuesto con el aporte que nos hicieron los talleres de utilería, carpintería, maquinarias y costuras. Todos nos dieron una mano brindándonos los elementos que contaban, en una acción solidaria de entrecasa por la cual estaré eternamente agradecido. -Hecho el justo reconocimiento, volvamos al “Herrero y el Diablo”… -Como le decía, cuando llegó a mis manos el texto del viejo herrero que hace valer su astucia sobre los designios divinos, me entusiasmé bastante. Se llamaba “Miseria” y es el único títere de esa obra que aún conservo en un ropero de mi taller. “Miseria” era de esos tipos que “si no la ganan la empatan”. -Hábleme de las técnicas utilizadas -Bueno, allí también está la evolución demos-

Dos escenas y afiche de “El herrero y el diablo”.

Primera Parte

59


Don Segundo Sombra, figura principal de la novela de G端iraldes.


Corazón titiritero

trada con hechos. Del tamaño de títeres de varilla recurrimos a otras técnicas a las que Ricardo y yo llamábamos “ocasionales”. Por ejemplo, los jinetes y la amazona se controlaban con comandos internos (por dentro del cuerpo del caballo en que iban montados). Otros de pértiga y varillas. También utilizamos la proyección de sombras chinescas combinando la silueta convencional con intervención de brazos y manos reales del titiritero. Es decir, sombras metamorfoseadas. -Una innovación en recursos técnicos. -Así es y también en mi trabajo de transferencia al género títeres, modifiqué esencialmente la estructura del texto. Dispuse la presencia del protagonista central, don Segundo Sombra, narrando y ensayando premoniciones de lo que podía suceder desde su visión de hombre de mundo y conocedor de la Vida. Decidí darle una dimensión diferenciada, de gran tamaño. -¿Cómo era? -Se constituía de piernas reales del manipulador, sosteniendo una pértiga como soporte de cabeza y cuerpo del títere. Y medía aproximados 3m y medio. ¡Y la presentamos en la Sala Mayor del teatro, con rotundo éxito! Comentarios de la prensa así lo confirman. -Ya que estamos en plan de revalorizar viejas obras, mencione alguna más. -Bien. Salgamos de la leyenda y pasemos a un cuento infantil: “Un elefante ocupa mucho espacio”. Su contenido era la utilización de animales en pruebas de circo con sometimiento de prácticas que suelen ser crueldades. Y también el desafuero del hábitat natural de cada especie. -Otra problemática mundial ligada a la Ecología. - Sí. En este caso, rescaté del texto de Elsa Bonerman, los rasgos psicológicos de las personas y características de los aniPrimera Parte

61


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Gráfica de “Un elefante ocupa mucho espacio”.

males. Concebí al propietario del circo en su único afán de producir grandes ganancias sin importarle en absoluto las penurias de los animales. El domador tenía la doble misión de lograr éxito en las pruebas y además ser guardaespaldas del propietario de circo, en casos de riesgo o situaciones extremas. -¿Y el elefante? -Era el ideólogo, el que procuraba sembrar en la conciencia de sus compañeros la idea de la defensa de los Derechos del Animal y de una posible rebelión. Por otro lado, en el cuento, el león se mostraba dubitativo y temeroso. En mi versión de transferencia, lo plasmé como un león que había perdido la valentía. En el osito, quedó intacto su conformismo de la cómoda vida en cautiverio, expresado con la inocencia de un niño. El loro por su parte fue transformado en lora y mantuvo su misión de ser intérprete y traductora entre los idiomas de las personas y animales. La foca con62


Corazón titiritero

servó su papel de coqueta asignada por la autora y agregamos un personaje muy simpático: un mono, el cual hacía graciosas piruetas en una cuerda y desfilaba montado sobre la cabeza y lomo del elefante. -¿Y que técnica implementaron? -¡Ah! debutamos con la técnica de mesa que es, justamente, una mesa como espacio escénico sobre la cual se producen las acciones. Los títeres están dotados de comandos para controlar movimientos de cabeza, extremidades y todo el cuerpo si fuera necesario. Con una adecuada utilización de la luminotecnia, la presencia del manipulador pasa inadvertida. Es decir que el espectador ve al títere movilizarse sin ningún soporte. De esa manera un personaje no sólo puede caminar de un extremo a otro, sino que también puede, a título de telequinesia, vencer las fuerzas de gravedad y elevarse por sobre el espacio. -¡Cuantos recursos pueden intervenir en una obra! -Lo que en el mundo existe y está al alcance de nuestras manos. Solo que se debe dedicar tiempo para experimentar e investigar y obtener el caudal mayor de recursos y nuevas formas de expresión. -Eso ha quedado muy clarito, durante estas largas horas de charla. Dígame ahora cuál fue el último trabajo que usted presentó como integrante del TET. ¿Lo recuerda? -¡Claro! Fue de mi autoría: “El Enfermo redondito”.

“Un elefante ocupa mucho espacio”, personajes: un mono trapecista y un león sometido.

