Los acordes del silencio. Poesía (2020). Isaías Lorenzo by Hebel Ediciones

LOS ACORDES DEL SILENCIO P

Isaías Lorenzo

H E1 B E L

LOS ACORDES DEL SILENCIO P

Isaías Lorenzo

HEBEL ediciones 3

LOS ACORDES DEL SILENCIO. POESÍA © Isaías Lorenzo, 2020 © HEBEL Ediciones Colección Flama | Poesía Santiago de Chile, 2020 www.issuu.com/hebel.ediciones Diseño, edición y preludio: Luis Cruz-Villalobos Qué es HEBEL. Es un sello editorial sin fines de lucro. Término hebreo que denota lo efímero, lo vano, lo pasajero, soplo leve que parte veloz. Así, este sello quiere ser un gesto de frágil permanencia de las palabras, en ediciones siempre preliminares, que se lanzan por el espacio y tiempo para hacer bien o simplemente para inquietar la vida, que siempre está en permanente devenir, en especial la de este "humus que mira el cielo".

Dedicado a mis hijas Yeila y Glorialis, a mi nieta Camila

PRELUDIO

CUANDO ENCUENTRAS A UN BUEN POETA Cuando un día cualquiera Al pasar por una calle cualquiera O por un bar O en una isla O en un despliegue azul de las circunstancias Te encuentras a un buen poeta A uno verdadero De esos que no pueden dejar de cantar Así Como cantan los poetas Con su deambular oblicuo Con su voz prestada por las olas Y por los vientos de un huracán que ya no está Cuando te lo encuentras así De bruces A boca de jarro A quema ropa No puedes por ningún motivo Dejarlo ir Sin antes de que lance sus silencios esbeltos Sobre tu rostro Y que sus semillas caigan en tus manos Y que tus manos se multipliquen obsesivas Y repartan esos árboles que aún no brotan Árboles de bellos naufragios Necesarios. Luis Cruz-Villalobos 9

Parte I

SILENCIOS DE SUEÃ&#x2018;OS

LOS ACORDES DEL SILENCIO Sobre la verdad Mordida hasta la sangre Sobre las alas rotas de los ĂĄngeles Se oyen los acordes del silencio Sobre el hambre Oculta en el pan y en el olvido Sobre los ojos ciegos del Olimpo Se oyen los acordes del silencio Sobre la justicia Cortesana del poder y de la espada Sobre sus palomas decapitadas Se oyen los acordes del silencio Sobre la libertad Cautiva de sus verjas invisibles Sobre los dientes rojos de la bestia Se oyen los acordes del silencio Sobre la mentira Exaltada al altar del noticiario Sobre el discurso de polĂticos travestis Se oyen los acordes del silencio Sobre el mar Que finge seducir la playa Mientras devora los peregrinos del ĂŠxodo Se oyen los acordes del silencio 13

Sobre el odio Que en la sombra afila sus cuchillos Sobre la sonrisa parca del asesino Se oyen los acordes del silencio Sobre la esperanza Manchada por las luces de neĂłn Atesorando sus verdes imposibles Se oyen los acordes del silencio Sobre el traidor Que sueĂąa sus monedas de plata Y mira con altivez sobre su espalda Se oyen los acordes del silencio Sobre el miedo Que hiere el gesto y corta la palabra Sobre los ojos locos de la nada Se oyen los acordes del silencio Sobre el cazador Que asecha tras el sigilo de su lanza Mientras saborea la sangre de la presa Se oyen los acordes del silencio Sobre la paz Eterno parto de las armas Sobre los daĂąos colaterales Se oyen los acordes del silencio

Sobre la vida Breve hilo entre dos nadas Alimento y escarnio de la muerte Se oyen los acordes del silencio Sobre el beso Corrupto por los labios Manchado por el sexo Se oyen los acordes del silencio Sobre la dictadura Que ordena las orgias del verdugo Sobre la ausencia de los desaparecidos Se oyen los acordes del silencio Sobre la estrella Despojada de la magia y su vestido de luz En sicalĂptica desnudez de la materia Se oyen los acordes del silencio Sobre el grito Desesperado de Munch y de lo humano Sobre un puente de lenguas de sangre y fuego Se oyen los acordes del silencio Sobre el poeta Ingenuo aprendiz de hechicero Esclavo de sus propios sortilegios Se oyen los acordes del silencio.

