Unsueño sobre vocaciones tardías

escasez de sacerdotes y de vocaciones, pensaba también en la manera de poder aumentar su número Veía ante mí muchos chicos que venían a confesarse, buenos e ¡nocentes muchachos, y me decía a mí mismo:

-Quién sabe cuántos de ellos alcanzarán la meta, cuánto tiempo tardarán en alcanzarla los que perseveren. Entretanto, la necesidad de la Iglesia es apremiante.

Estaba muy distraído con este pensamiento, sin embargo, continuaba confesando De pronto me pareció que estaba en mi despacho, sentado en mi mesa de trabajo, y que tenía ante mí el registro de todos los que estaban en casa Me decía para mis adentros:

-¿Cómo se explica esto? Estoy confesando en la sacristía,y al mismo tiempo, estoy en mi despacho ante la mesa.. ¿Estaré soñando? No, este es precisamente el registro de los alumnos, esta es mi mesa de trabajo. Escuché una voz detrás de mí que me dijo:

-¿Quieres saber cómo aumentar rápidamente el número de buenos sacerdotes? Observa el registro y por él entenderás lo que debes hacer Observé y luego dije:

Bosco tuvo algunos sueños relacionados con las vocaciones particularmente vocaciones a la vida religiosa salesiana Aquí ofrecemos uno que tuvo lugar en el año de 1875 sobre las llamadas "vocaciones tardías" fue el mismo año en que partieron los primeros salesianos misioneros a América

"Un sábado por la tarde me encontraba confesando en la sacristía cuando me distraje Pensaba en la

-Estos son los registros de los alumnos de este año y de los años pasados, y no veo otra cosa.

Estaba muy preocupado; leía nombres, pensaba, miraba de arriba hacia abajo para ver si encontraba algo, pero.. nada Entonces dije para mí:

-¿Estoy soñando o estoy despierto? Efectivamente estoy sentado en mi mesa y la voz que he escuchado es verdadera

Y de pronto quise levantarme para ver quién era la que me había hablado y en efecto, me levanté Los muchachos que estaban a mi alrededor para confesarse, al ver que me levantaba tan de prisa y asustado creyeron que me había puesto enfermo y se acercaron a sostenerme; pero yo les aseguré que no me pasaba nada Seguí confesando

Una vez terminadas las confesiones, y de vuelta en mi habitación, miré y efectivamente vi sobre lamesa el registro con los nombres de todos los que hay en casa; sin embargo, no vi nada. Examiné el registro, pero no entendí cómo hallar la manera de tener sacerdotes -muchos sacerdotes y pronto- Miré otros registros que tenía en la habitación para ver si podía deducir por ellos alguna cosa,pero de momento no pude sacar nada en limpio Pedí otros registros a Don Carlos Ghivarello, pero fue inútil Siempre pensando en ello, hice que me pasaran los registros antiguos para obedecer el mandato de aquella voz misteriosa y observé que, de los muchos jóvenes que comienzan sus estudios en nuestros colegios para seguir después la carreraeclesiástica,apenas si perseveraba un quince por ciento, es decir ni siquiera dos de cada diez llegaban a recibir e hábito eclesiástico; se alejaban del santuario por asuntos familiares, por los exámenes en el liceo, por haber cambiado de voluntad

-lo que suele ocurrir en el curso de retórica- Y por el contrario, los que vienen -ya mayores casi todos- ocho de cada diez, visten la sotana y llegan a ello en menos tiempo y con menos trabajo. Me dije entonces:

-De estos estoy más seguro y pueden llegar en menos tiempo; esto era lo que buscaba Tendré que ocuparme especialmente de ellos, abrir colegios expresamente para ellos y buscar el modo de atenderlos de una manera especial El resultado se verá después, si lo que sucedió fue un sueño o una realidad"

Una preocupación de Don Bosco Tener cada vez más salesianos era una preocupación constante para Don Bosco Necesitaba más "hijos suyos" para sumar a los proyectos misioneros y todas las obras en favor de lajuventud que iba fundando En las llamadas vocaciones tardías encontró solución Esa preocupación permanece, y efectivamente, actualmente son jóvenes mayores los que luego de un proceso de discernimiento y acompañamiento manifiestan su deseo de hacerse salesianospara los jóvenes de hoy Pero los desafíos y motivos para dejar la congregación siguen siendo muchos y de nuevos orígenes El resultado se verá después Mientras tanto prevalece la pregunta: ¿quién más se anima a ser salesiano?^