Primera Parte

63


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

-¿Un alegato contra la obesidad? -No… Un alegato en defensa de la ecología, del medio ambiente. Fue una obra que empezamos a dar por Mayo de 1994, y con la cual iniciaría mi posterior jubileo en 1996. - Sobre Ecología, recién se estaba empezando a hablar, más que todo en ámbitos escolares. ¿Qué hizo abordarlo y llevarlo a la actuación? -Precisamente, mi inquietud por esas noticias que nos llegaban acerca del deterioro del Planeta y que había alterado el orden y comportamiento climático. -Supongo que se debe haber documentado bastante para que el mensaje calara hondo. -Si, claro. Consulté libros, tratados, revistas y accedí a toda información científica que pude juntar. -En La Voz del Interior apareció un buen comentario de la obra con el título “Los títeres también hablan de ecología”. -¡Ah sí! Y como le decía, después de recopilar toda la información respecto al medio ambiente, encaminé mi atención a la parte novelesca, pues considero que “Un enfermo redondito”, es una novela de Ciencia Ficción, apta para el entendimiento de los niños y el interés de los mayores. Más personajes: la lora intérprete y la coqueta foca.

64

-¿Hubo algún hecho que le llamara a la inspiración? -¡Exacto! Una publicidad que observé en la vidriera de una farmacia, me fue dando algunas pautas argumentales. Había una imagen


Corazón titiritero

de una niña y un niño suspendidos en el espacio observando a lo lejos una plantación de flores. Era la publicidad de un perfume para chicos. Los imaginé con escafandras e indumentaria espacial, observando a un planeta en el cielo. Los niños se llamarían “Dolfo” y “Vana” (por Rodolfo y Silvana). -Convirtió a la plantación floral en un planeta. -Si, y sus síntesis argumental era que estos chicos eran los únicos sobrevivientes de un planeta llamado “Terra”, el cual se encontraba extinguido debido al constante deterioro de su medio ambiente. -Ya que estamos cuénteme que misión tenían estos chicos. -Estaban al cuidado de una máquina inteligente llamada “Memoria Mater” y debían permanecer en ese lugar del Universo hasta que las condiciones climáticas mejoraran en su planeta. De ese modo, podrían volver a habitarlo y reproducir la especie humana allí. Hete aquí, que los niños al saber la verdad de su procedencia, le piden a “Memoria Mater” que les permita visitar su planeta natal. Ella accede y realizan tres viajes virtuales y comprueban como se contaminaron las aguas, el suelo y la atmósfera. Al regreso, la máquina les dice que se deben de esperar muchos años de recomposición del Medio Ambiente de “Terra” y que por ahora nada se puede hacer. -¿Y que hacen los chicos ante esta desalentadora realidad? -“Memoria Mater” les dice que existe otro planeta llamado “Tierra” y que está sufriendo lo mismo, aunque todavía queda tiempo de salvarlo. Ellos podrían viajar allí y alertar a la Humanidad a través de otros niños de que se ponga freno a su detrimento mundial. La escena final mostraba una nave espacial aproximándose a la Tierra y girando en su alrededor, mientras se oía la letra de esta canción: “Que por siempre haya cielo / Que por siempre brille el sol / Que por siempre viva el hombre con la vida en esplendor”. Primera Parte

65


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

“Mi corazón, mis piernas, mis brazos, son todos titiriteros”.

-Amigo Tit: Estamos ingresando en el tramo final de nuestro extenso diálogo. Usted ha hecho gala de su memoria de artista consagrado a sus títeres. Y para cerrar este caudal de memoria, conceptos, recuerdos, me interesa saber que le dejaron sus 36 años en el Teatro Estable de Títeres. Expréseme que se siente al tener sobre “el lomo” la Vida inmersa en el mundo de los títeres. -Mire mi amigo cronista. Siento que el paso por esta Vida no ha sido en vano. Que con mi arte, he podido reflejar defectos y virtudes del ser humano. Que además, colaboré en dar a conocer y difundir valores culturales del terruño y también como ciudadano del mundo, por cuantas adopciones de temas de la Literatura Universal hemos presentado. Por haber brindado, además, alegría a muchos niños y por haber entendido, y hecho entender, principios y preceptos de la Vida que se mantienen constantes y que nunca cambiarán. Me refiero al afecto que el niño siente por el títere, aunque la robotización avance a velocidad meteórica o a pasos agigantados. ¿Qué más puedo decir? La verdad es que entregué mi Vida al arte teatral de los títeres y los títeres fueron encarnándose en mi corazón. Mi corazón, mis piernas, mis brazos, son todos titiriteros. ***