PROMESA Hoy He vuelto Al lugar donde nunca nos encontramos Para no hallarte Para A solas con tu ausencia Besar el silencio que dejĂł tu palabra. Hoy Todo es exactamente distinto Aquella gaviota Que manchaste de verde con tus ojos Se desnuda En la eterna sonrisa del mar Las olas Arrastraron tu gesto de rosa sorprendida Y ha quedado Solo Tu recuerdo en la arena Tiritando Como un ciervo de cristal Por eso Hoy he vuelto Para cumplir la promesa de no encontrarte Para robarte Todo el horizonte con un sueĂąo.

ERĂ&#x201C;TICA Cuando tu cintura Se detiene en horizonte Puedo deshojar Tu aurora sobre mis labios Alzar tu sed Por la orilla de mis caricias imposibles Y humedecer El tibio aletear de tus senos Con el gesto sacrĂlego De un beso.

TU MEMORIA EN MIS MANOS Tu boca Tiene aún El sabor de los besos silvestres Tus manos El rubor de las caricias ocultas Por eso Te desnudas al amor Como las flores nocturnas Y tu cintura escapa como paloma asustada Cuando tu silueta Se oculta en mi mirada Me obligas A contar los pétalos De una estrella distante Y me cierras los ojos con palabras tibias Pero no importa Aún a oscuras Puedo crear tu imagen Porque mis manos De tanto acariciarte Tienen la forma de tu cuerpo.

GIRASOLES Por tus ojos. Mรกs anchos que espejos Por el azul orgullo La ocre tristeza Por la ansiedad del depredador El miedo de la presa Por el รกcido sabor de la sangre Por algo tan estricto como la soledad Porque ordenas mi demencia con tus labios Porque eres tan animal como el acto Y te abres fruta palpitante Porque eres temible y voraz Como el sexo del abismo Por todo eso Y porque estoy loco Me arranco esta oreja Con un desesperado sabor a Girasoles

CONFIRMACIÓN Eres La confirmación de que existo De que soy real Palpable Y no un simple sueño de dios Tú también confirmas La existencia de la rosa La actitud de abrazo de un árbol La desnudez de la gaviota Siento La hermosa experiencia De estar vivo hasta doler Tocar la hierba Arrancar los frutos de la luz Dibujar siluetas Que engañan al miedo El miedo De ser un sueño de dios O quizás El miedo absoluto De ser Trivialmente efímero Como tu propio sueño.

CANCIÓN PARA UNA NOVIA OCULTA Sé que estás Oculta en la penumbra de mis sueños Agazapada en mis cenizas como el Fénix Tras la piel de los besos que aún me faltan Sé que estoy En el fuego redondo de tu boca En la sinuosa danza de tu cuerpo En la húmeda caricia de tu sexo Sé que estamos Desnudos Abrazados En algún remoto lugar del universo Donde el acto del amor Siempre es posible Se ha convertido En un ritual Sagrado.

AZUL Hoy me duelen azulmente tus pupilas Duele tu loca primavera al andar El proxenetismo formal de las abejas Hoy me duelen azulmente tus pupilas Duele el tibio verano en tus caderas Las cĂłpulas accidentales del viento Hoy me duelen azulmente tus pupilas Duele tu soledad La hĂşmeda caricia Duelen los besos Rotos Mutilados por un ayer sin horizonte NĂĄufragos en los labios de tu olvido.

GRIETAS EN TU NOMBRE Copa abierta De ocultas soledades Fingido adiรณs De palomas en ocaso Te refugias En miedos vespertinos En la sangre de la rosa Los gallos te niegan y no cantan La piel del sexo se abre y te delata En el fondo de tu miedo Te vislumbro Sola y desnuda Gimiendo como una cruz Entre las grietas de tu nombre.

BRÚJULA Y ESPADA Sufro de un amor De vela henchida Amor de brújula y espada El horizonte Reta Mi nave sin anclas El verso peregrino Se abre la inmensa mar De céfiros traidores Veo sirenas que naufragan y no cantan De nuevo la tormenta El beso Que solo es beso Lo eterno en lo fugaz Luego La próxima partida Vuelvo a la mar Mi patria No me odies mujer Me voy Pero te dejo el beso Sufro de un amor De vela henchida Amor de brújula y espada. 24

HERIDA EN EL TIEMPO Tu voz Como un eco Eterno En los brazos del abismo Tu boca Anillo náufrago Signo sagrado del beso Extraña rosa de carne Tus ojos Quieto rocío En la agreste galaxia Tus manos Palomas inertes Petrificadas En rubias noches sin alma Tu gesto Como un pez Extraviado en el sueño Tú adiós Es una herida en el tiempo Tú casa Es ese triste lugar Donde naufraga el horizonte.

