Revista Octava Planta Nº 43

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Nuria Luis

Baby bloggers No es nuevo decir que cada día nacen más y más blogs con un peso importante en la moda. Sin embargo, son los más pequeños de la casa los que vienen pisando fuerte. Los niños de ahora no nacen con una barra de pan bajo el brazo, ni mucho menos. Lo que traen son tochos de Vogue, Vanity Fair o Harper´s Bazaar y unas ganas enormes de comerse el mundo. No han cumplido los dieciocho años, pero pueden recitarte el nombre de diseñadores y marcas tales como Rodarte o Balmain mejor que la lista de los reyes godos, resumirte las tendencias para la primavera/verano 2011 como su última lección de literatura o usar palabras del lenguaje fashionista como el más entendido de los expertos. Crear un blog podemos todos. Sin embargo, resulta fascinante cómo se han ido haciendo un hueco entre las voces de referencia, hasta tal punto que los diseñadores tienen en cuenta su opinión a la hora de elaborar las colecciones. Y algunos de los pequeños bloggers con más renombre poseen menos de catorce años. Uno de los principales antecedentes de estos niños blogueros fue sin duda Cory Kennedy. Esta norteamericana se hizo famosa a los dieciséis años gracias a unas fotos que el fotógrafo Mark Hunter (The Cobra Snake) hizo sobre ella, lo que le reputó aparecer en prestigiosas portadas de revistas como Nylon y ser icono de una nueva forma de vestir que se calificó como “heroin chic”. En 2008 consiguió ser imagen de la marca de champú Sebastian y actualmente se la puede encontrar en los front-rows (primera fila) de desfiles como el de París. Jane Aldridge, de seaofshoes.typepad.com

El caso más famoso es sin duda el de Tavi Gevinson, del blog Style Rookie (thestylerookie.com). Esta niña procedente de Chicago abrió su blog a los doce años y a día de hoy puede jactarse de tener en su twitter más de 18000 seguidores. Su apariencia de anciana encorvada (lleva gafas de abuela y el pelo teñido de blanco) y su peculiar forma de vestir la han llevado a ser el ojito derecho de diseñadores como Marc Jacobs o Karl Lagerfeld (Chanel), hasta tal punto que es una protagonista indiscutible de los backstage de todos los desfiles. Asimismo, puede presumir de que antes de haber cumplido los dieciséis años ha colaborado con las hermanas Mulleavy (Rodarte) para la colección Target o como estilista para Blackbook. Otra de las teen bloggers más famosas es Jane Aldridge, del blog Sea of Shoes (seaofshoes.typepad.com). Esta chica de dieciocho años abrió su espacio con quince y se dedica, junto con su madre fotógrafa, a viajar por el mundo y a enseñar su colección de zapatos plagada de Yves Saint Laurent, Chanel o Jil Sander que ya querría una para sí. Ha salido en revistas como Teen Vogue o Vanity Fair, e incluso ha colaborado con la marca Urban Outfitters diseñando una colección de zapatos. En un segundo plano encontraríamos bloggers como Kristin Prim (kristinprim.typepad.com) que, con sólo dieciséis años, ya es editora de su propia revista, Prim; o Noa Leijdesdorff y Lev Livnev, que llevan conjuntamente el blog Brains and Beauty (brainsbeauty.wordpress.com). El fenómeno baby blogger no se restringe al sexo femenino, ya hay algunos pequeños chicos que se están haciendo camino: uno de ellos es Charles Guislain, un francés que posee un canal de Youtube en el que sube estilismos y ha llegado a participar como modelo en una sesión fotográfica de Vogue Italia. Por otro lado, también podemos encontrar a Jonathan Wolpert, un chico de diecisiete años residente en Brasil que se dedica a hacer fotografías de editorial. En el ámbito nacional, uno de los blogs más famosos es Shared Closet (sharedcloset.blogspot.com), creado por dos hermanas, Paula y Valentina Muga, en el que enseñan sus looks con la ropa que comparten.

Paula y Valentina Muga, de sharedcloset.blogspot.com

A pesar de que las marcas se rifan a estas futuras promesas, la realidad es que poseen muchos detractores. Un ejemplo de estos es una columnista del diario británico The Telegraph, Sarah Mower, que llegó a cuestionar la labor de los padres de Tavi, preguntando por qué estaba en los desfiles cuando debería estar en el colegio.

Tavi Gevinson, de www.thestylerookie.com

Octava l a n t a

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Es difícil ser un niño prodigio y más aún en el mundo de la moda. Cuando se produce este derroche de talento a tan pronta edad, y con tal éxito, se necesita tener los pies en la tierra y un grado de madurez bastante desarrollado. Es el requisito esencial para no pasar de ser estrellas a acabar estrellados.

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