66




segunda parte Reseña de cómo crear una obra de teatro

“El Títere es síntesis y cómico por excelencia” Por Jorge Miguez

Considero al títere como un medio muy puro de expresión, apto para la interpretación dramática. Su poder de subjetividad nos hace transitar por un camino con sus códigos propios y muy claros. La figura de un títere tiene implícito un solo rasgo expresivo en su rostro, sin embargo puede reír o llorar, es decir, refleja la alegría o la tristeza. Diría entonces que es un espejo de la vida. Comienzo por aseverar que los contenidos de sus temas son propios de la vida misma, con sus conflictos y sus momentos de triunfos y derrotas, junto a sucesos que pueden interesar o conmover. Vuelvo entonces sobre la alegría y la tristeza que alcance a afectar al ser viviente y no me circunscribo solo al humano. Esos sucesos, recomiendo siempre, deben ser tratados respetando la capacidad de entendimiento del niño sin caer en vocablos y tonos llamados “ñañas”, que no hacen otra cosa que subestimarlos. Sostengo que en sí, el títere es síntesis en toda la extensión de la palabra. Todo texto del género titeril deberá respetar esta condición. Cuando se crea una obra de teatro de títeres y se escriben sus diálogos o describen sus acciones y movimientos de locomoción, también se debe tener en cuenta la condición de síntesis. Cuando se adapta o se transfiere un texto proveniente de una obra de teatro para aplicar al teatro de títeres aconsejo el término “restringir”, entiéndase como “limitar”, “coartar”, “circunscribir”, “ceñir”, “delimitar” y “acortar”. El títere es cómico por excelencia. Por ello, sentimientos como el miedo, la inseguridad, la desolación, etcétera, estarán Segunda Parte

69


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

signados siempre por una dosis de humorismo, aunque no se aparten de la ironía o la mordacidad, separando prolijamente los temas que se escriben para niños y para los adultos. Otra recomendación que hago encarecidamente es no utilizar a los títeres para representar o encarnar roles de personajes históricos, especialmente de nuestra historia nacional, puesto que es muy posible hacer caer en ridículo a figuras ilustres de excelsa identidad. En conclusión: en toda obra, tanto de teatro de actores o de títeres, es conveniente que su argumento demuestre contener objetivos claros, bien definidos y que se encaminen por un conducto que transporte el caudal de esos objetivos desde el comienzo, y durante el desarrollo, en sentido convergente hacia el desenlace, y que sus escenas se relacionen armoniosamente con el objetivo rector del contenido temático. ***

“La figura de un títere tiene implícito un solo rasgo expresivo. Sin embargo puede reír o llorar, reflejar la alegría o la tristeza”, afirma Míguez.

70


Corazón titiritero

El teatro de títeres en el actual reinado de la imagen

“Felizmente, nuestra sala siempre se llena de ojitos expectantes” Por Enrique Orozco, miembro del TET desde 1976.

Al principio, nos inquietó bastante la aparición de una abrumadora oferta de juegos y entretenimientos electrónicos, desde la simple “family” hasta intrincados juegos en 3D, que se sumaban a las ya poderosas presencias de la TV y el cine. Por un momento, nos hizo temer de que el milenario teatro de títeres iba a desaparecer o perder vigencia. Felizmente, no fue así, los niños y los no tan niños siguen eligiendo al querido teatro de muñecos, donde reina la fantasía y el asombro; un mundo de sueños hecho de tela y cartón, pero inmensamente humano y conmovedor. Por eso no ha perdido público ni vigencia, sigue presente desde las épocas cavernarias hasta el día de hoy. Es cierto de que hay mucha competencia. Sobre todo en el orden tecnológico, por la aparición día a día de nuevas ofertas de entretenimiento y educación, de juegos, videos con hermosas imágenes y de aparatos cada vez más portátiles y pequeños. En cambio, el teatro de títeres sigue siendo el mismo, aunque con mejor apoyatura técnica: micrófonos inalámbricos, iluminación con lámparas halógenas y leds. Pero como dije, los títeres tienen “su público”, los niños y grandes todavía nos eligen, el hecho está demostrado porque siempre tenemos la salita llena de ojitos expectantes y asombrados con una bolsita de pochoclo en sus manos. Por supuesto, que en relación al pasado, ha cambiado el modo de hacer un espectáculo de títeres. No tanto en lo técnico, sino que se ha ganado en creatividad y en la temática. Antes la temática era muy simple y todo se resolvía dándole Segunda Parte