GÓTICA El beso En la noche A la orilla del cuerpo ensangrentado Se viste de imposibles La primavera del gesto Sueña Un jardín extraño Y un niño asustador de mariposas El beso En la basura Tijeras muertas Sudor del cielo Entre moscas asesinas Suicidas con sombrilla Y vértigo del alma El beso Es concéntrico Es música Del agua que se rompe Tiene sabor a sangre Hiere El filo Es el beso del verdugo.

ADOLESCENTE Busco La palabra exacta Desnuda y primitiva Que te derribe sobre la cruz de mi deseo Recortaré Tus vanidades Con mis tijeras infantiles Para estamparlas En mi secreta colección de pecados Arrancaré Todas las hojas a tu orgullo Y tendrás que refugiarte A la sombra de mis sueños Te encerraré En la gruta insaciable De mi sed Abrevaré mi fuego En tu humedad Te morderé los besos Respiraré tu aliento Apretaré tu risa contra mi pecho Y te abrazarás a ti misma Para que no escapen tus senos Rozaré con mis labios la orilla de tu piel Y haré Un horizonte con tu cuerpo.

LAS RUINAS Gotas De pesado silencio Caen Sobre rotas nostalgias La hiedra Mano verde Socava la piel de cemento Afloran ladrillos Como roja carne inerte Las ruinas son El cadรกver de una casa Solo una pared resiste Al olvido y al agua Entre la basura y las flores Sostiene en su pecho Un borroso juramento.

NOS AMAREMOS POR SIEMPRE Es el tatuaje sagrado De una joven pareja Lo grabaron en secreto Luego hicieron el amor La casa aĂşn era joven Los amantes Al poco tiempo se olvidaron.

DEMENTE Entonces Solo existías En el color de tus labios Aquella noche Me traicionaron los súbditos infantiles Dejé de ser El pastor de las nubes Que señalabas con tu dedo loco Te quise hablar Y huiste a la ermita de las risas Hoy El eco del tiempo Arrastra el grito De mi último beso Que moría en las esquinas Bajo las ruedas de un auto.

VIRGEN Y si al abrir tus pétalos llorara Este niño triste Que en mi germina Se romperán los labios de la noche Será amargo El rocío en la mañana Amarga Se verterá la savia Y si al abrir tus pétalos En risas Se rompiera Este niño triste Que en mi germina Ya no serías flor Serías beso Yo sería Jesús y tu María.

EFÍMERA Te alejas Y te vuelves transparente Como el agua de tu infancia Te toco Y te deshojas En un adiós de sirenas náufragas Para ti Se hizo el instante Las sensaciones efímeras Y las risas de la piel Para ti No son los dedos índices Las partidas de nacimiento Ni la gran palabra Para ti Es el breve El imperceptible orgasmo De la pompa de jabón.

EL SENDERO A la vera del camino Ademanes calcinados Rumbos equívocos Brújulas rotas Una voz clavada En las paredes del tiempo Filosas verdades Sobre la piel del miedo Ante mí Un sendero De piedras que se abrazan Al final Una mujer espera Abierta en horizonte Su boca un cáliz Ojos desnudos como el fuego Fatigado La toco como a un ángel Ella sonríe No era el final Era el principio Ella Era el sendero.

FUGA Aún te llamo Cuando el crepúsculo de tu sonrisa Se ha perdido En un horizonte de recuerdos Tu último beso Está aún tibio entre mis labios Temo morder su piel Y escape la esperanza Quedará mi sed Y podré rehacer tu imagen El viento Desnuda en la tarde Mujeres azules y húmedas como tú Que un día Se desangraron en el ocaso Persiguiendo La equívoca luz De los soles efímeros.