71


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

palos a los “malos”; diablos, brujas y ogros. Ahora he visto espectáculos muy bellos donde se crean climas poéticos, inclusive con música en vivo. Hay una búsqueda de nuevas formas de expresión, creando títeres no convencionales con otros materiales, combinando técnicas ya tradicionales. Respecto a la edad, y a causa de que hoy los niños se escolarizan más temprano, tenemos público desde los 2 años de edad. Los titiriteros somos cada vez más contratados por jardines maternales y guarderías. Por otra parte, hace rato que el titiritero abandonó su “escondite” y combina lo actoral con lo titiritesco, interactuando con los muñecos y el público. El Teatro Estable de Títeres (TET) es un elenco del Estado que no vive de las entradas vendidas, por lo tanto, se da ciertos lujos de experimentar e innovar. La obra “La hora del queso”, por ejemplo, es toda una experimentación, con muñecos que son objetos cotidianos, como unas jarritas de metal devenidas en ratones y un gato hidráulico que se torna en un gato-personaje, solo con agregarle algunos detalles: ojos, bigotes y una constante intervención de los titiriteros y la trama de la obra. Puedo asegurar que en actualidad hay bastantes jóvenes que abrazan el oficio de titiritero, muchos egresados de las escuelas de Teatro, que comienzan “experimentando” el arte de los Títeres, se maravillan y se quedan. Lamentablemente, no hay una “escuela de titiriteros” o un lugar donde ir a tomar clases en forma regular y aprender este arte. Actualmente, los jóvenes de la nueva camada participan en talleres que algún titiritero organiza, pero eso es insuficiente. Aún así, intuyo de que no hay un declive de la vocación. ¡Ahora hay más titiriteros que hace 15 años! ***

72


CorazĂłn titiritero

Ferro, Miceli e Istillarte en la "Hora del Queso" (2011), dĂĄndole vida a objetos cotidianos, como a jarritas de metal y un gato hidraĂşlico.

Segunda Parte

73


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

“No se puede hacer títeres sin ser niño” Por Luis Miceli, miembro del TET desde el año 2001.

Por suerte, siempre los títeres están en permanente cambio. Mejoramiento de técnicas, amplitud de combinaciones, innovaciones, etc., Pero lo que es incambiable es la esencia del arte de los muñecos animados. Esto es lo que lo hace perdurable. Un enorme muñeco articulado, casi perfecto deambulando por las calles de la ciudad, nunca podría superar a la magia de un par de títeres de guantes detrás de un retablo. Los títeres son infinitos. Desde las técnicas mas conocidas: guante, varilla, de boca, de manipulación directa, con hilos, hasta personajes-objeto, con el propio cuerpo del animador. Uno puede darle vida a un vaso de agua, todo depende de la capacidad creadora y creativa del titiritero. Los temas a abordar son “todos”, en absoluto. Por lo general, las temáticas son “familiares”. Villafañe decía que las obras no son para niños o adultos, las obras simplemente “son”. La respuesta del público, creo, conociendo esto solo de la década de los ‘80, es muy parecida a la de todas las épocas. Algunos conservamos la esencia de niño. Otros dicen ya no comportarse como tales pero a la hora de sentarse frente a un espectáculo de muñecos animados, sea por casualidad o adrede, ese niño aflora y domina nuestro cuerpo involuntariamente. Es una ley: No se puede hacer títeres sin ser niño y no se puede presenciar un espectáculo sin dejar de serlo. En la actualidad, trabajamos mucho con la participación del titiritero como actor, como un personaje mas del espectáculo. Es una tarea que requiere de una preparación corporal e 74


Corazón titiritero

histriónica muy amplia. Eso, sumado a una muy buena animación de títeres, hace del actor-titiritero un artista muy completo. Por esta causa, a las artes hay que unirlas, nunca tomarlas por separado. Esta es la esencia actual del TET, buscar la excelencia detrás del retablo y fuera del mismo. En el tipo de obras como “La hora del queso”, se trabaja de manera visible, porque los titiriteros también son personajes de la obra, pero pueden “desaparecer” por momentos. No es que ya no se trabaja de forma invisible, también se trabaja de esa forma. “Ser” titiritero, no trabajar “de” Respecto a la vocación titiritera, yo pienso que en la actualidad permanece en los jóvenes. Pero he conocido "titiriteros express", o casuales, que toman este arte como salida laboral o pasatiempo. Sin vocación, el arte solo es efímero, uno tiene que “ser” titiritero no trabajar de titiritero. Ahí esta la gran diferencia. Actualmente, hay escuelas de titiriteros pero en Córdoba todavía no. A mi forma de ver, por mas que se estudie cinco años y nos den un diploma de titiritero profesional, si no se hace “la calle” no se crece. La formación viene por parte de un formador, pero el mayor aporte está en salir al ruedo. Creo que nunca va a haber un declive, ¡nunca! Habrá nuevos auges. Siempre. ***

Miceli y Orozco: “Algunos conservamos la esencia de niño”.

Segunda Parte

75


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

“El títere es inherente al ser” Por Gretel Istillarte, miembro del TET desde 2001.

Con mucho amor escribo esto dedicado a los títeres: Esos seres imaginarios que por su forma, su color, su textura, su movimiento, su síntesis, son tan sorprendentes que se desprenden de tus manos para generar vida propia en cualquier lugar y en cualquier tiempo. Ellos son para los niños; para los jóvenes; para los viejitos; ellos son para siempre la composición perfecta de una sonrisa amplia, clara y transparente. La llegada de ellos fue y será esperada con emoción, con curiosidad, con calor... ¡Con libertad! Actualmente, los títeres siguen cumpliendo con su función de trascendencia. El títere es inherente al ser, así como en tiempos remotos, el ser humano pudo expresarse a través de un objeto, o una imagen, su ira, su ternura, sus miedos, sus creencias, naturaleza, el amor. La fusión del títere con el espectador. Los títeres siempre fueron respuesta y pregunta sin nada que se interpusiera en el encuentro, el reencuentro. El títere tomado siempre de la mano al que lo acompaña en su andar sin tiempo, sin demasiada vestimenta, siempre está. Perdura desde su simpleza, nos encamina a la lucha de nuestros sueños más profundos, ¡En el quehacer de fantasía de la vida! Los recursos técnicos, tecnologías y todo lo que llega hasta los títeres serán siempre bienvenidos. La evolución o la involución, al títere no lo modifican en su esencia, sólo lo sirve para seguir diciendo desde distintas perspectivas de expresión lo que tiene para contar, para compartir, para comprender. Este año en la escuela de teatro “Roberto Arlt” se incluyó la cátedra de “teatro de objetos”, así como también en el Seminario de Teatro “Jolie Libois”, se trabaja en una materia que 76


Corazón titiritero

es “Escenografia” y en la cual también se implementa el conocimiento del arte de los muñecos. ¿Cómo se forman en la actualidad los titiriteros? La que acabo de citar es una manera nueva diría yo, que te acerca despacito y te hace tener la experiencia en la técnica titiritesca. También hay escuelas de titiriteros pero en otras ciudades y provincias que no es la nuestra. Aún así, Córdoba -si no me equivoco- es una de las provincias que más titiriteros tiene. Los titiriteros, en su mayoría, son autodidactas, también por tradición de familias titiriteras de años, por talleres, por seminarios… Yo creo que cada uno hacemos caminos siempre diferentes hacia el encuentro de los títeres. Pero es seguro que cuando nos sumergimos en su mundo es muy difícil escapar de su encantamiento y de su embrujo. ***

Obra “Slurp, el vampiro”.

Segunda Parte

77


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Crónica de un festejo Fotografía de LA VOZ DEL INTERIOR.

De izquierda a derecha: Luis Micelli, Gretel Istillarte, Raúl Sánchez, Enrique Orozco y Silvia Pastorino. En el karting, Fernando Suárez. Celebración con "El detective y la niña sonámbula".

La periodista y crítica de teatro, Beatriz Molinari, de la Voz del Interior, realizó la siguiente crónica, referida al anuncio de la jornada en la que el Teatro Estable de Títeres (TET) celebró el medio centenario. En la ocasión, se presentó la obra “El Detective y la niña sonámbula”, de Ana Alvarado. Fue el 8 de diciembre de 2010, en coincidencia con el nacimiento del teatro, en el año 1960. El Teatro Estable de Títeres cumplió sus primeros 50 años y lo festeja el sábado con el estreno de la obra El detective y la niña sonámbula de Ana Alvarado, con dirección y diseño

78


Corazón titiritero de muñecos de Fernando Suárez (Buenos Aires). Los titiriteros Enrique Orozco, Gretel Istillarte y Luis Micelli, integrantes del elenco, quisieron armar una obra destinada al público adulto (a partir de los 15 años), por eso el director invitado tuvo la tarea ardua de buscar la obra. “Son escasos los textos de títeres para adultos. Finalmente di con la obra de Ana Alvarado (fundadora de El Periférico de Objetos), destinada a adolescentes y adultos”, explica Suárez que dirige por primera vez el Estable. El detective y la niña sonámbula plantea los sueños de una adolescente. En el estado de vigilia, interpretan los roles los actores de la Comedia Cordobesa Silvia Pastorino y Raúl Sánchez; en el plano de los sueños, los títeres asumen los personajes que transmiten la rebeldía y el erotismo de la protagonista. “La obra tiene elementos absurdos. La chica aparece en ese plano del sonambulismo, en un boliche, bailando; en una manifestación o una guerra”, explica el director. El vehículo de la foto es el auto del papá que amanece cada día roto o fundido. “Elegí elementos tracción a sangre, como el karting, la bicicleta y la bicicleta doble. La obra de Alvarado está inspirada en el cuento Las doce princesas. En el original, las princesas se escapan por la noche para ir a bailar”, dice. Suárez, que tiene su propio grupo en Buenos Aires (Bigote de monigote), conoce el ambiente titiritero y teatral de Córdoba, pero es la primera vez que dirige aquí. Con respecto al aniversario señala: “Es muy valioso. Hay que cuidarlo para que cumpla 50 años más. Existe una tendencia, y es que la política se come a la cultura. A veces, por motivos económicos, otras, por razones ideológicas. El único riesgo de un elenco estable es que se ‘aburguese’. Por eso es importante que inviten a directores de afuera del elenco.Genera aire y renueva la energía. Que haya un elenco oficial tiene millones de ventajas, porque es bueno poner obras en espacios oficiales con una entrada accesible. Es un honor dirigirlo en este aniversario”.