DECISIÓN Basta De esconderme en tus sandalias Saborear tus pasos como un ojo Basta De vagar por tus formas Como un ruiseñor inepto De golpear con imposibles tu sonrisa Y pedir perdón por pecados sueños Nunca más Te miraré a lo lejos Ni sorprenderé tu perfil en los cristales Ni te voy a confundir con una rosa Cuando pase a tu lado No te diré con voz suicida Buenos días Acuchillando versos en mi garganta Ahora Voy a pensar en el tiempo en que no existes En mi lugar como distancia Te sorprenderé Te quitaré los lentes Cerraré el libro en tus caderas No más dulces silencios No más silencios de palabras amargas.

SOBRE LA CRUZ DEL ALBA Es cierto Todas se han llevado algo La primera Robó Todas mis palomas blancas La segunda Mordió todos mis besos La siguiente tuvo que anidar entre espinos Y me dejó dueño de todas las culpas Es cierto Que otras Se han llevado cosas triviales Como los sueños Los caminos La esperanza Pero también es cierto Que aún para ti Tengo un amor imprescindible Que me hará retoñar Para que vuelvan Y aniden las palomas blancas Y en la resurrección De todos los besos Me absuelvas de todas las culpas

Para que abrazados Y sobre la cruz del alba Encontremos los caminos Y el sueĂąo Donde se desnuda la esperanza.

ESPECTRO Estas Atada A la soledad de tu sombra Con un beso de la muerte entre las manos Ya el miedo No enamora tu mirada nocturna El loco Cortó los hilos de la noche El grito se perdió Los ecos temen acercarse Tu labio huye entre las aguas Entre cánticos y vértigos Adoras dioses paganos En el horizonte de tu silueta Se acurrucan los perros vagabundos Ahora Danzan en el techo Los elefantes de espuma Que pedías a los magos Ya no tendrás un amanecer Con mariposas de vidrio Solo tendrás una tarde De gorriones incendiados.

MÁSCARAS Qué lástima Se te murió el amor En el vientre de la vida En un aborto de palomas niñas Y en la farisaica primavera de tus labios Se pudren besos tardíos En tus ojos Las cenizas dibujan un nuevo disfraz Máscaras de antiguos espectros Y no te importa Que afuera Una carcajada de flores Te haya negado el vuelo.

NAUFRAGIO El mar Cansado Desnuda sus caricias Saetas de silencio Brotan de tus ojos somnolientos Un grito Rueda por los acantilados Perdiéndose en el mar Los cocoteros Sonríen satisfechos Bajo un pulcro abismo de luz El aliento de la playa Borra tus huellas Y los peces sorprendidos Atrapan el eco de mi voz Te acaricio como un extraño Sonríes con lejana tristeza Nuestra mirada se pierde en el mar Sabemos Que lo nuestro es un naufragio.

SOMBRA Y LUZ Eres La sombra del puñal El proyecto de la herida Eres La pólvora sensual El sueño del relámpago El fuego que late La voz primaria El ojo crepuscular La luz ciega Eres El eco del tambor El filo de la lanza También La palabra paz Tierna como un abrazo.

TIMIDEZ

Mi verso ante tu imagen se encabrita Como corcel picado por los celos Y mi rima perfecta se marchita Y se deshoja como una flor de hielo Pero Luego Nada te digo Y se me acaba el tiempo Y se desmiembra mi eternidad en horas En tiempos rotos y mancos de pavor Instantes de un siempre que te llora Por ser nunca Mudo Sin valor.

COLLAGE Se marchitarán Las puertas Entre las bisagras boreales De un Cristo de lujo No basta Para quitar las espinas al sol El vértigo de un grito Y tendrán que buscar A las Giocondas de sonrisas mancas Que Se habrán gastado mi inocencia.

DE TU SONRISA De tu sonrisa de estrellas fugaces Que como flor de luz deja el resplandor Volvieron a mi cual fieras voraces La inquietud, la esperanza y el temor Y quien tuvo la culpa, mis ojos audaces Tu belleza limpia como un surtidor O mis sueĂąos en tus aguas pertinaces Que desnudos desafiaron el pudor Culpa de tu sonrisa y tu ternura De tu cĂĄlida piel acariciante De tu voz de miel y primaveras Brota el temor que pierde mi cordura Y aviva una esperanza agonizante Oculta en las cenizas de mi hoguera.