*** Segunda Parte

79



Tercera parte Síntesis argumentales de algunas obras “CIELO SIN BARRILETES” de Enrique Orozco Cuenta de un pueblo que era famoso por los barriletes multicolores que allí se remontaban, pero un día el viento desapareció misteriosamente los niños desesperados buscaban las causas Y Tomasito decide tomar el toro por las astas e investigar el asunto y gracias al aporte de un pajarito se pone en contacto con el señor de los vientos y ellos le dicen que alguien se esta robando el viento, entonces Tomasito orienta las sospechas sobre una vieja casona donde vive un sabio bastante chiflado que ha instalado en su casa una veleta para saber la dirección del viento y una maquina extraña, Tomasito intenta acercarse pero es atacado por un poderoso robot, Tomasito después de varios intentos logra vencer al robot y entrar a la casa donde descubre la verdad, un gran aparato que atrapa al viento y lo mantiene encerrado. Al otro día Tomasito va a la casa a pedirle al sabio que libere al viento y él le contesta que lo ha “privatizado” y deberán pagarle mucho dinero para que lo suelte. Los niños no se dan por vencidos y traman un plan: les piden a los chicos del público que soplen para mover la veleta; de este modo, el sabio cree que hay viento, saca la máquina y se dispone a absorberlo. Tomasito sale de su escondite, salta sobre el profesor y luchan y alcanza apretar un botón que libera de golpe todo el viento, se forma un remolino que se lleva al profesor y a partir de ese momento se libera por fin el viento y los barriletes vuelven a volar mostrando todo su colorido. *** Tercera Parte

81


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

“EL AMOR VIENE EN LATA” de Enrique Orozco

Siempre pensé desde que era niño que en los sitios baldíos donde se amontonan las latas vacías de conservas, botellas y toda cosa que desecha la gente, vivían duendes o pequeños seres fantásticos, que habitaban esas latas armando casitas con ellas y formando pequeñas comunidades , esta es la historia que les quiero contar, de Plic un pequeño ser que vive en soledad, solo lo acompaña un viejo radiograbador, y trata de todas formas de tener amigos, pero una 82


Corazón titiritero

mariposa indiferente o un agresivo abejorro frustran ese deseo, hasta que una mañana aparece una latita nueva en la que habita un pequeño ser, que luego de superar algunos temores se hacen grandes amigos. Plic está muy feliz con la nueva amistad. Una noche pasa un ciruja y se lleva entre otras latas, la latita de Muck, el amigo de Plic. Este, enloquecido, sale a buscarlo por todas partes, hasta que desparrama latas en un supermercado tratando de encontrarlo, aparece un policía y lo lleva preso, Plic, llora su pena encerrado en una celda hasta que la luna se apiada de él y lo libera, Plic rápidamente construye un aparato volador para salir en búsqueda de su amiguito, finalmente tras varias aventuras lo libera de manos del ciruja, Plic alborozado vuelve a casa con Muck pero este le hace entender que tiene que seguir su camino y ante la tristeza de Plic, Muck se va, pero le deja una flor, que finalmente le atraerá a Plic, el amor de su vida, una coqueta duendecita. ***

“EL CASAMIENTO DE DOÑA RANA” de Javier Villafañe Es una simpática historia donde cuenta que un día decidió casarse don Sapo con doña Rana, todos animalitos y bichitos del bosque deciden hacer la fiesta, preparando sus cantos y adornos, pero la fiesta de bodas se ve interrumpida, por el secuestro de la novia por parte de la enorme araña, el pobre sapito sale a buscarla, pero para rescatar a su amada deberá enfrentarse con la terrible araña, el sapo encuentra el escondite de la araña se enfrentan y sale vencedor, pudiendo continuar con el casamiento. ***

Tercera Parte

83


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

“EL APRENDIZ DE BRUJO” de Rafael Curci

Es la historia de un viejo sabio, brujo, alquimista que desea dejar el legado de su conocimiento a un joven inteligente capaz de continuar con su labor. Como no encuentra ningún joven y está demasiado viejo para engendrar alguno, y por consejos de su libro grimorio, hacer un niño de manera artificial valiéndose de fórmulas mágicas, una vez conseguido ese propósito el niño se rebela y se niega rotundamente a ser mago en cambio quiere ser pintor, el viejo mago furioso trata de convencerlo por la fuerza y no lo consigue. Un día el niño que había aprendido algo, mezcla pócimas con pinturas y magia y hace hermosos cuadros hasta lograr hacer un arco iris en el cielo, el mago maravillado por el talento del niño accede finalmente a que sea pintor y emprenden juntos un viaje a buscar nuevos paisajes. (Los cuatro textos anteriores fueron extraídos del sitio web “Huellas de la Historia”, recopilados por Enrique Orozco).

84


Corazón titiritero

“EL DETECTIVE Y LA NIÑA SONÁMBULA” de Ana Alvarado

Dicho por Rosana Eliana Boudet de Bilbao, España, cuando “El Detective y la niña sonámbula” ganara el “III Concurso Iberoamericano de Dramaturgia Infantil”: “Apegada a la secuencia cinematográfica y el guión, esta obra reúne en un solo argumento de ambiente cinéfilo, el suspenso detectivesco y el más tierno y hermoso relato de hadas. En el mismo, se asoma el sentimiento, tantas veces menospreciado por los mayores, respecto a la soledad y la curiosidad de los adolescentes. En la obra, el personaje de la niña, escapa en sus recorridos nocturnos, para conocer amores, manifestaciones estudiantiles y hasta guerras, mientras en el hogar, vive prisionera de la protección de su familia”. Técnica utilizada: actuación, manipulación de títeres de mesa, titeres de guante y de objetos. Tercera Parte

85


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

“LA HORA DEL QUESO” de Carlos Piñero. Un gato mecánico, dos ratones metálicos y tres titiriteros oficiantes elaboraron un queso con artes titiritescas para aguantar una crisis. Empeñaron su palabra y prometieron que lo comerían entre todos, a la hora en que el queso estuviese estacionado. Y la hora del queso por fin llegó, pero con sorpresa porque alguien se lo comió casi todo ocasionando un gran lío. En esta comedia de animación reciclada, se intenta explorar un lenguaje cercano al teatro de objetos. Se dice cercano, porque una tendencia de lo "objetual" exige que los objetos se presenten como fueron construidos originalmente, cuando no tenían funciones dramáticas. Se intervienen los objetos para darles aspecto de personajes. Los titiriteros deben entonces, jugar con las características particulares del objeto en sí (forma, movilidad, materialidad, etc.) y la caracterización de los personajes, que en este caso son animales. Se integraron al lenguaje de los objetos, el de la narración, el gestual y de la música, en el intento de mixturar códigos específicos de cada de ellos, en la búsqueda de poéticas menos transitadas. Animación y narración: Gretel Istillarte, Luis Miceli (foto) y Laura Ferro (foto) como actriz invitada. Diseño y construcción de objetos: Pablo Lavezzari. Entrenamiento y composición musical: Coqui Dutto. Realización de utilería: Enrique Orozco. Codirección: Carlos Piñero – Laura Gallo. Fuente: http://vos.lavoz.com.ar/agenda/hora-queso

***

86


Coraz贸n titiritero

Tercera Parte

87


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba 1

3

4

5

6

7

8

9

10

11

12

13

14

15

16

17

18

19

20

88

2

21

22


Corazón titiritero

Miembros del Teatro Estable de Títeres Desde su inicio y por orden de aparición.

Fundadores: 1. y 2. Ricardo y Jorge Míguez 3. Nelly Canepari 4. Beatriz Georgis 5. Olga Romero 6. Adriana Argenti 7. Augusto Criado Graciela Gambino 8. Galia Kohan 9. Aidé Andreone 10. Luis Beresovsky 11. Enrique Orozco 12. Alvin Astorga 13. Graciela Molina 14. Cristina González 15. Rossi Cuenya 16. Jorge Molina 17. Miriam Míguez 18. Artemia Barrionuevo 19. Susana Ceballos 20. Francoise Guillemont 21. Luis Miceli 22. Gretel Istillarte

“Una vez descorrido el telón, se iluminan con una sonrisa las caritas de los niños cada domingo. Esa sonrisa es síntesis de una vivencia infantil y da la dimensión del profundo sentido y relieve que adquiere el mundo encantado de los muñecos”.

Tercera Parte

89


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

Obras realizadas por el Teatro Estable de Títeres (1960 - 2011)

-“El mancebo que casó con mujer brava” de Alejandro Casona. -“El príncipe saltarín vence a Don Sifón y se gana un corazón” de Oscar Alberaz. -“El Camaleón” de Antón Chejov. -“Pantomima del gato y el ratón” de Ricardo Míguez. -“El changuito piquillín” de Jorge Míguez. -“El soldadito de Plomo” de Tritán Klinsorv. -“El caballero de la capa azul” de Ricardo Míguez. -“Ríe y llora payaso” de Jorge Míguez. -“El tigre el zorro y el labrador” de Pérez Tamayo. -“La gallinita trabajadora” de Ricardo Míguez. 90


Corazón titiritero

-“Los maravillosos inventos de Serafín” de Philippe Fix. -“Fausto” de Javier Villafañe. -“El caballero de la mano de fuego” de J. Villafañe. -“El pic nic del payaso” de Enrique Orozco. -“La calesita que quería vivir” de Enrique Orozco, Galia Kohan, Jorge Míguez y Aidé Andreone. -“El caballito y la montaña azul” de Jorge Míguez. -“Es o no Espantapájaros”, de Jorge Míguez y elenco. -“Cuentos de la Tía redonda” de Jorge Míguez. -“Perezcantropus” de Jorge Míguez. -“El cumpleaños del tigre” de Jorge Míguez. -“El Herrero y el diablo” de Juan Carlos Gené. -“La aceitunas” de Lope de Rueda. Tercera Parte