TE ABRES ESTE OCTUBRE Te abres este octubre y entre ardientes flores Tú emerges mujer, en actitud de rosa Y te vuelves crisálida en fulgores Que te han hecho más bella, más hermosa Y habitan en mis secretos corredores El ancho sueño, la breve mariposa Y un beso para la pequeña diosa Que descendió para hacernos mejores Me mira, y más que mira me besa Cuando liba tus jugos maternales La duendecilla pícara y traviesa Ella ahuyentará mis sombras invernales Cuando entregue a mis sueños la sorpresa De abarcar el cielo con sus alas estelares.

CÓMPLICE LA NOCHE Imperceptible, cómplice la noche Fulgor instantáneo, estrella errante Instante trivial, se detiene un coche Segundo ruin, eternidad amante Raudo abrirá el fuego del diamante Herméticos labios de duro broche Pétreo olvido, ni filo de reproche Asustan al numen, de mi yo distante Bregó perdido, cual nave a la deriva Buscó tu boca, con fervor poseso Y en mis labios quedó crucificado Si nada ofreció, tu boca esquiva No tengo la culpa, de robar un beso En justicia eres tú, quien ha robado.

RESPLANDOR Como el sol que deja el resplandor Luego de tocar todas las cosas Tu mirada se fue y dejó un color Dejó un perfume de olvidadas rosas Tus pupilas, extrañas mariposas Desnudan esa tonta palabra amor Ecos y espinas, en un viejo ruiseñor Arpas oxidadas y mujeres hermosas Color de rosas, aroma de rojos Matices, que hoy fingen amaneceres Sutiles melodramas de colores No engañarán, estos cansados ojos Que descubren tempranos atardeceres En las auroras de mentidos fulgores.

EL EQUINOCCIO DE LA ROSA Tu ausencia En la noche es Redonda soledad de plata cruda Abierta pradera de silencios Una grieta En el horizonte del tiempo Una herida En la carne de mis besos Pero tu ausencia No es Fría sangre de olvido Que brota en un adiós sin fin Tu ausencia es La tibia sangre del recuerdo El olvido Es el cadáver devastado De una ausencia sin memoria La ausencia Es cruz efímera De inagotables resurrecciones

El olvido es Substancia de la noche La ausencia es una extraña luz Mezcla de sol y abismo 48

Germen de beso Que en ti abrirรก En perpetuas estaciones El equinoccio de la rosa.

Parte II

SILENCIOS DE VIGILIA

HORIZONTE Y ESPEJO El horizonte Es un espejo Sangra sueños perdidos Cristal puro Herida de aurora Anhelo con filo El espejo Es un horizonte De brazos abiertos Hambre de réplicas Cazador vespertino Ocaso sin filo Hambre de abrazos Cristal de sueños De horizontes y espejos es el camino.

RELOJ Ahí estas Tic tac Matemático Perfecto Sin atrasar una lágrima Sin adelantar una esperanza Mercenario del tiempo Triturador de sueños En tus dientes Está la sangre de mis días Por eso te temo En la soledad Cuando te oigo gotear los segundos Desde el lugar más triste de la noche.

SILENCIO Silencio Aunque los muertos No ocupen Asiento determinado en la sonrisa Para que se extravĂen Los relojes y los espejos Para que no nos alcance La palabra Para romper Con un martillo de risas El cristal De las historias olvidadas.

MERCADER Para ti No son las verdes olas de los campos Por ti Los buitres picotean el huevo de la esperanza Tus hambres son incoloras Has cambiado tu frente Por una corona de gritos Tus sombras Se abrazan a un espejo Que converge hacia el olvido Para ti No es la quimera Para ti Son las espaldas del tiempo.

BLOQUEO AÑO 1966 Hoy He llorado en la escuela Porque no quiero dibujar En papel de cartuchos Porque entonces Mis caballitos no serían blancos Serian tristes y grises Y yo quiero caballitos blancos La maestra Me mira y sonríe A ella También le gustan los caballitos blancos Me habla del imperialismo Del bloqueo Y yo digo que si Que comprendo Pero no es cierto Jamás podré comprender Porqué al imperialismo No le gustan los caballitos blancos.

EL ALBATROS El albatros Dibuja Su soledad en la tarde La angustia de sus alas Son el presagio El enigma El vértigo Pronto Detenedlo Que ya caen las cáscaras del cielo Y cuando nos quedemos sin ángeles Tendremos al albatros.

ENIGMAS Será un enigma Cuando viaje En la última luz de tus ojos Descalzo Y herido de palabra Quizás Me convenza De lo inútil De encontrarse a sí mismo En los espejos ajenos En los surtidores imposibles del vacío Será un enigma Tener la muerte a la distancia de un gesto En el aullido De la palabra pisoteada Tras las fronteras invisibles del sueño Estamos ciegos Enamoradamente ciegos Y jamás comprenderemos Que las estrellas Son peces dormidos en la noche.

UNIVERSO Gotas de luz Como ojos lejanos De antiguos dioses muertos La tierra a la deriva Pecio extraviado De naufragios del tiempo El cosmos sin trono Solo Espirales de piedras Ciclos de angustia La carne Es la memoria Polvo perdido De estrellas que agonizan La vida Un accidente En la alquimia del fuego Sabiduría de ciegos Pájaros de plata que ignoran a los Ángeles Pesados cristales que no me vislumbran Estoy en tus ojos Soy el anillo perfecto Soy el beso de dios.

FALSEDAD En la orilla de la vida Atrapo Mentiras en mis redes En la espuma que hacen las palabras Hay fuegos que se esconden Camino Entre murmullos Y huellas de palabras Camino Agazapado en mi mirada Donde pastan bandadas de alcatraces El tiempo Se desgarra en espejos El sol es hipรณcrita Y la sombra me aguarda.

HIJA Carne de mis sueños De mis sueños beso Tu luz Muerde la piel de la nostalgia Desgajas mi cruz En ramas de inagotables auroras Por ti he nacido Eres carne de mi carne En sucesivas tardes de septiembre Sabré Que la cruz es blanda Solo por esa tarde soy eterno En ti resucito para siempre A semejanza de dios Para ser verbo.

LA PALABRA La palabra Es un pájaro extraño Deja su huella en el silencio Es un pájaro enigma De vuelo limpio Y alas de beso De vuelo tortuoso Y alas de cieno La palabra es un pájaro incierto Un arcano Su vuelo La palabra Es un pájaro extraño Que anida en el viento.

FÉNIX El sueño Pájaro que huye El gato Signo de la noche El ala es el nervio El felino la angustia La soledad es la sangre Del tiempo que no pasa El hechicero Teje hilos de agonías sucesivas Borda su red en el abismo Las puertas se abren como fauces El umbral es un límite afilado El sueño comprende Su piel es un tatuaje de mordidas Su carne fue moldeada por los dientes El sueño es un fénix que vive y sangra También el recuerdo de otras fugas circulares Cae al abismo Hasta su otra noche La eterna En que romperá Un huevo de cenizas Un huevo sin recuerdos Levantará vuelo Y volverá a creer 64

Que es un pรกjaro que huye A su lado El gato El signo de la noche La angustia del cazador frustrado De nuevo el fuego abre tus alas El vuelo Es una cruz que no te mata La fuga Es una cruz que no te salva.

NIÑO BAJO LA LLUVIA Llueve Es primavera Y los relámpagos Con sus juegos eléctricos Iluminan un niño Los gritos del cielo Aterran ingenuidades de vidrio Se humedecen los recuerdos Un diluvio De rosados cuchillos Circunda el arca de los sueños Envío Una paloma a mi infancia Y vuelve con una rama de asombros Pronto He de cerrar las puertas A los nuevos duendes Para que este niño postrero No aprenda a llorar bajo la lluvia.

NATURALEZA MUERTA Aire metafísico De una tarde que bosteza Quebrados acordes Salobres resonancias El sol se desgrana en ocres tibios Secretas hojas muertas Cálidas soledades La cruz Como un signo sin memoria Es cierto que esa mujer no existe Pero te aguarda en el horizonte De tus ojos ciegos El árbol Abre sus brazos desnudos A la ausencia del cielo En el polvo Un ladrido huérfano Desangra su amor sin perro.

PAISAJE CON MUJER SOLITARIA Esas calles Transpiran asfaltos y nostalgias Entre niños soñadores de bicicletas Una anciana Ata su perro al viento de la tarde Aún peina canas de sales infantiles Sus guiños Provocan el sexo de las flores Porque hoy Rompió su espejo Y perdió las tijeras Que recortaban Por las noches la esperanza.