91


50 años del Teatro Estable de Títeres de la Provincia de Córdoba

-“Oiga chamigo Aguará” de Adela Bach. -“Leyendas nuestras” Leyendas populares adaptadas por E. Orozco. -“Cielo sin barriletes” de Enrique Orozco. -“El Casamiento de doña Rana” de Javier Villafañe. -“Sucedió en un circo” de Enrique Orozco. -“Las aventuras de Tomasito” de Enrique Orozco. -“Hola, Señora bruja” de Enrique Orozco y Silvia Catalá. -“El regreso de la bruja Tremenduja” de Enrique Orozco -“En tu cuarto, Blancanieves” conjuntamente con la comedia infanto-juvenil, dirigida por Andrés Bassalo. -“El dueño del cuento” de Silvina Reinaudi. -“El coso” de Carlos Martínez. -“El trompo mágico” de Enrique Orozco y Miriam Míguez. 92


Corazón titiritero

-“Don Quijote de la Mancha” Adaptada por Enrique Orozco. -“Pedro y el lobo” juntamente con la Orquesta Sinfónica. -“El Gallo pinto” de Javier Villafañe. -“Slurp el vampiro” de Guaira Castilla. -“El amor viene en lata” de Enrique Orozco. -“Aprendiz de Brujo” de Rafael Curcci. -“El detective y la niña sonámbula” de Ana Alvarado. -“La hora del queso” de Carlos Piñero.

Tercera Parte

93



STAFF TEATRO REAL TEMPORADA 2012 Director Raúl Sansica Secretaría de Dirección Julia Barrandeguy Jefa Área Programación Ana Mazza Programación Fernando Castello Olga Albelo Aarón Nacer Producción José Luis De La Fuente, Hugo Olmos, Lucía Nocioni, Andrea Musso, Carlos Ludueña Asistente de Secretaría Romina Arce Prensa Alejandra Fogliatti Gabriel Abrile Elena Di Lollo Valeria Mariano Administración y Recursos Humanos Alberto Dilh Ana María Rivarola Damián Álvarez Mariela Mazzoni Isabel Morachi


Liliana Miranda Verónica Rodríguez Lozano Carlos Antonio Villada Roque Eduardo Gelsomino Compras Lucas Vera Silenia Castellanos Boletería Ana Laura Montoya Cecilia Guardia, Patricia Herrera, Beatriz López División Escenario José Rafael Molina Iluminación Hugo Arias Carlos Francisco García Víctor Acosta, Alejandro Luque Sonido Luis Armando Sánchez Mariano Olima Fernando Sánchez Maquinaria y Utilería Rubén Fernández Verónica Díaz Raúl Ríos Hugo Sosa Vestuario Norma Eva Ledesma Inés Bustos


Octavia Lichieri Elba Sosa Maquillaje y Peluquería Nancy Bazán Clara Quevedo Laura Charra Camarines Beatriz Rivarola Irma Ceballos Intendencia Mariano Petrello Secretaría de Intendencia Roxana Micangeli Recepción María Amoedo Miguel Zunino Mariana Zapata Personal de Sala Yamila Povidayko Susana Colazo Silvia Garrido Sara Zerpa Elda Rodríguez Evelyn Miguez Mantenimiento Alejandro Sánchez Jorge Perea Cafetería Stella Maris Rodríguez


Mensajería Juan Carlos Gregorich Corredores Teatrales María Victoria Gómez Laura Saavedra Mariela Román Comedia Cordobesa Edmeé Arán, Alberto Astorga, Adrián Azaceta, Norberto Bernuez, Alejandro Cuevas, Gabriel Coba, Carolina Godoy, Gabriela Grosso, Ángel Fernández Mateu, Oscar Mercado, Silvia Pastorino, Adriana Quevedo, Héctor Quiroga, Isabel Quiroga, Patricia Rojo, Cecilia Roman Ross, Néstor Rosso, Raúl Sánchez, Gonzalo Tolosa, Pablo Tolosa, Luis Torres, Clara Weller Apuntador Marcos Molina Comedia Infanto Juvenil Matías Etchezar, Martín Gaetán, Graciela Fogliatti, Eugenia Hadandoniou, Nancy Rodríguez, Silvia Doña Teatro Estable de Títeres Gretel Istillarte, Luis Miceli, Enrique Orozco, Miriam Miguez. Seminario de Formación Actoral “Jolie Libois” Director Ricardo Ceballos Héctor Rubén Andalor, María Susana Ceballos, Carlos García, Carlos Gazzera, César Fernando González García, María Isabel González, Willy Ianni, María Andrea Martínez Thompson, Liliana del Carmen Mundani García, Carlos Pérez, Giulia Petrucci, Jorge Tost, Silvia Beresovsky.


Autoridades José Manuel De la Sota Gobernador Alicia Pregno Vicegobernadora Pablo Canedo Presidente Agencia Córdoba Cultura Raúl Sansica Director Teatro Real


Datos de imprenta Fecha y tirada ***




Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.