PAISAJE NUCLEAR Rígida paz De atardeceres sin rostro Gritos Claman abrazos imposibles Un árbol de fuego Desnudo en su sangre El otoño nuclear Ha llorado sus hojas Pájaros rotos de alas mancas Mariposas radioactivas Que temen al viento Ácida Cae la lluvia Son lágrimas de dios Sobre los hongos del diablo La última flor Abre sus pétalos de ceniza Se pudre la raíz De una esperanza sin nombre.

RAZÓN DE ESTADO Han dejado la noche En su oscuro sexo Lascivos fantasmas de la infancia Merodean rincones de antiguas inocencias Subrepticias escaleras sayas Despiertan En estas fieles adúlteras A estas aquellas niñas santas Pecarán azules prostitutas Y príncipes sicópatas Sobre alfombras encantadas Delipravadas reinas y tiernos borrachos Sobre sucias charcas Pecarán ancianas monjas Mendigos y ministros de finanzas El presidente en la oscuridad Desflorará las virginales arcas S.O.S. Regresen las estrellas Cubran el sexo de la noche Es de público interés Es por una grave razón Por una razón de estado.

UNA TARDE CUALQUIERA Una tarde La infancia Cae como una hoja seca Y se espantan los pájaros huérfanos del sueño El verde se oculta Sonriendo despedidas Y nos decimos adiós A nosotros mismos A nuestras mermeladas tardes Fue una tarde Que ya nunca encontraremos Y dije adiós a mis juguetes.

VERDADES Hoy he caído Sobre la verdad descalza Ayer Quise tocar el horizonte Pero me estrellé En una lámpara de sueños Mientras una anciana Discutía con su insomnio Afuera El reloj Vuelve a comenzar Por el segundo Los cuchillos se oxidan Y volverán a crecer las flores.

PAISAJE Cañaveral Caricia verde Sobre la roja tierra Palmas despeinadas De camisas blancas A lo lejos Los ojos grises y azules De las montañas Ríos de espejos Que se rompen en lágrimas Semillas de oros Quedaron en la piel de la mañana En el horizonte Cansado Se duerme un sol naranja.

ORACIÓN DEL NÁUFRAGO Silencios Horizontes desnudos Velas esquivas como el amor que pasa El grito A la deriva En los sordos mares del tiempo Los ojos espantados Gritan al cielo oculto tras el cielo Es la oración del náufrago Los ojos caen de rodillas sobre sus ojos Los ojos regresan a sus ojos huérfanos La isla es su casa Su casa de silencios De horizontes desnudos De velas esquivas como el amor que pasa.

ÍNDICE

PRELUDIO. 9 PARTE I. SILENCIOS DE SUEÑOS Los acordes del silencio. 13 Promesa. 16 Erótica. 17 Tu memoria en mis manos. 18 Girasoles. 19 Confirmación. 20 Canción para una novia oculta. 21 Azul. 22 Grietas en tu nombre. 23 Brújula y espada. 24 Herida en el tiempo. 25 Gótica. 26 Adolescente. 27 Las ruinas. 28 Nos amaremos por siempre. 29 Demente. 30 Virgen. 31 Efímera. 32 El sendero. 33

Fuga. 34 Decisión. 35 Sobre la cruz del alba. 36 Espectro. 38 Mascaras. 39 Naufragio. 40 Sombra y luz. 41 Timidez. 42 Collage. 43 De tu sonrisa. 44 Te abres este octubre. 45 Cómplice la noche. 46 Resplandor. 47 El equinoccio de la rosa. 48 Sombra y luz. 50 PARTE II. SILENCIOS DE VIGILIA Horizonte y espejo. 53 Reloj. 54 Silencio. 55 Mercader. 56 Boqueo año 1966. 57 El albatros. 58 Enigmas. 59 Universo. 60 Falsedad. 61 76

Hija. 62 La palabra. 63 Fénix. 64 Niño bajo la lluvia. 66 Naturaleza muerta. 67 Paisaje con mujer solitaria. 68 Paisaje nuclear. 69 Razón de estado. 70 Una tarde cualquiera. 71 Verdades. 72 Paisaje. 73 Oración de náufrago. 74

Isaías Lorenzo González Pérez. Caibarien, Villa Clara, Cuba. Poeta y narrador, abogado de profesión, ha obtenido premios como autor de ensayos jurídicos en su país, aunque siempre ha escrito poesía y narrativa nunca se había animado a publicarlos. Tiene en proceso de edición actualmente82 una novela.